Os comento mi experiencia reciente en Praga con el traslado desde y hasta el aeropuerto en transporte público. Valoramos la opción de coger taxi o transporte privado (2 personas) pero me daba pena gastar dinero en eso pudiendo ir sin problema en transporte público. En nuestro caso, los horarios de los vuelos eran muy buenos y el tiempo fue estupendo, sin lluvia y sin frío excesivo. Así que destinamos el dinero del taxi a cervezas
No nos descargamos ninguna app de transporte público, simplemente miramos en Google cuál era la mejor opción desde el aeropuerto hasta nuestro hotel, con el menor trayecto posible a pie. En nuestro caso nos indicaba autobús 191 + tranvía 2. Al llegar, en el andén de los autobuses, hay máquinas para comprar el billete. Son sencillas de usar: seleccionar tipo de billete (el más habitual es el de 90 minutos), cantidad de billetes y pagar (pagamos con tarjeta).
Siempre hay que validar el billete en la máquina amarilla que hay dentro del autobús o tranvía. También hay unas máquinas de color naranja para la compra de billetes si no has podido comprarlo antes (pago con tarjeta).
Nosotros cogimos el billete de 90 minutos de duración, se valida solo en el primer tramo, después ya no es necesario.
Nos bajamos del bus 191 en la parada de Petriny y allí mismo cogimos el tranvía 2, que nos dejó en Naródni, a 200 metros de la puerta de nuestro hotel.
Esta combinación era la que menos transbordos tenía y la que más cerca del hotel nos dejaba, había otras más rápidas. Por ejemplo, la opción de bus 59 y metro A era más rápida, pero suponía caminar 900 metros. Lo mejor es que consultéis las opciones en Google según dónde esté vuestro alojamiento.
Para el regreso al aeropuerto hicimos lo mismo, pero a la inversa.
Precio del trayecto: 1,6€ por persona. Imbatible.