La señora de la casa vino el viernes por la noche y nos dijo que aunque teníamos que dejar la casa a las 10 de la mañana nos podían guardar las maletas y podíamos ducharnos en una ducha que tenían fuera y así podíamos aprovechar el día. Es un gesto de agradecer, pero a mi marido le había salido alergia al sol y preferimos no pasar el día en la playa.
Volvimos a subir al faro de la Mola. Aprovechamos para parar antes de llegar el pueblo que hay una zona a mano izquierda donde hay unas vistas muy bonitas de la isla. Se ve entera! Lo reconoceréis porque siempre hay alguien parado haciendo fotos.
Sobre las 12 pensamos que ya podíamos ir a coger el Ferry hacia Ibiza. Tuvimos un poco de mala suerte porque justo al mediodía hay un parón de una hora en el horario, cuando suelen salir cada media hora.

Al llegar a Ibiza hacía muuucha calor. Así que nos metimos a comer en el Mc Donalds. Lo primero que vimos. Antes dejamos la maleta en una consigna que hay al otro lado de la acera de la estación marítima. Cuesta 4 € cada maleta pero merece la pena, ya que así te mueves sin ellas. El casco antiguo es precioso pero hay que subir bastante cuesta y en plena hora de claror no apetece tirar del equipaje. En el puerto te indica donde encontrar la oficina de información al turismo que está en una plaza. Allí te dan un mapa y te informan de lo que puedes ver.
Una vez acabamos de ver el casco antiguo estuvimos mirando tiendas en el puerto. Están todas!
Era un poco pronto, pero decidimos ir hacia el aeropuerto. El bus sale del puerto, justo donde te deja el Ferry. A nosotros nos entraba con el billete de ferry, sino vale 3'50 €.
Y hasta aquí nuestro viaje por la maravillosa isla de Formentera. Mi pareja y yo no nos definimos como una pareja de playa, pero quizás es que no habíamos encontrado las adecuadas.

Sin duda es una isla a la que nos gustaría volver. A los que tenéis hijos, creo que es ideal. Estaba lleno de familias. Todas las playas son muy accesibles y puedes moverte fácilmente por la isla.
Os animo a todos a ir. Nosotros pensamos que podríamos haber pasado una noche en Ibiza, ya que lo poquito que vimos nos gustó. Ya habrán más ocasiones!