Madrugamos un poco el sábado, toca no gastar muchas piernas y nos acercamos en tranvía de nuevo a la "Isla de las Máquinas". Además, en Nantes el transporte público es gratuito para todo el mundo los sábados y los domingos, pero no los festivos que caen fuera de estos dos días.
A las 10 abre la "galería de las máquinas", llegamos un poco antes y nos ponemos a la cola para comprar las entradas, 8,50€ cada una. La galería no es muy grande en tamaño y tiene unos cuantos animales mecanizados, te lo van contando y los van moviendo con voluntarios, eso sí, en francés. Se tarda en torno a 1 hora en verlo tranquilamente.
Con la entrada se puede acceder a la pasarela superior del hangar para ver desde arriba el taller, y descender por las "ramas" de un "árbol".
A las 10 abre la "galería de las máquinas", llegamos un poco antes y nos ponemos a la cola para comprar las entradas, 8,50€ cada una. La galería no es muy grande en tamaño y tiene unos cuantos animales mecanizados, te lo van contando y los van moviendo con voluntarios, eso sí, en francés. Se tarda en torno a 1 hora en verlo tranquilamente.
Con la entrada se puede acceder a la pasarela superior del hangar para ver desde arriba el taller, y descender por las "ramas" de un "árbol".
Cuando terminamos nos acercamos al carrusel de los mundos marinos, se puede acceder para montar (eso es sobre todo más bien para niños y sus padres con ellos), y también se puede acceder para verlo desde las tres pasarelas exteriores en sus tres niveles. Por haber comprado el ticket para la galería de las máquinas el acceso a las pasarelas nos costó 4,50€ cada uno.
El carrusel está curioso, las máquinas que girar simulan monstruos y seres marinos de las profundidades.
El carrusel está curioso, las máquinas que girar simulan monstruos y seres marinos de las profundidades.
Cuando estás en la pasarela superior del carrusel, o en la pasarela del hangar, puede ser que en ese momento tengas la suerte que llegue el gran elefante, que visto desde arriba también gusta.