Hola viajerxs! Nosotros fuimos a Tanzania en Enero (siento no haber escrito antes..! He puesto este comentario también en otro foro "Tanzania en tiempos de covid". Pero como no se si era el lugar correcto, lo pongo aquí también.
Primero de todo decir que no habrá mejor momento para viajar a Tanzania que ahora. De verdad que fue increíble disfrutar del país sin masificaciones, ni hordas de turistas ni jeeps colapsando los parques naturales. En enero no hacía falta PCR ni cuarentena (tampoco al volver a españa)
Primero de todo, compramos los vuelos el día de antes con Qatar. La combinación mejor imposible BCN-Doha-Arusha. Durante muchas semanas estuvimos mirando los vuelos y todos eran combinaciones rarísimas además precios y horarios iban variando cada día. Es evidente que las compañías aéreas no confirman vuelos con mucho tiempo de antelación. Esa fue la primera lección que aprendimos. En época covid, mejor comprar los vuelos cuanto más cerca de la fecha de salida mejor (nosotros el día antes).
Los vuelos fueron genial. En nuestra zona una familia, una pareja (youtubers que no paraban de dar la nota) y nosotros. Nos podíamos sentar donde queríamos. El mejor vuelo de nuestra vida. El servicio de Qatar de comidas funciona con normalidad.
Ahora bien, nosotros llevábamos tiempo hablando con la compañía Safari Bike Africa. La comunicación con Jose había sido muy fluida y siempre nos contestaba muy rápido. Nos había montado una ruta que se adaptaba a lo que le pedíamos. Pero una vez allí, no fue como esperábamos. Para nada.
El guía que teníamos, decía que se llamaba Pepe (evidentemente no era su nombre), pasaba olímpicamente de todo. No se había mirado la ruta, ni la guía ni nada. Y era un constante intento de tomarnos el pelo. Insoportable. Cero profesionalidad. El coche estaba hecho polvo, sucio, lleno de basura y en unas condiciones pésimas. Ni agua teníamos y eso que ponía por escrito que teníamos el agua incluida en los safaris. Nos enfadamos muchas veces con él. Queríamos aprovechar al máximo y él solo hacía que pararnos en chiringuitos de amigos suyos para que consumiéramos o para que compráramos, se nos acabó la paciencia y ya le dijimos que nada de esto. Lo peor ya fue en Tarangire que tuvimos literalmente que enfadarnos para que se moviera un poco y avanzara, ya que teníamos la ruta escrita y él solo hacía que llevarnos por el mismo sitio. Era ridículo. La percepción era de tomar el pelo a los turistas. Perdimos muchísimo el tiempo y sin decirnos nada, él ya ponía rumbo al hotel bien temprano. A la que nos dábamos cuenta, estábamos cruzando la puerta. Otra vez, momento incómodo. La sensación de querer estar de viaje y despreocuparte de todo? pues no. Era tensión constante, enfado constante, situaciones incómodas constantes es que era como estar en el trabajo en lugar de vacaciones.
Nos pusimos en contacto con Jose que en seguida nos contestó y supuestamente iba a hablar con el guía ("Pepe"), no sirvió de nada. Vivimos un sinfín de situaciones incómodas. Hay que pensar que íbamos solo nosotros dos con él las 24h. La situación era muy tensa y a la que nos descuidábamos, nos la intentaba colar. Teníamos que estar pendientes en todo momento. O bien se intentaba saltar algún lugar, o recortar tiempo al máximo, o levantarnos bien tarde, etc.
Avisamos a Jose que este hombre daba la sensación que no tenía ni idea de conducir por los parques nacionales, para empezar no tenía ni radio (cosa muy peligrosa), de verdad que parecía que íbamos a tener un accidente en cualquier momento. Nos quedamos encallados en el barro (algo normal) el problema que como no tenía radio en el coche ni teléfono por GPS ni NADA, no podía avisar a los rangers. Una familia nos salvó y avisaron. Lo mejor es que nos quería hacer pagar a nosotros diciendo que no tenía nada. Llegamos muy enfadados viendo lo poco preparado que iba (ni herramientas para cambiar ruedas..por la mañana se le había pinchado una y un coche de Kananga tuvo que venir a cambiarle la rueda porque ni eso llevaba), ni radio, ni mantas, ni AGUA, ni nada. Pero a partir de eso momento, Safari Bike se desentendió de nosotros.
Lo peor fue que al día siguiente nos quedamos completamente encallados en el barro. Por suerte, el guía era consciente del drama del día anterior y le pidió a otro guía hacer la ruta los dos coches juntos. Esto fue lo que nos salvó cuando quedó el coche de barro hasta las puertas. No podemos entender cómo se metió allí a dentro. Ese coche evidentemente no estaba en condiciones y no funcionaba bien ni la tracción ni los frenos. El otro conductor nos rescató y la pareja de ingleses que iban en el otro coche super majos y con los cuales hemos entablado una amistad, se ofrecieron a que hiciéramos el tour de ese día con ellos para no perder más tiempo. A partir de aquí todo fue fantástico.
Llegamos a Osero Serengeti Camp (MARAVILLOSO) y avisamos a Jose de todo lo sucedido. No nos hizo de caso. Nos decía que según el guía el coche estaba bien. No nos creía cuando le decíamos que estaba metido de barro hasta las puertas y que evidentemente ese coche ya iba a ser inservible. Pasó de nosotros toda la noche, al día siguiente el guía que nos había rescatado el día anterior habló con Jose para explicarle que el coche se había quedado allí y que se iba a quedar allí unos cuantos días porque se necesitaba una grúa especial de los rangers para sacarlo. Jose continuaba diciéndonos que el coche "estaba bien" cuando estábamos TIRADOS en el campamento sin guía y sin nada. El guía salvador nos llevó hasta el centro de visitantes del serengeti i allí estuvimos hasta el mediodía perdiendo toda la mañana. Otro guía de otra agencia nos vino a recoger y por la tarde visitamos el Ngorongoro (LO MEJOR DE TANZANIA).
Por la noche, cuando llegamos al hotel del Ngorongoro, nos estaba esperando Nassari quien convirtió nuestro viaje en un SUEÑO. Nada que ver con el anterior. Super profesional, super honesto, con el coche impecable, con agua fresca y con un nivel de conocimiento del país muy elevado. Conducía de maravilla y nos asesoró increíblemente bien. Nassari fue quien solucionó otras cosas que la agencia había dicho que había organizado pero luego en la realidad, no. Comidas, entradas, etc. La verdad que fue de grandísima utilidad. Ojalá lo hubiéramos tenido todo el viaje.
Ahora Nasari ha montado su propia agencia y de verdad que no lo podemos recomendar más. Este hombre es un crack de verdad. Muchísima EXPERIENCIA, Excelencia y profesionalidad. No se si puedo poner el nombre de la agencia aquí en el foro. Si os queréis poner en contacto con él os dejo el email aunque no se si se puede poner makwavisafaris@gmail.com también tiene Instagram
@makwavi_african_safaris Al final los guías son freelance y el viaje depende de ellos.
Por lo que se refiere al momento en Tanzania, para nosotros el mejor momento para viajar al país. En los parques nacionales, lo máximo que nos encontramos fueron un par de coches. Los IMPRESIONANTES alojamientos eran casi exclusivos para nosotros. Y no es broma. En más de una ocasión, éramos los únicos huéspedes.
Hicimos 8 días completos y a parte de los parques nacionales, también hicimos actividades que apoyan el desarrollo de la comunidad local (es lo bueno de contratar agencias locales) y también un par de trekkings. Tenemos todo el viaje explicado en el blog (itinerario, recomendaciones y lo mejor de todo...los fantásticos alojamientos)
Por el tema covid, allí hacían vida normal. La mascarilla no era obligatoria aunque el tema higiene de manos lo tenían super presente. Lo bueno de las agencias locales es que hacen todos los tours privados a precio de grupal y sale muy bien de precio (todo incluido). Así que al ir los dos solos en el Jeep, pues poco peligro de contagio. En los hoteles también solos y el personal siempre mantenía las distancias. Todo fantástico.
Por lo que se refiere a la compañía Safari Bike, no sabemos si tuvimos mala suerte o qué sucedió. No entendemos que después de todo, ni nos enviaran un email preguntando como había ido con el nuevo guía o disculpándose o lo que sea. Se desentendieron por completo de nosotros.
Me he enrollado un poco, pero espero que os sirva de ayuda. Un abrazo!