Día 8 (02-01-19): Crucero por las bahías de Lan Ha y Halong (segundo día). Tarde en Cat Ba.
Esta etapa será muy breve porque fue un día de bastante relax y además poca explicación puedo dar. La verdad es que este par de días de crucero vienen muy bien para descansar del trote anterior, si hubiera sido un viaje más largo habría estado acertado dejar Halong para el final, tanto para descansar como por el nivel del lugar, difícil de superar.
Nos levantamos sobre las 7 de la mañana rodeados de aquel mágico paisaje creado por un majestuoso dragón que bajó de los cielos hace tropecientos años. Espectacular, no hay palabras para describirlo. Por la noche no pasamos nada de frío, tuvimos la calefacción puesta un buen rato antes de acostarnos y la temperatura se ha mantenido. Menos mal, porque en esa zona la humedad es brutal...
Desayunamos unos huevos fritos, pancakes con banana y miel y café con leche. Aun siendo la comida más flojilla del crucero, es más que suficiente y celebramos que por fin nos acabamos todo el plato
Sobre las 8 nos dirigimos a la casa flotante a recoger a Donna, que había pasado la noche allí y seguimos navegando sobre una hora o así hasta llegar a la zona donde haremos kayak. Se nota que ese día las temperaturas han subido y se está mejor, con menos ropa encima tenemos suficiente y nos pasamos casi todo el día en cubierta disfrutando del paisaje. Por el camino nos cruzamos con los barcos que se dedican a la pesca del calamar, un clásico en esta zona:
El kayak nos lleva sobre una hora y cuarto, recorremos las Three hidden lagoons, tres lagunas entrecruzadas a las cuales se accede a través de un túnel. Una vez dentro de la primera, se llega a la segunda y a la tercera por otros dos túneles más. Después de explorar cada una de estas dos últimas, se regresa a la primera y desde allí, por donde hemos entrado, volvemos a mar abierto.
Luego seguimos navegando durante media hora más, en teoría se va hasta la bahía de Bai Tu Long, pero yo no tengo muy claro que esto sea así, me parece que está demasiado lejos. Diría que nos seguimos moviendo por la zona de Lan Ha Bay y el norte de Ha Long, cosa que ya me parece bien.
Echamos el ancla y de nuevo comemos con horario vietnamita: otro banquete de platos variados, incluyendo cerdo con zanahorias y cebolla, verdura, rollitos de pescado, salchichas de pescado con verdura, ostras al horno, y como no, arroz blanco. De postre esta vez toca una fruta que sabe a mezcla entre manzana y pera.
Después de comer había un rato reservado para nadar y hacer snorkel, pero nosotros nos quedamos en la cubierta superior tomando un café y contemplando el paisaje que nos rodea. Está claro que hace muchísimo menos frío que el día anterior, si no no estaríamos ahí tan tranquilos.
Sobre las 13 iniciamos el regreso, tenemos más de una hora y media de camino hasta desembarcar en el muelle de Ben Beo. Una vez allí, nos recogen en coche para llevarnos de regreso a la oficina. Disfrutamos de las vistas y de la vida en el mar por última vez:
Eran cerca de las tres y decidimos ir a ver las vecinas playas de Cat Co 1, 2 y 3. Primero vamos andando hasta Cat Co 1, se llega en 10 minutos caminando desde el paseo de Cat Ba Town. Por desgracia para nosotros, están haciendo obras: construyen un complejo que consistirá en tres megaedificios brutales, uno en cada una de las playas. Van a desgraciar todavía más el entorno de la localidad de Cat Ba para potenciar el turismo de playa, una pena, pero es lo que hay.
Debido a las obras, no pudimos acceder a la calle que lleva hacia Cat Co 2, igualmente con todo aquel movimiento y ajetreo de construcción tampoco nos apetecía mucho ir. Lo que sí hicimos fue recorrer el camino entre Cat Co 1 y Cat Co 2, que serpentea por la costa al borde de los acantilados.
Desde ese tramo hay bonitas vistas, aunque se terminan al llegar a las playas y ver esas moles de cemento y hormigón que ocupan todo. Los tres bloques en conjunto forman parte de un mismo resort enorme, por lo que pude leer en los carteles promocionales
Tras la visita fracasada a las playas, volvimos al Cannon Fort Cat Ba Hotel a hacer el check in de nuevo, nos dieron una habitación similar a la del día 31, pero daba al otro lado y es algo más ruidosa porque hay un bar musical cerca. Aunque realmente, no nos molestó demasiado.
Salimos de nuevo a dar una vuelta, y esta vez fuimos en dirección contraria a las playas, donde hay una especie de lago y el puerto pesquero, pero está todo muy dejado y sucio, esta zona ya no está enfocada al turismo y se nota.
Tras el paseo ya estaba anocheciendo y decidimos tomar una cervecita en un bar que tenía buena pinta, aquí al igual que en Tam Coc las Hanoi Bia son de 450 mL, así que cuidadín que es fácil acabar ligeramente eufóricos (o como cubas, depende de cada uno). Luego fuimos a cenar a un bar que vimos al lado del hotel con buenos precios, hamburguesa con patatas y salteado de setas y arroz por 130.000 dongs (para beber nos pusieron té gratis, aunque no me lo acabé porque a esas horas no me apetecía demasiado). Los platos eran muy abundantes y económicos, la carne es algo más cara, pero por ejemplo mi plato de setas y arroz fueron 35.000 dongs (ni 2 euros al cambio).
Tras la cena nos retiramos a preparar el equipaje, ducharnos y descansar, aunque habían sido dos días de bastante relax. Al no poder hacer las actividades acuáticas de nadar y snorkel por el frío, descansamos muchísimo en el barco (a tener en cuenta si hacéis este tour, que es bastante relajado si no se pilla buen tiempo). El pueblo de Cat Ba estaba prácticamente vacío, imagino que es un destino turístico típico veraniego como cualquier zona de costa.
Y tras otra agradable jornada en la costa de Cat Ba, nos fuimos a dormir, que al día siguiente nos tocaba el último traslado: la vuelta y última tarde en Hanoi, la capital de Vietnam.