Nuestra semana viajera va tocando a su fin y todavía nos quedan algunas cosas pendientes por hacer, así que ponemos rumbo hacia Arrecife, que es la capital de la isla, para ver alguno de sus monumentos más emblemáticos: El Castillo de San Gabriel y el Puente de las Bolas que están en el paseo marítimo (donde también hay un quiosco con una oficina de información turística), el Charco de San Ginés y el Castillo de San José que alberga el Museo Internacional de Arte Contemporáneo, del que no puedo opinar porque no entramos, pero es uno de los centros de arte y cultura cuya visita se incluye al comprar el bono turístico de 6 centros.
Después de un breve paseo, nos dirigimos a La Geria, que se extiende entre los municipios de Tías y Yaiza y fue delcarada Paisaje Protegido a finales de los 80.
Como veréis en las fotos, el sistema de cultivo de las viñas (también lo vimos con higueras) es muy ingenioso y totalmente adaptado a las características volcánicas del terreno.
Consiste en hacer un muro bajo en forma de hilera o semicírculo para proteger las vides del viento, y gracias a la capa de picón o rofe que cubre el suelo, se reduce la evapotranspiración del agua favoreciendo así el desarrollo de las plantas. No debe de funcionar nada mal porque además de un paisaje de lo más singular, Lanzarote tiene vinos con denominación de origen.
Como veréis en las fotos, el sistema de cultivo de las viñas (también lo vimos con higueras) es muy ingenioso y totalmente adaptado a las características volcánicas del terreno.
Consiste en hacer un muro bajo en forma de hilera o semicírculo para proteger las vides del viento, y gracias a la capa de picón o rofe que cubre el suelo, se reduce la evapotranspiración del agua favoreciendo así el desarrollo de las plantas. No debe de funcionar nada mal porque además de un paisaje de lo más singular, Lanzarote tiene vinos con denominación de origen.
Una vez en Yaiza visitamos la iglesia parroquial y una de las Casas de Aloe que hay repartidas por varios puntos de la isla. En el mismo edificio, además de una tienda dedicada a la venta de productos hechos con vino, aceite y Aloe Vera (sobre todo cremas y jabones de mil colores y aromas), había otras dos de joyería artesana y un bar.
Por último hicimos una parada en Tías para visitar la casa museo del premio nobel de literatura José Saramago. Por razones de horario, pues sólo abren de 10 a 14h, siempre que pasábamos por allí ya estaba cerrada, así que le hicimos un hueco en nuestra última mañana.
Sin embargo no pudo ser porque acababa de entrar un grupo bastante numeroso y nos tocaba esperar, así que Jota dijo que se nos echaría encima la hora de ir al aeropuerto y tuvimos que irnos.
Luego comimos, recogimos las maletas y a las tres habíamos devuelto el coche de alquiler.
Sin embargo no pudo ser porque acababa de entrar un grupo bastante numeroso y nos tocaba esperar, así que Jota dijo que se nos echaría encima la hora de ir al aeropuerto y tuvimos que irnos.
Luego comimos, recogimos las maletas y a las tres habíamos devuelto el coche de alquiler.
Muchas gracias por haber leído hasta aquí y espero que os haya resultado entretenido.