Nos levantamos y llegamos a Amboise. Aparcamos cerca de la Iglesia St. Dennis (S.XII) en un parking de pago que parece de un centro de salud.
En Blois ya desempaquetamos puesto que iba a ser nuestra estancia todos los días del recorrido, en un appartcity muy bien situado cerca del centro y el castillo, pero en el que no tenían aire acondicionado y además nos cambiaron nuestro estudio para 4 por dos de dos personas con las correspondientes molestias de andar cambiando de habitación para la vida en común (comidas, ropas, etc…).
Paseamos por Blois para ver el castillo por fuera, el Hotel de Ville donde puedes entrar a los bonitos jardines del Ayuntamiento con miradores y la estatua de Juana de Arco (al igual que en Normandía, nos la encontraremos en cada ciudad y cada iglesia por la que pasamos), me sorprendió que en las guías no he leído sobre este jardín.
Un aviso importante: Blois (mucho más en particular, y el Loira en general) tiene plaga de mosquitos e insectos en general, las farmacias exponen carteles tan grandes como el escaparate con anuncios de repelentes que tuvimos que comprar. Son auténticas nubes de insectos que si no tienes cuidado se te meten por la boca, la nariz o incluso las orejas. (De ahí que por las noches no se puedan abrir las ventanas del apartamento y la necesidad de aire acondicionado). (Más sobre la vista a Blois en etapa posterior).