Queríamos pasar un día con los elefantes. Con elefantes libres que no estuvieran enjaulados, obligados a cargar con gente o a hacer ningún tipo de espectáculo. Por favor, no seáis parte del maltrato que se les hace a estos pobres animales.
Desde un principio teníamos en mente ir al Elephant Natural Park, que era del que teníamos buenas referencias, pero estaba todo completo. Así que buscando, encontramos este parque, que no nos defraudó.
Reservamos la excursión de un día con antelación desde su página web. Precio 2.600 THB
Elephant Retirement Park
-Te recogen en tu hostal entre las 8 y las 9 de la mañana y te llevan hasta el parque, (1-1,5 h)
-Al llegar te dan una charla muy interesante sobre los elefantes y sus mahouts (cuidadores), y sobre la historia del parque.

-Después de esto nos dieron cañas de azúcar y plátanos para dar de comer a los elefantes adultos, y leche de soja (por 20 THB) para dar de beber a los elefantes pequeños.

Nuestro grupo era de unas 12 personas, y nos dejaron bastante tiempo para estar con los elefantes, sacarnos fotos y nos dieron más comida cuando nos quedábamos sin nada.

-De 12 a 13h te dan de comer a ti (bastante bueno y abundante).
-Al acabar, tienen unos camisones que te puedes poner si quieres porque... ¡¡es hora de bañar a los elefantes!!
-Hay una especie de barrizal en el que te metes con ellos y te ensucias hasta las pestañas; una zona de arena, en la que puedes hacerles un "peeling" a los animalillos; y un pequeño estanque en el que nos bañamos todos juntos.

-Al acabar la actividad, te puedes duchar allí. No son baños lujosos, por supuesto, pero te dan jabón y unos trapos para secarte que es más que suficiente.
-Te dejan un poco de tiempo para que te tomes un té o café, y te ofrecerán un CD con fotos que sacan durante el baño de los elefantes por 200 THB. Las fotos las puedes ver previamente para saber si te merece la pena. Nosotras lo compramos.

-Hacia las 16:30 te llevarán de vuelta para tu hostal
Simplemente nos encantó. Para mi fue una de las mejores cosas que hice en Tailandia, así que se lo recomiendo a todo el mundo. A los elefantes se les veía felices y a los mahouts muy simpáticos y atentos. El dueño del parque había estado trabajando en sitios en los que se maltrataba a los elefantes, y por eso decidió montar este pequeño santuario, que poco a poco va creciendo, pero aún necesita tiempo y dinero... así que os animo a que contribuyáis y podáis disfrutar de esta experiencia
Al llegar al hostal, descansamos un ratín y salimos en busca de excursiones interesantes para poder hacer en Chiang Mai. Cenamos en el Maya burguer Queen, donde las hamburguesas no estaban mal, pero la atención no nos gustó nada, así que no lo recomiendo
Y cómo no... caímos en las redes de un masaje tailandés, que puso la guinda para cerrar un día perfecto.