Mala experiencia en hotel Bahia Principe Ambar. Punta Cana ✈️

Me gustaría compartir los siguientes hechos:
- Checkin: mal, no nos traian las maletas a la habitación, hora y media esperando, tuvimos que ir a buscarlas a recepción. Tampoco nos dieron las tarjetas canjeables por toallas, cuando fuimos a reclamarlas nos trataron como si las hubieramos perdido.
- Habitación: mal. Reforma cutre, muebles antiguos lacados mal pintados por encima, cajones que olían mal, termostato no funciona, no hay tendedero para toallas en el balcón, la cortina que da acceso al balcón no tiene abertura que coincida con la puerta, la televisión no tiene canales sintonizados y hay que hacer 80 clicks en el mando para encontrar algo. Según la señorita Marta "aqui no viene la gente a ver la tele"
- Baño: mal, no hay colgadores para la ropa cuando vas a ducharte y tienes que tirarla al suelo, el baño no tiene puerta y la mampara de la ducha es trasparente, nada de intimidad, si entra un camarero o viene visita se encuentran con un show gratis. Una bañera sin sentido en el salón, cisterna haciendo ruido toda la noche, enchufe del lavabo diferente al resto de la habitación, en la ducha el agua se sale por encima de la alcachofa.
- Jardines: bien, bien cuidados y buena música ambiental.
- Lobby: mal, no hay escenario para la animación, si hay algún espectáculo tienen que andar moviendo mesas
- Coffe shop: regular, el café estaba bien pero no conseguí que me pusieran un frappé porque nunca tenían la batidora disponible. Me ofrezco a comprarles una.
- Restaurante principal: regular, la comida no estaba mal pero para algo tan sencillo como echar guarnición al gazpacho teníamos que rebañar los cuencos. Hay que levantarse de la mesa por turnos para que no te la quiten, el último zumo del desayuno tuvimos que tomarlo de pie porque los camareros habían recogido nuestra mesa y un matrimonio la había ocupado a pesar de que avisamos que íbamos por zumos y pedimos que no retiraran nuestro servicio.
- Restaurante de la piscina: poca variedad y señorita que te atiende muy antipática.
- Piscina: Muy mal, pequeña, ocupada por encima de sus posibilidades, todas las tumbonas ocupadas desde primera hora, gente dando vueltas para encontrar un hueco, todos hacinados, costaba trabajo incluso entrar en el agua, las tumbonas ocupaban todo el borde, el bar de la piscina apestaba a after, la gente muy pasada de rosca, turismo de poca calidad.
- Playa: nefasta, todas las tumbonas ocupadas desde antes del desayuno, y luego permanecían vacías. En teoria está prohibido hacer eso, pero no hacen nada para que se cumpla. Según la señorita Marta "no podemos hacer nada". Los dos días que aguantamos allí tuvimos que poner las toallas en el suelo en el único hueco con sombra que encontramos debajo de un arbol al lado de unas escobas y rastrillos que usaba un señor para limpiar la playa, algo como el cuarto de la limpieza.
- Check out: mal, la señorita Marta se comprometió a enviarnos unos maleteros a las 3 y todavía les estamos esperando.

A los dos días cancelamos y nos fuimos a otro resort del complejo que tiene mejor nota y supera a Ambar en todo. Gracias por esos dos días inolvidables.

@CarIos siento lo que te ha pasado. Traslado tu mensaje a este zona de malas experiencias.

Un saludo