Información de la
zona sur:
Ziguinchor es la ciudad principal de la zona, sin nada especial que mencionar, salvo el elemento humano. Estuve 2 noches en el hotel Le Flamboyant, sencillo, correcto, con aire acondicionado, nevera y una piscina pequeña. Camas sin mosquitera, pero todos los días echan un insecticida en las habitaciones. Los precios son diferentes según la habitación dé al jardín (27.000 francos,41€) o a la piscina (19.000, 29€), estuve en las dos, y considero que no vale la pena pagar esa diferencia.
Cap Skirring es la localidad de playa por excelencia de la Casamance. El núcleo es pequeño y lo más interesante, como siempre en Senegal, es el tipismo de sus habitantes. Y la playa, que en esta época no está en su mejor momento por las abundantes lluvias, con algas, agua algo barrosa, aunque limpia y templada como en el Mediterráneo. Es infinita, solitaria, virgen y salvaje con exuberante vegetación. En invierno, temporada alta, habrá más gente.
Excursión a la
isla de Carabane Vale la pena recorrer los manglares por las tranquilas aguas del interior hasta llegar a Carabane, una curiosa isla que tiene cierto encanto, pero tampoco nada especial. Mejor si te cuentan algo sobre la venta de esclavos siglos atrás. Recomiendo también que te cojan unos cocos para ver cómo los nativos se suben a las palmeras y porque tienen una carne rica, tierna y jugosa (me refiero al coco, no a los nativos, que seguramente también
) y por supuesto, beberte el líquido
Precio por coco, 100 francos, 15 céntimos de €
ya que suben, mejor comprar varios...
En verano es posible ir en piragua (con motor) desde el mismo Cap Skirring, son unas dos horas ida, pero es agradable ir viendo los manglares, la exuberante vegetación, aves etc. Nos cayó un buen chaparrón a la ida, llevan un plástico para no mojarnos. El precio inicial, 100€, quedó reducido a 50 tras el regateo. Íbamos 3 turistas, más barato con más gente, ya que ese es el precio de la embarcación, gasolina, guía, piloto más un grumetillo...
El hotel en Cap Skirring fue
La Tortue Bleue, que recomiendo sin la menor duda por su excelente relación calidad-precio. A unos 7 minutos a pie de la playa en un lugar tranquilo, tiene solo 3 habitaciones amplias, cómodas, acogedoras, con nevera, ventilador, jardín...se puede cenar por unos 4-5€. El único inconveniente son los enormes gallos cantando ya antes del amanecer.
La doble con cama grande cuesta 26€; el desayuno, bastante completo, son 4,50 por persona (zumo, fruta, a veces yogur, bollería, mantequilla, huevos, café, leche, mermelada...)
Traslados: taxi compartido (sept place) entre Ziganchor y Cap, son 1.700 (2,60; alrededor de una hora); entre Ziganchor y la frontera gambiana en Zelety (unas dos horas, 3,80€)
Costa norte de Casamance
Kafountine. Magníficamente situada en la costa norte de la Casamance, a unos 40 km de Gambia y al inicio de los extensos manglares que ocupan una gran parte de esta región, esta localidad senegalesa es un enclave ideal para pasar unos cuantos días disfrutando de sus preciosas playas, excursiones por los atractivos manglares, paseando por los campos de arroz y palmeras, visitando los pueblos cercanos, conociendo y contactando con la amable población local, asistiendo a actuaciones musicales, contemplando la exótica descarga de pescado de los numerosos y coloridos barcos pesqueros, admirando la rica y variada fauna de aves, reptiles e insectos fundamentalmente y cómo no, disfrutando unas temperaturas perfectas, especialmente entre los meses de noviembre y la primavera y unos cielos despejados con seguro de sol.
Playa. La playa es infinita a lo largo de toda la costa hasta la frontera de Gambia, de arena blanca, fina, virgen, sin construcciones, salvo algún hotel abandonado. Únicamente la afean en una pequeña zona, las instalaciones, bastante discretas y rústicas en todo caso, de la principal industria de esta zona de la Casamance, la pesca, con pequeños hornos y secaderos para conservar el pescado. Vale la pena visitar este enclave para observar el movimiento humano, los diferentes trabajos y cómo no, la vistosa descarga de pescado en la misma playa desde los bonitos barcos decorados con alegres colores. Las horas punta son a primera de la mañana, hacia las 8 y por la tarde alrededor de las 4 o 5. A pocos metros de de esa zona, y tanto hacia el norte como hacia el sur, la playa es un paraíso, ya que no hay prácticamente nadie a lo largo de varios kilómetros. Los paseos, con la marea baja, especialmente, son imprescindibles por ser todo un lujo y una fuente de placer, así como, por supuesto, los baños, con un agua limpia y cálida, muy agradable incluso en pleno invierno.
La
excursión más típica y recomendable de la zona es recorrer los interminables
manglares en piragua con motor. Se sale desde el embarcadero de un hotel abandonado y durante varias horas se navega entre los atractivos canales de diferentes anchuras contemplando la vegetación y sobre todo las numerosas aves que allí tienen su hábitat: preciosas águilas blancas, ibis, espátulas, pelícanos, cormoranes etc. También se visita un poblado cuyo acceso solo es posible en barco, lo que ha propiciado el cultivo masivo de una planta prohibida pero muy solicitada. A buen entendedor...
Otra opción es hacer por los manglares e islas una
excursión en moto, acompañado de uno de los jóvenes del pueblo. Dura varias horas y cuesta unos 19€.
Otras visitas recomendadas son el
jardín botánico, un tanto casero y humilde, pero interesante por la información que aporta el encargado sobre los usos medicinales de las diferentes plantas, y el
museo diola, también sencillo, pero que resulta sugestivo con las explicaciones de quien lo enseña.
Abene es una localidad a 7 km de Kafountine, conocida por su carnaval, su festival de música y por poseer, dicen, el árbol más grande de toda África. En realidad es un conjunto de varios troncos de ceiba unidos que forman un colosal ejemplar con una descomunal envergadura en la copa, gran altura y sobre todo un sistema de raíces espectacular que llega a formar espacios independientes como si fueran habitaciones. En ellas se meten las parejas para tener relaciones sexuales, ya que se considera que el árbol tiene poderes que facilitan la fecundación. De hecho, estando allí, vi entrar a una pareja a las doce menos cuarto y a las doce y diez ella ya salió preñada
Transporte: desde Brikama en Gambia, un taxi compartido a la frontera senegalesa cuesta 50 dalasi, un euro; desde allí a Kafountine,1.000 francos, 1,50 €. Si no se quiere esperar a que se llene el taxi, se paga completo con 7.000 francos, 10,75 €. De Kafountine a Ziganchor, capital de la Casamance, son 2.500 (3,85 €). De Ziganchor a Cap Skirring, el punto más turístico de la región, 1.700 (2,60 €)
Alojamiento Los hoteles en Senegal son bastante caros en relación a su calidad, es difícil encontrar un alojamiento bueno a buen precio. Hay varios hoteles en Kafountine en la misma playa, por ejemplo, el Bendoula, que tiene varias cabañas un tanto descuidadas, con un restaurante algo caro y muy alejado del pueblo; el Esperanto Lodge, en un sitio precioso con playa y laguna, pero lejos del pueblo; también con cabañas y una relación calidad-precio poco recomendable. La mejor opción, un paraíso sin duda, es el
Mamá María, un hotel sencillo, sin lujos, pero con suficiente comodidad para disfrutar de un entorno absolutamente maravilloso, no solo por la misma playa, a la que se accede directamente, sino que además tiene una enorme laguna de un kilómetro de largo llena de nenúfares y donde abundan las aves: patos salvajes, garzas, ibis, martines pescadores etc; en el enorme jardín del hotel se ven varanos de un metro, loros salvajes de colores, urracas de largas colas azules, buitres etc...El dueño; Amador, es español y la cocina estupenda, tanto en platos nativos de Senegal como españoles, y a muy buen precio. No se puede reservar por internet, pero pongo aquí su teléfono con whatsapp 00221339948541 y enlace para ver algunas fotos:
www.tripadvisor.es/ ...mance.html; del propio hotel:
www.hotelmamamaria.com/ ...s/pag1.htm
Última edición por Abaquo el Dom, 21-05-2017 23:03, editado 3 veces