Praga - Parte III 18/07 ✏️ Diarios de Viajes de Checa Rep.

Último día en Praga. La verdad es que los tres días habían dado para mucho. Poco me faltó por visitar de esta hermosa ciudad. La noche anterior tumbado en la cama mirando un poco el Facebook veo que en un grupo de "Españoles en Praga" en el que estoy se oferta un trabajo para Agosto. Yo no tenía pensado viajar más allá de lo que durara mi pase interrail (27 julio) así que me puse en contacto con él. Nos citamos en el reloj astronómico al día siguiente a las 12 del mediodía.

A la mañana siguiente allí estaba plantado. Nos reconocimos y vi rápidamente de que se trataba. Promotor de tours turísticos en español por la ciudad. Me fui a tomar algo con él, que era el jefe, y me comentó las condiciones del trabajo, el sueldo etc... la verdad, me interesaba el trabajo únicamente para el mes de agosto pero él me decía que sin problema podía trabajar un mes. Total, meditándolo muy bien al final decidí prescindir de la oferta y seguir viajando. No se porque pero tenia mejor pinta y no me arrepentiría nunca!

Tras dar un paseo tranquilo y silencioso por el lugar bajé de nuevo a la carretera y cogí un tram que me llevó al centro de nuevo. Una vez allí, paré a comer algo que ya eran las 14:30 e hice tiempo para el plan que tenia por la tarde.

Ya se acercaban las 5 de la tarde. El chico que me había ofrecido el trabajo me invitó también a uno de los tours que hace su empresa por la ciudad y era a esa hora. Lo aproveché para ver que nos explicaba el guía sobre la ciudad. El tour era en español y el guía Alfonso me cayó genial, un tío muy crack. En el grupo que íbamos habían 3 chicas que escuché hablar en catalán. Fue la "excusa" para meterme rápidamente a conversar con ellas. Al final del tour nos habíamos hecho amigos y todo.

Nos fuimos a tomar unas cañas juntos y a contarnos nuestra experiencia. Ellas también estaban de Interrail pero andaban preocupadas por que su pase acababa a los 3 días y no tenían cómo volver. Muy felicianas ellas, me cayeron genial. Compartimos contacto y a las 11 de la noche me despedí de ellas en la Plaza Wenceslao. Tomé un tren que me dejó en el hostal sobre las 11:30.

Pensaba llegar y descansar ya que al día siguiente partía a Budapest. Pero.... al abrir la puerta de mi habitación me encontré con unos nuevos compañeros que habían llegado esa noche, un grupo de 6 australianos con una fiesta encima que te mueres.

Lo de ellos era otro nivel. Llevaban viajando unos 2 meses e iban a hacer coincidir su estancia en Bruselas para ir al festival Tomorrowland, una locura. A pesar que estaba prohibido estaban fumando en la habitación y no precisamente cigarros. Al principio un poco incómodo pero al rato de conversar ya estábamos riendo y haciendo bromas. De todas formas, poco tardé en despedirme de ellos.

Al día siguiente, me esperaba Budapest. Esa ciudad que desconocía y me enamoró