Antes que nada me presento;Fabiánandrés para servir a Uds en lo que pueda,viajo con mi esposa y mi peque de once años.
Salimos de Valencia a las 15:45.Ningún problema con el embarque ni con el avión.Llegamos puntuales a Schiphol.Primera pega;las maquinillas de los billetes para el tren que lleva a la Estación Central de Amsterdam.Las de antes de las aduanas no admitían ni monedas ni billetes.Pasamos la aduana y a la tercera máquina pillamos una que admitía monedas(no ví ninguna en todo el viaje que admitiera billetes).
Llegamos con llovizna y unos trece grados(no os fiéis demasiado del Google Earth para lo de la temperatura;marca alguno por encima).
Tras andar por el Damrak,llegamos a Damstraat 22 donde teníamos el hotel;De Gerstekorrel.Segundo problema;mi Visa no admitía el pago de la totalidad del alojamiento.Menos mal que el personal se enrolló perfectamente y me admitió pagar en dos veces;la mitad en ese momento y el resto algunos días después.Nos dan la habitación 16;inciso,había pedido por Internet una habitación mejor por razones familiares y me complacieron,chapeau.La habitación mediría unos 20 metros cuadrados y bastante limpia.Tras descargar bártulos,salimos a dar una vuelta y pillar un super para comprar.Hay montones de la marca Albert Heijn,uno grande al lado del Magna Plaza y detrás del Palacio Real pero nosotros compramos en un Albert Heijn to go que hay en el mismo Damrak;la botella de agua de litro y medio costó 0,95 más 0,25 por una especie de impuesto para el reciclaje del plástico(como antes aquí con los cascos de cristal),una vez la botella vacía la metes en una máquina que hay en un rincón del super y te sale un papelito por los 0,25 para descontar en la próxima compra.
Tras cenar cerca del monumento a los caídos en la segunda guerra mundial el cual estaba ese día guardado por dos guardias con corona de flores conmemorativa pasamos por el barrio rojo con cuidado de no meternos demasiado y vemos algunas vitrinas con chicas y el coffe-shop Paradiso al ladito mismo del hotel(menudo olorcillo).
Volvemos al hotel y vemos a nuestra querida recepcionista fumando un porro(ya decía yo que su hello de saludo había sido un poco largo,hellllllllou).
Bueno,a descansar que la peque ya estaba rendida y nosotros queríamos madrugar.
Salimos de Valencia a las 15:45.Ningún problema con el embarque ni con el avión.Llegamos puntuales a Schiphol.Primera pega;las maquinillas de los billetes para el tren que lleva a la Estación Central de Amsterdam.Las de antes de las aduanas no admitían ni monedas ni billetes.Pasamos la aduana y a la tercera máquina pillamos una que admitía monedas(no ví ninguna en todo el viaje que admitiera billetes).
Llegamos con llovizna y unos trece grados(no os fiéis demasiado del Google Earth para lo de la temperatura;marca alguno por encima).
Tras andar por el Damrak,llegamos a Damstraat 22 donde teníamos el hotel;De Gerstekorrel.Segundo problema;mi Visa no admitía el pago de la totalidad del alojamiento.Menos mal que el personal se enrolló perfectamente y me admitió pagar en dos veces;la mitad en ese momento y el resto algunos días después.Nos dan la habitación 16;inciso,había pedido por Internet una habitación mejor por razones familiares y me complacieron,chapeau.La habitación mediría unos 20 metros cuadrados y bastante limpia.Tras descargar bártulos,salimos a dar una vuelta y pillar un super para comprar.Hay montones de la marca Albert Heijn,uno grande al lado del Magna Plaza y detrás del Palacio Real pero nosotros compramos en un Albert Heijn to go que hay en el mismo Damrak;la botella de agua de litro y medio costó 0,95 más 0,25 por una especie de impuesto para el reciclaje del plástico(como antes aquí con los cascos de cristal),una vez la botella vacía la metes en una máquina que hay en un rincón del super y te sale un papelito por los 0,25 para descontar en la próxima compra.
Tras cenar cerca del monumento a los caídos en la segunda guerra mundial el cual estaba ese día guardado por dos guardias con corona de flores conmemorativa pasamos por el barrio rojo con cuidado de no meternos demasiado y vemos algunas vitrinas con chicas y el coffe-shop Paradiso al ladito mismo del hotel(menudo olorcillo).
Volvemos al hotel y vemos a nuestra querida recepcionista fumando un porro(ya decía yo que su hello de saludo había sido un poco largo,hellllllllou).
Bueno,a descansar que la peque ya estaba rendida y nosotros queríamos madrugar.