Nos levantamos un poco más tarde que otros días. Bajamos al desayuno y en unos minutos nuestra casera nos trae todo lo que pedimos anoche: scrambled eggs con salmón para mí; salchicha, bacon y huevo para Pablo. Todo super rico. Recogemos los trastos y empezamos el día. Ha amanecido completamente cubierto y está lloviendo, ya tocaba después de dos días más o menos soleados.
Hoy tenemos un día relativamente tranquilo, es un día de viaje para llegar a la isla de Mull. Retrocedemos un poco hacia Glencoe, en busca de las THREE SISTERS. Entramos al pueblo pero no tiene nada: una calle, un pequeño súper y B&Bs.
Continuamos por la carretera y a 9 kms de Glencoe nos las encontramos. Todo el paisaje en este tramo es fabuloso, abrupto, verde, muy muy bonito. Hay dos aparcamientos seguidos para parar a verlas y se detienen coches constantemente.
Volvemos por donde hemos venido y nos desviamos para ver el lago Leven, también muy bonito. A unos 10 kms llegamos a Kinlochleven y, cuando vamos a volvernos, vemos un cartel que indica unas cascadas. No sabíamos de su existencia y no las llevábamos en nuestro itinerario, pero como no tenemos prisa, decidimos dejar el coche y coger el sendero para verlas. ¡Todo un acierto! Después de unos 5-10 minutos de paseo por el bosque, llegamos a la cascada. Es espectacular. Un enorme chorro de agua cae desde un precipicio de 60 metros de alto (mirando información sobre ella ya en casa, he leído que es la 5ª cascada más alta del Reino Unido, y nosotros sin saberlo). Vemos que hay unas tablas colocadas en la pared, invitando al visitante a acercarse. Hay una familia de ingleses que ya lo han hecho y nos animan a intentarlo. Si ellos pueden, nosotros también. Aunque está todo muy escurridizo e incluso hay que pasar por un cable suspendido sobre el río, no es muy complicado y lo conseguimos. Llegamos a los pies de la cascada. Una excursión improvisada que nos deja un buen sabor de boca. GREY MARES WATERFALLS, apuntadlo en grande en vuestro itinerario.
Volvemos por donde hemos venido y retomamos la carretera hacia Oban, donde vamos a coger el ferry hacia la isla de Mull. Por el camino, paramos en un mirador a ver el STALKER CASTLE, un pequeño castillo sobre un islote, muy bonito. Queremos verlo más de cerca, pero nos pasamos la salida (de hecho, no hemos visto que esté señalizado). Como vamos un poco justos, seguimos nuestro camino. Paramos también en el DUNNSTAFFNAGE CASTLE. Lo vemos por fuera pero no nos parece muy interesante. Por fin llegamos a Oban, un pueblo bastante bonito y con mucha vida. Hay tráfico y mucha gente por las calles. Nos colocamos en la cola para subir al ferry y canjeamos nuestra reserva por los billetes. El viaje dura unos 45 minutos de Oban hasta Craignure. Salimos a cubierta un rato para ver el paisaje e intentar ver algo de fauna marina, pero lo único que vemos son cientos de medusas y algún ave.
Una vez en Mull, como es un poco pronto para irnos hacia el alojamiento, decidimos subir a visitar TOBERMORY, el pueblo más importante de la isla. Hay bastante tráfico y obras que nos detienen un par de veces. Llegamos al pueblo, dejamos el coche y bajamos a la zona del puerto, la zona principal, andando. Es un pueblecillo costero con mucho encanto y también hay bastante gente. Damos una vuelta, compramos en el supermercado algo para la cena y cogemos la carretera de nuevo rumbo a Fionnphort, en la otra punta de la isla, donde dormiremos hoy.
A la salida de Tobermory, paramos en un desvío para intentar poner en marcha el gps y nos damos cuenta de que, siguiendo un sendero, a pocos metros, también hay otra cascada. Hay un mirador y al fondo, hacia el otro lado, se ve la bahía donde está el pueblo.
A los pocos kilómetros, nos encontramos con estos 2 pedazo de modelos, a los que no podemos evitar hacerles una buena sesión fotográfica:

En lugar de coger la carretera principal, cogemos una secundaria para llegar a Fionnphort. Son menos kilómetros aunque ya conocemos las carreteras escocesas e imaginamos que tardaremos más. Como no tenemos mucha prisa, preferimos ver esta parte de la isla. El paisaje es asombroso, sobre todo en el primer tramo. La carretera va bordeando la costa y hay zonas con acantilados muy bonitas. Hay que pensárselo, eso sí, porque son casi 80 kms por una maravillosa carretera de One Single Track, como dicen ellos, es decir, carretera donde solo cabe un coche pero es de dos sentidos. El camino se hace largo, aunque los paisajes compensan.
Por fin, casi dos horas después, llegamos a FIONNPHORT. En la primera casa del pueblo está nuestro alojamiento de hoy, Caol Ithe House. Hasta el último momento, no encontré alojamiento por aquí. No hay muchos y todos estaban completos. Éste fue el único que tenía una habitación. El señor nos recibe muy amablemente, como en todos, y nos enseña la habitación. ¡Es enorme! Y el lugar es tranquilísimo. Nos damos una ducha, cenamos y descansamos. Mañana tenemos unos de los platos fuertes del viaje: la excursión a las islas de Staffa y Lunga.