14/08/2012.-
Lunes 18 de Junio de 2012, amanecíamos otro día más en USA, el noveno para ser más exactos y empezábamos a tener esa sensación de que llevábamos allí toda la vida.
Suelos enmoquetados, máquinas de hacer hielo por los pasillos, un Ford Edge aparcado frente a la habitación, desayunar huevos revueltos con bacon... todo empezaba a convertirse en algo sumamente cotidiano y familiar. Recuerdo que esa mañana estuvimos conversando con la recepcionista del hotel y noté que hasta nuestro aletargado "english" era cada vez más fluido, lo cual me alegró el día.
Sobre las 7 y media de la mañana ya estábamos preparados para empezar esta etapa y tras configurar el GPS nos pusimos en marcha. La primera parada que hicimos fue un poco por casualidad, el café todavía no me había hecho efecto y me pasé el cruce del Tioga Pass así que continué para buscar un sitio donde dar la vuelta, en esto que a lo lejos vi el Mono Lake por lo que ya puestos le propuse a Macarena ir hasta allí pero como iba dormida no hizo falta discutir el tema.
Llegamos a una especie de parking en donde no había nadie y vimos a lo lejos un caminito que llevaba hasta la orilla del lago, nos llamó mucho la atención que justo donde empezaba el camino había una especie de buzón donde se pedía que se depositaran 3 dolares por visitar el lago.... (
Un rato más tarde y ya otra vez en la buena dirección llegamos al desvío que nos llevaría hasta Yosemite a través del Tioga Pass, en ese momento recordé la alegría que me entró allá por el mes de Mayo cuando consulte la web de carreteras del Estado de California y vi que estaba abierto al tráfico.
oo
Las vistas desde la carretera son impresionantes y nos detuvimos en varios miradores a disfrutar del paisaje, unos cuantos kilómetros mas adelante, en la parte más alta del paso, se encuentra una zona de lagos que merece la pena ver ya que son preciosos, los más importantes son:
Ellery Lake:
Tioga Lake:
Llegamos al paso que da entrada al Parque Nacional de Yosemite y utilizamos por última vez el Anual Pass (cuyo coste había sido de 80 dólares), en total gracias al pase nos ahorramos 20 dólares, ya que lo utilizamos 4 veces (Gran Cañón, Bryce, Zion y Yosemite) y la entrada sin pase costaba 25 dolares.
Nuestra siguiente parada fue en la zona de Dana Meadows, aquí pudimos ver un precioso lago rodeado de pinos y un río que más adelante terminaba en una especie de presa que formaba una piscina natural que realmente invitaba al baño.
La verdad es que estábamos sorprendidos, aún no habíamos llegado al valle y todo lo que estábamos viendo era precioso. La siguiente parada fue en Tuolumne Meadows, que no se encontraba a mucha distancia de Dana Meadows y que era uno de los sitios de interés que marcaba el mapa del parque.
Y cuando ya creímos que estaba todo visto, apareció ante nosotros un lugar que no me queda más remedio que subrayarlo y ponerlo en negrita porque realmente es increíble, se trataba del Tenaya Lake y en él decidimos hacer una especie de picknic de media mañana para recrearnos con las vistas y descansar un rato.
Madre mía, era ya casi la una de la tarde y todavía no habíamos llegado al valle, nunca imagine que el Tioga Pass diese tanto de sí y eso que aún nos quedaba un último punto donde parar, se llamaba Olmsted Point y desde ahí pudimos ver por primera vez el Half Dome.
Antes de enfilar la bajada hacía el Valle de Yosemite, paramos a repostar y a tomar un café en una estación de servicio que se encontraba justo antes del desvío. Desde ese punto el Valle ya no quedaba muy lejos, sin embargo a medio camino paramos de nuevo al lado de un puente desde donde había una vista chulísima y por donde corría un pequeño riachuelo que formaba unos bonitos saltos de agua.
Nuestro primera parada una vez llegados al Valle fue Bridalveil Falls, no hace falta seguir ninguna indicación para encontrarla ya que desde la carretera se ve perfectamente, solo hay que aparcar enfrente y andar por un sendero que conduce directamente a los pies de la cascada (duración de la visita 35 min.)
oooooooioo
Ya de nuevo en el coche y adentrándonos en el Valle vimos también por primera vez uno de los iconos del parque, El Capitán, esa inmensa mole de granito de 1.000 metros de altura que te da la bienvenida a Yosemite.
Nuestra siguiente parada fue Swinging Bridge, aquí hay que estar atentos para encontrarlo ya que desde la carretera no se ve y el cartel que lo anuncia es más bien pequeño. La pista está en que su parking es un poco más grande que los anteriores.
Para nosotros este fue el punto más bonito de todo el parque, nos hubiésemos quedado allí todo el día, no le faltaba de nada, un puente de madera que cruzaba el río Merced, una playa de arena fina para bañarse, una pradera preciosa, las Yosemite Falls de fondo.... una belleza de sitio.
No teníamos ninguna prisa por marcharnos de allí e hicimos otra especie de picknic de media tarde, parecida a la del Tenaya Lake. Cuando estás en un sitio así el tiempo es lo de menos así que no podría indicar cuanto estuvimos allí, pero más de una hora seguro.
Nos pusimos nuevamente en marcha para aparcar esta vez en el Curry Village, ya que era el punto más cercano hasta donde se podía llegar en coche para poder realizar el trail que lleva hasta la Vernal Fall. Este trail fue el más largo que hicimos en todo el viaje, parece que no se va a llegar nunca, sin embargo se hace más llevadero porque vas por medio de un bosque con sombra y no por el desierto a pleno sol.
Si se continua el trail se llega hasta otra cascada que se llama Nevada Fall, a la cual no fuimos pero si que vimos desde el Glacier Point nuestro siguiente destino y último del día. Habíamos gastado más tiempo del previsto y pensando en llegar con algo de luz al mirador, decidimos dar por finalizada la jornada de hoy en el Valle de Yosemite.
Desde donde estábamos al Glacier Point, el navegador nos indicaba más de una hora de camino y aunque teníamos miedo de que a una determinada hora cerrara la carretera de acceso al mirador, por el camino nos encontramos el Tunnel View y paramos para hacer unas cuantas fotografías del Valle desde el que para nosotros fue el mirador más bonito de todo el parque. (Hora aproximada las 7 p.m.)
Subiendo por la carretera que lleva a Glacier Point vivimos uno de los momentos más emocionantes de todo el viaje y para Macarena sin duda el que más, os cuento, unos kilómetros antes de llegar al mirador y en un claro del bosque vimos lo que al principio creímos que era un Lobo, sin embargo tras pararnos y verlo más detenidamente dedujimos que se trataba de un Coyote (por el tamaño). Como no queríamos que se marchara sin hacerle alguna foto de recuerdo le lanzamos una rosquilla, que era lo único que llevábamos de comer y aunque suponíamos que no debía hacerse, no nos pudimos resistir (total, por una no le iba a pasar nada).
La rosquilla, que estaba de vicio, no solo nos había gustado a nosotros sino que a nuestro amigo también ya que tras comérsela se subió a una roca que había cerca del coche y nos miró con cara de decir "dame más", mientras tanto Macarena le sacó unas fotos chulísimas. Estoy convencido de que se lo hubiera traído para Medina si hubiese tenido a mano un collar y una correa... jaja (donde hay 9 caben 10: Turco, Oldface, Gordo, Blanqui, Telly, Xena, Nacha, Mina, Nala y el Coyote de Yosemite). vimeo.com/34745534
Después de la experiencia vivida con el Coyote llegamos al mirador y aparcamos por allí pero sin dejar de mirar hacia atrás por si veíamos de nuevo a nuestro amigo (quien quita de que nos hubiese seguido).
Dimos una vuelta por el mirador y tras hacer infinidad de fotos buscamos un sitio donde sentarnos y disfrutar con las vistas y el atardecer. Si os fijáis en las fotos había en el cielo una especie de bruma que no dejaba ver con nitidez el valle, supusimos que se trataba del agua en suspensión de las cascadas ya que el día había estado esplendido.
0Vernal Fall & Nevada Fall:ooooooGlacier point:
Ya de noche nos pusimos en camino hacía nuestro hotel en Oakhurst, yo suponía que no tardaríamos mucho en llegar ya que estábamos a menos de 40 kilómetros sin embargo no conté con que la carretera estaba llena de curvas y había que ir bastante despacio por lo que el trayecto se hizo largo y pesado (una hora larga de camino). A eso de las 10 de la noche llegamos al hotel con un mareo impresionante por culpa de la dichosa carretera.
Hicimos el registro en el hotel y nos fuimos a buscar un sitio para cenar pero como no había mucho donde escoger terminamos en un Burguer King, había sido un día duro y habíamos gastado muchas calorías por eso no nos dio ningún remordimiento de conciencia comernos 2 " XL cheese burger" con todos sus extras....
Conclusiones del día: El parque de Yosemite es una joya natural, precioso y a la vez enorme por lo que hay que tener muy en cuenta los tiempos. El Tioga Pass es una maravilla y como tal requiere hacer muchas paradas y dedicarle tiempo así que no todo fue Yosemite en la etapa de hoy.
Lo mejor: Todos los sitios que visitamos fueron impresionantes, sin embargo destacaría 3 lugares únicos donde vivimos unos momentos inolvidables, son Tenaya Lake, Swinging Bridge y Glacier Point.
Lo peor: Quizás la opción de hacer noche en el parque sea mejor que ir hasta Oakhurst, sobre todo si se tiene la intención de volver de nuevo a Yosemite al día siguiente, lo digo porque te ahorras el tener que ir y volver por una carretera estrecha y llena de curvas que hace perder mucho tiempo.