La Alcazaba
Loja formó, junto a otras poblaciones del Poniente Granadino, la última frontera de al-Andalus. Como testigo de esta época ha llegado hasta nuestros días el recinto de La Alcazaba, declarado
Bien de Interés Cultural, y cuyo perfil, junto al de la torre-mirador de la Iglesia Mayor de la Encarnación, se ha convertido en la imagen más representativa de la ciudad.
El
Conjunto Patrimonial del Barrio de la Alcazaba de Loja, al margen de su caserío y su trazado urbano -de clara tradición medieval -, está conformado por su recinto amurallado, muy probablemente trazado hacia la segunda mitad del siglo XII, reforzado y corregido entre los siglos XIII y XIV, por el aljibe, de tres naves organizadas sobre los 57 metros cuadrados de sus superficie; por la denominada torre del Homenaje (o del Reloj); y por el caserón de los Alcaides Cristianos, adosado a la torre anterior, y construido en los primeros años del siglo XVII por el Licenciado D. Pedro de Tapia, Alcaide de la fortaleza.
Museo Histórico Municipal de la Alcazaba
El Museo Histórico Municipal de La Alcazaba (MHA) organiza la colección expuesta en sus dos salas actuales a partir de cinco espacios temáticos.
Mirador Arqueológico de La Alcazaba
Ubicado en una torre defensiva del cinturón de murallas. Desde él se divisa toda la parte norte de la ciudad: el Barrio de San Francisco a pie del Monte Hacho, la Ermita del Calvario, el Palacio de Aliatar, la Iglesia de San Gabriel, ambos puentes, y con buena climatología, la cascada de la “Cola del Caballo” de Los Infiernos de Loja y hasta Sierra Nevada.