Recién llegada de Dublín, me paso para contar cositas de la visita .
Lo primero es que intentamos comprar las entradas online el mismo día y no pudimos por problemas con trajeta... Menos mal. Nos ahorramos 4€ que supongo te meten de cargos de gestión y de cola, cero, no había ninguna. Fue el lunes, con frío y agua, a lo mejor más entrada la primavera hay colas, pero este lunes no había ninguna.
A mi en particular no me hizo mucho chiste. Es verdad que el edificio es una maravilla, y la exposición está bien montada, pero pagar 24€ por persona me parece una burrada. Si quieres audioguía la tienes que pagar a parte , y no hay nadie por allí a quien preguntarle nada, así que apáñate como puedas.
Te hacen una cata guiada con un chupito de cerveza donde hablan lo más rápido que pueden, así que si no controlas mucho el inglés, no te enterarás de nada. No es obligatoria, si no quieres entrar, puedes saltártela. Lo mejor es que te dan unos bombones jeje, que para lo que te han cobrado, pues por lo menos dan algo.
Si quieres lo de la academia de tirar una pinta, lo tienes que pagar aparte. Nosotros no lo hicimos. Hasta ahí podíamos llegar
Lo del Gravity Bar está chulo, pero hay que andarse con ojo porque no hay mesas para todo el mundo, así que como no te espabiles te quedas de pie.
Lo que sí me pareció buena idea es que la pinta no te la tienes que tomar obligatoriamente allí. Entonces, como nos había dado la hora de comer, nos tomamos una pinta en el Gravity Bar (la acompañamos con una bolsa de patatillas que compramos en el café de la segunda planta) y la otra la pedimos comiendo en el Brewer's Dinning Hall que es un pequeño buffet que está en el lugar que ocupaba el antiguo comedor de los trabajadores. Creo que en la 4ªplanta. Comimos muy bien y bastante barato para lo que es Dublín. También tiene carta. Yo veo muy recomendable ir a visitar la Guinnes con vistas a terminar con hora de comer y hacerlo allí aprovechando la pinta que te dan. Además de éste , hay otros dos restaurantes en la misma planta algo más caro, pero tampoco una locura. En fin, que me llevé una grata sorpresa, menos mal
En fin, que a mi no me parece una visita imprescindible ni mucho menos y no la recomiendo. Pero para gustos los colores, claro está
Como curiosidad, decir que la Guinnes Storehouse está muy cerca de la iglesia de St James, que tiene un cartelón bien grande que dice The Camino beguins here. Me hubiera encantado visitarla, pero ya se me hizo tarde y no pude.
Y otra cosa, nosotros fuimos desde el centro en taxi y nos costó 12 euros. Me pareció bastante asequible sobre todo si tenemos en cuenta que el ticket del tranvía que nos dejaba cerca costaba 5€ por persona... O eso nos dijeron.
Bueno, un saludo y ¡¡ a pasarlo bien!!