Mucha gente nos preguntaba que dónde caía este país. Situado al sur de la cordillera del Cáucaso ha sido tradicionalmente un cruce de caminos entre Europa y Asia, de hecho, algunos lo consideran un país europeo y otros asiático, depende de como se mire...
Su situación geográfica ha marcado mucho su historia. Limita al norte con Rusia, al este con el mar Caspio, al sur con Irán y al oeste con Georgia, Armenia y un poco de Turquía.

Durante mucho tiempo fue parte de la ruta de la seda que unía Europa con Asia Central y con China, por lo que por su territorio pasaban las caravanas de mercaderes que viajaban en uno u otro sentido. Esto le ha hecho tener numerosas influencias a lo largo de la historia y a mantener contactos estrechos con países de la zona, con numerosos intercambios culturales y comerciales. Sin embargo, su relación países de Europa occidental ha sido más bien escasa.
[img]https://http://www.rutas10.com/archivos/201606/mapa_ruta_seda_blog-1600x530x80xX.jpg?1[/img]
Azerbayan es considerado uno de los países túrquicos que existen en la actualidad, junto a Turquía, Kazajistán, Uzbekistán, Kirguistán, etc., con los que comparte una parte muy importante de su cultura e identidad, especialmente con Turquía, a la que consideran un país hermano y aliado. Físicamente la mayoría de los azerbayanos parecen turcos, y su idioma, el azerí, está íntimamente ligado al turco, tanto que según nos contaron ellos son mutuamente inteligibles.

El idioma azerí se ha escrito con caracteres árabes y cirílicos, pero desde la independencia de la Unión Soviética adoptaron el alfabeto latino con alguna letra propia.

Aunque el país es oficialmente laico, la gran mayoría de la población es musulmana, aunque lejos de fundamentalismos. Se practica un Islam muy suave, en Baku, por ejemplo, las mezquitas no llaman a la oración, y es habitual el consumo de alcohol. Según nos contaron algunos guías, la población joven es cada vez menos religiosa y las prácticas son cada vez más relajadas. A diferencia de Turquía, el islam predominante es el chií, no el suní, que es la rama mayoritaria del Islam. En esto se acercan un poco a Irán, que es otro país donde los chiíes son mayoría. En su territorio también se ha practicado el cristianismo en su época más temprana e incluso el zoroastrismo, religión que rinde culto al fuego. Azerbayán tiene el sobrenombre de "Land of Fire", y quizá por eso este culto se estableció aquí de forma muy significativa.

La otra gran influencia es la rusa. Durante 70 años fueron parte de la Unión Soviética, siendo una de las repúblicas socialistas que la formaban. Debido a esto, el ruso es el segundo idioma entre la población, no es oficial pero sí que lo habla gran parte de los habitantes, especialmente en la gente más mayor que vivieron durante la etapa comunista. Los jóvenes aprenden menos ruso y son más dados a aprender inglés. Al parecer, en los colegios tienen la posibilidad de seguir una línea en azerí o en ruso, ya que todavía hay muchas familias cuya lengua habitual es el ruso y prefieren que sus hijos estudien en este idioma.


Es un país que sí tiene infraestructura turística y que recibe bastantes turistas, especialmente Baku y algunas zonas de montaña, pero son sobre todo turcos, rusos y de países árabes como Arabia Saudí o los Emiratos Árabes Unidos, pero el turismo occidental es todavía bastante escaso. En la semana que estuvimos no vimos ni un sólo español, y tampoco sudamericanos. Sí que nos encontramos con unos pocos ingleses o alemanes. No hay problema para encontrar restaurantes, tiendas, casas de cambio de moneda, taxis, etc. En Baku también es fácil encontrar free-tours en inglés y en ruso, pero nada en español. Existen también unas cuantas agencias que organizan excursiones a otros puntos de interés del país, bien sea uniéndose a un grupo organizado o en tours privados, que fue la opción que elegimos nosotros. Al parecer el transporte público entre ciudades es un poco complicado, pero no tuvimos ocasión de comprobarlo. El transporte urbano en Baku sí es fácil, pues hay metro, buses, taxis, uber, etc.

Como en muchos países de la zona el regateo es habitual en bazares y en puestos de souvenirs, pero también hay tiendas con el precio fijo. Baku tiene una zona comercial amplia, con tiendas de todo tipo y de todas las marcas posibles, incluyendo firmas de lujo. En general, en Baku la gente viste de forma moderna y se cuida, el resto de zonas que visitamos eran menos sofisticadas y la gente vestía de una forma más antigua.
Azerbayán debe gran parte de su riqueza actual y la modernización de Baku al dinero obtenido con el petróleo y el gas. Estos recursos se llevan explotando desde principios del siglo XX, llegando a ser el principal proveedor de petróleo en la URSS. Las afueras de Baku están llenas de explotaciones petrolíferas y las torres se ven fácilmente. Hoy también se extrae gas del mar Caspio y se pueden ver las plataformas instaladas en el agua.
