Lo reconozco: Chaurhattar ha sido, para mí, como un pequeño Shangri-La; un paraíso de paz, aire puro, buena compañía y deliciosa comida en el que pasaría meses y meses, contemplando las montañas y dejándome agasajar por la hospitalidad de los Tamang. En realidad es un pequeño caserío, con tres o cuatro edificios, una clínica extemporánea, un pequeño hotelito y la casa de Milan y sus dos mujeres. Esta última (la casa de Milan, digo) es, precisamente, un buen centro de operaciones para explorar los valles de los Tamang.
¿Cómo llegar? Facilísimo: si has subido el collado en 4x4, con decir que te lleven a Chaurhattar, a casa de Milan, vas más que sobrado. Si elegiste la aventura del autobús, bájate en la segunda parada tras cruzar el collado y camina hacia la izquierda, unos quince minutos, por la carretera en dirección a Sondang. Lo que encontrarás será esto:
Bonito, ¿eh? La casa de Milan, Karma y Kayla es, de algún modo, el centro social del valle del Chilime Khola. Allí se paran muchos vecinos a charlar y echar un rato con Milan, que es todo un personaje en la comarca. Su casa tiene muchas ventajas para el viajero: sin ser un hotel, tiene comodidades de las que los "Home-Stay" raramente disponen (ducha de agua caliente; un "cuarto de baño" bastante apañao; habitaciones con vistas a las montañas, separadas del resto de la vivienda; y una cocina tradicional, también separada del resto de la casa y magníficamente atendida por Karma y Kayla).
Mis anfitriones: Milan y sus dos mujeres, Karma y Kayla:
Mi habitación en Chaurhattar:
Bueno... Debo decir que esta casa "tendrá brevemente" muchas ventajas para el viajero, porque Milan la está terminando de acondicionar. De momento, si acudes a la zona, quizá debas quedarte en el hotelito que hay justo al lado: no es tan auténtico como la casa de Milan, pero está muy bien situado también y dispone de ciertas comodidades. Eso sí: Milan te orientará encantado si deseas hacer alguna excursión por la zona; te facilitará contacto con guías locales, te dará útiles consejos... Su inglés no es perfecto, pero hace ímprobos esfuerzos por ayudar y hacerse entender.
Visita en Chaurhattar
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Como digo, Chaurhattar es un buenísimo centro de operaciones, y un lugar magnífico para pasar varios días leyendo, charlando, mirando la montaña... y desintoxicándonos de nuestra locura cotidiana, esa que arrastramos día a día en occidente y que, de vez en cuando, conviene eliminar. Más barato que un psicoterapeuta, y mucho más agradable a los sentidos.