Y se acabó… solo nos dio tiempo a dar un paseo por Drottningattan y ya de vuelta de la misma manera que habíamos venido, cogiendo el autobús. Os vuelvo a recomendar el hecho de que si os pilla un vuelo en horario de comida, en el aeropuerto no hay prácticamente nada, comprarlo antes!!
La verdad es que Estocolmo es una ciudad que vale mucho la pena, absolutamente nada masificada, de hecho no conozco a demasiada gente que haya ido allí. Ahora forma parte de muchas excursiones a los fiordos noruegos, que empiezan o terminan en la capital de Suecia. Pero de verdad creo que se debe visitar por sí misma y dedicarle unos días. A mí, el primer día, y no sé si fue por el frío, pero me dejo igual...fría. Pero según fueron pasando los días me atrapo cada vez más y más. Es de una arquitectura bonita, con historia y su gente es muy agradable. El clima y su precio son un problema, pero si tenéis la ocasión de ir, estoy segura que no decepcionará a nadie.
TACK OCH HEJ DÅ!!!