Noruega (18 días) y Dinamarca (8 días) en coche + camping ✏️ Blogs de Europa Norte

Día 18. Geirangerfjord, Dalsnibba, carreteras de Águilas y trolls (de Geiranger y Åndalsnes).

Otro de los grandes días de Noruega, y que obliga a esperar un día con buen tiempo.
Hacemos el ferry por Geirangerfjord de 1,5 h, precioso; por el megáfono van dando información de los sitios que se recorren.

De vuelta, subimos al mirador Dalsnibba (peaje de 120 Nok en la subida final). Las vistas son impresionantes, tanto, que se pierde la perspectiva. Bajando hacia Geiranger paramos también en el mirador Flydalsjuvet, también muy bonito.

Bajamos a Geiranger y continuamos por la Carretera 63, que no tiene desperdicio hasta Åndalsnes…los tramos más conocidos son la subida de las Águilas, justo a la salida de Geiranger, con un muy bonito mirador (Ørnesvingen) en la parte superior, que da otra perspectiva de Geiranger y el inicio del fiordo, con el mirador Dalsnibba al fondo. La carretera continúa por otro tramo bonito hasta el ferry de Eisdal a Linge (106 Nok), donde empalma con la carretera de los Trolls (Trollstigen).

El mirador de los Trolls es el que más nos gusta del país, y no es decir poco. Desde el mirador se ven las curvas imposibles de la carretera, la cascada Stigfossen y las paredes verticales que marcan el inicio del valle glaciar.

La carretera acaba en Åndalsnes, pequeña ciudad llena de campings y cabañas con muy buena relación calidad- precio y un microclima sorprendentemente suave (dentro de los estándares noruegos). Nos quedamos en una cabaña en el primer pueblo hacia el Oeste (Veblungsnes), alojamiento Lensmannsgaarden (500 Nok con cocina y baño).

Día 19. Åndalsnes - Ålesund

Vamos a Ålesund (1,5h) y visitamos la ciudad tranquilamente durante unas 3-4h, sin entrar en ningún museo. La ciudad es bonita y agradable, con una original restauración. Subimos en coche al mirador Fjellstua, con bonitas vistas, y volvemos a Åndalsnes.

Esta vez nos quedamos en el Camping Åndalsnes (195 Nok en tienda), bien equipado.

Día 20. Alrededores de Åndalsnes (Trollvegen, Rampestreken) y desplazamiento a Eikesdal

Vamos a ver el Trollvegen, un paredón vertical de 1100 m de altura, el más alto de Europa. Se llega por la carretera E136 hacia el sur, a solo 10 km de Åndalsnes, bien señalizado. Por la mañana está a contraluz y no se aprecia bien, quizá es mejor ir por la tarde. Se puede ver con cierta frecuencia a gente haciendo salto base (salto + paracaídas).

Volvemos a Åndalsnes (sin interés) y subimos a pie al mirador Rampestreken; se puede subir desde el mismo centro de la ciudad; el camino aparece cerca de la calle Parkvegen. La subida es técnicamente sencilla, pero cansada, ya que sube sin tregua un desnivel de 500 m. Se tarda cerca de una hora sin parar. Las vistas del pueblo y el fiordo son bonitas aunque las hemos visto mejores y más accesibles. El mirador tiene el detalle de tener una parte de suelo transparente, por lo que da más impresión de lo habitual. En todo caso, si se llega aquí recomiendo seguir subiendo unos 30 minutos más, hasta una cabaña en la que hay unas vistas muchísimo mejores del fiordo y de los dos valles (el de Trollsvegen y Tollstigen). Si hace buen día y apetece caminar es un paseo muy bonito, pero no es lo más impresionante que vemos.

Volvemos al coche y tomamos la carretera 64 hacia el este, bordeando el fiordo (se convierte en la 660 en Äfarnes); en 1h30’ llegamos a Eikesdal, tras pasar por la orilla del bonito lago Eikesdalsvatnet, con vistas hacia la imponente cascada Mardalsfossen. Dormimos en el camping que está 100 m antes del peaje para subir a la cascada Mardalsfossen, 200 Nok una cabaña sencilla sin agua.

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Día 21. Cascada Mardalsfossen y carretera panorámica Eikesdal – Sunndalsøra – rumbo sur (Enden)

Hacemos el paseo hasta la cascada Mardalsfossen, la segunda más alta de Noruega y una de las más bonitas. La única pega es que la orientación dificulta hacer buenas fotos tanto por la mañana como al atardecer…quizá a mediodía sea mejor momento. Hay un peaje de 30 Nok para hacer unos 3-5 km hasta el aparcamiento, y desde allí unos 45-60 minutos a pie de subida suave y camino sencillo, apto para cochecitos de bebé, y con miles de frambuesas disponibles en agosto. Recomendable.

Volvemos al coche y recorremos la nueva carretera panorámica con tramos de asfalto y de grava que va de Eikesdal a Sunndalsøra, haciendo una U de 65 km, con un peaje de 100 Nok. Las vistas desde la subida son bonitas pero después el paisaje es un altiplano aburrido (una vez se han visto otros en el país) y se hace muy pesado. No recomiendo hacer esta vuelta, supone 2 h que no aportan demasiado después de lo que hemos visto. Parece mejor opción ir por la carretera principal, que en teoría son 45 minutos menos, y sin peaje.

En Sunndalsøra cogemos la carretera 70 hacia el sudeste, e iniciamos nuestro regreso hacia el sur. En Oppdal la carretera E6 baja directa hacia el sur. En Hjerkin se puede seguir la E6 hacia el suroeste o bien coger la carretera 29 hacia el sudeste, que en Folldal se convierte en la carretera panorámica 27 que atraviesa el Parque Nacional Rondane; esta opción es unos 30’ más lenta, y es la que hacemos.

Paramos en un par de miradores señalizados. La zona es bonita, con mucho bosque y ríos con rápidos...el paisaje no tiene nada que ver con la zona de los fiordos, y está bien para tener otra imagen de Noruega…aunque no sea tan llamativa. Dormimos en uno de los muchísimos campings que hay al pie de la carretera (Enden Camping); preguntamos en varios y el precio de las cabañas sencillas (sin agua) está siempre entre 350-400 Nok.

Día 22. Enden – Drøbak

Pasamos la mañana en la carretera, bajando en dirección Oslo, y pasamos de largo de la capital (ya habíamos estado en otro viaje, y no nos sobran días) para ir a Drøbak, un bonito pueblo a 35 km al sur, para visitar a unos amigos. Pasamos la tarde por el centro, es agradable para estar una horita.

Día 23. Drøbak – Gotemburgo (Göteborg) (Suecia)

Llegamos a Gotemburgo en unas 3 h. Es una ciudad en la que se puede estar un día completo, o algo más si se quieren visitar parques y museos.

Pasamos la tarde paseando por el centro, no hay nada particularmente llamativo pero hay muy buen ambiente, quizá demasiado, después de la extrema tranquilidad noruega. Como nos ha sabido a poco nos quedamos una noche en la ciudad (Camping Liseberg Askim Strand, 160 Sek, con cocina, está bien).

Día 24. Gotemburgo y rumbo a Lund

Damos un paseo por el bonito barrio de Haga y el resto de la mañana en el impresionante parque Slottsskogen, donde se puede estar un día entero si se va con críos; hay muchísimas zonas de juegos y un zoo con fauna escandinava.

Por la tarde seguimos la carretera en dirección sur, y acampamos cerca de Lund-Malmö, haciendo noche en el camping municipal de Lomma (Habo Ljungs camping), sin duda el que tiene la peor relación calidad-precio de todos los que hemos estado en todo el viaje (310 Sek, siendo normalito tirando a cutre). El camping más cercano a éste está al otro lado de Malmö, y tampoco sabíamos el precio, así que nos quedamos.

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Día 25. Lund, Malmö, puente Öresund, Dragør y llegada a Copenhague

Día de visitas cortas. Por la mañana paseamos por Lund, una pequeña ciudad universitaria muy agradable, excelente para pasear 2-3 h.

Después vamos a Malmö; tras leer varios diarios decidimos ir solo al paseo marítimo y a ver el célebre “Turning Torso”, un edificio moderno que domina todo el paisaje en varios kilómetros a la redonda. De allí seguimos hacia Copenhague por el puente de Öresund. Antes de pagar comprobad que la tarifa que indica la máquina corresponde a vuestro vehículo (390 Sek para un turismo), ya que nosotros habríamos pagado 980 Sek de no haber llamado al timbre de aviso para que nos cambiaran la tarifa.

De vuelta en Dinamarca, vamos a Dragør, un pequeño pueblo pesquero con un barrio que mantiene la arquitectura típica danesa...es muy similar a Ribe, por lo que es especialmente recomendable para quien no pueda llegar a Ribe…se puede hacer en 1 h sin problemas.

Vamos finalmente a Copenhague y nos quedamos en el camping Bellahoj. Los campings de Copenhague están lejos del centro y/o están mal valorados. Vamos al que está más cerca del centro, tiene buen precio (160 Dkk la noche para 2 adultos, tienda y coche), WiFi gratis y duchas gratis. Por lo demás es tremendamente precario, no demasiado limpio y con un personal poco profesional.

Día 26. Copenhague (1): nordeste y centro

Bajamos en coche a Copenhague porque en el camping no alquilan bicis con silla de bebé. Miramos en varias páginas dónde se puede aparcar de manera gratuita cerca del centro y, sorprendentemente, se puede. Aparcamos primero junto al restaurante Il Gabbiano, a 500 m de sirenita (calle Langeliniekaj). El aparcamiento es gratis pero limitado a 2 h, lo cual es suficiente para vislumbrar la Sirenita rodeada de cientos de personas, fuente Gefion, Iglesias St Alban, Aleksander Nevski (desde fuera, está cerrada) y Marmokirke y vuelta al coche cruzando la fortaleza (Kastellet).

Cogemos el coche y aparcamos junto a la iglesia de San Marcos (plaza Sankt Markus); es una zona gratuita sin límite de tiempo; algunas aceras están limitadas y otras no, conviene mirar los coches de alrededor para ver si tienen la pegatina de residentes o los discos horarios en una hora reciente.

Vamos a pie al ayuntamiento (unos 20’) y recorremos Strøget, la principal calle peatonal cuyo encanto fue sustituido por tiendas y carteles con todas las franquicias que pueden verse en cualquier gran ciudad europea. Cualquiera de las calles de alrededor tiene más interés. Volvemos al ayuntamiento para hacer la visita guiada de Sandeman’s (conviene reservar), hay grupo en inglés y en castellano, dura 2,5 - 3h y el precio es la voluntad. Este tipo de guías suele funcionar muy bien y ésta no es una excepción. Se recorre el centro hasta Nyhavn, la calle con canal más emblemática de la ciudad, y se acaba junto a la Marmokirke, una visita muy recomendable.

Damos un paseo más por el centro y volvemos al camping.

Día 27. Copenhague (2): Centro, sur y Christiania

Aparcamos de nuevo junto a San Marcos y vamos a ver Vor Frue kirke (ningún interés), la torre redonda (no entramos) y caminamos hasta el palacio Christiansborg, que tiene un mirador gratuito con muy buenas vistas, pero es lentísimo si hay mucha gente, ya que hacen pequeños grupos que van entrando en el único ascensor disponible. No se pueden meter carritos de bebé ni hay sitio para dejarlos.

Por la tarde vamos al parque de atracciones Tívoli (110 Dkk por adulto, menores de 8 años gratis, atracciones aparte), que es más una curiosidad histórica parcialmente actualizada que un parque moderno.

Volvemos al coche y vamos a Christiania, aparcando gratis en una calle entre Christiania y el Paperoen (Bodenhoffs). Christiania es una visita muy interesante, aunque si se tiene cierta aversión al cannabis, sus derivados, sus vendedores y sus consumidores no es el mejor ambiente. Hay una serie de normas a respetar en la zona de comercio (no hacer fotos, no correr, no gritar) donde hay un ambiente algo enrarecido, pero el resto de la “ciudad” es un sitio muy tranquilo y con muy buen ambiente. Se recomienda pasear por la muralla oriental, llena de árboles y rincones bonitos y, en general, deambular por un sitio muy especial.

Vamos a cenar a Papiroen (“Copenhaguen street food”), una nueva zona de comida callejera civilizadamente recogida en una antigua nave industrial, con comida del mundo a precios más o menos razonables para el estándar danés. Se come en mesas corridas compartidas con quien va llegando, y se llena al atardecer; recomendable.

Al día siguiente recogemos y fin de vacaciones.

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