ATRACCIONES DE SYDNEY
Sidney es la ciudad más antigua de Australia, fundada en 1788, y su motor económico. Es, además, la ciudad más poblada de este continente, con más de cuatro millones de personas. Sydney, capital del estado de Nueva Gales del Sur y capital de Australia en todos los sentidos excepto en el nombre (la capital de Australia es Canberra), ofrece al turista una gran variedad de atracciones naturales, rascacielos vertiginosos, edificios de interés, magníficos restaurantes y gente encantadora.
Sidney está situada en la costa sudeste del país, a orillas de la Bahía Jackson, y ocupa una extensión de más de 345 kilómetros cuadrados. La ciudad de Sydney está compuesta por gentes de todos los países del mundo, y aunque el idioma oficial es el inglés, no es difícil encontrar gente que hable italiano, griego, árabe, cantonés o incluso español. El aire cosmopólita que se respira en la ciudad está presente en todos y cada uno de los rincones de Sidney, haciendo de esta ciudad uno de los rincones más multiculturales no solo de Australia sino de todo el mundo.
La ciudad de Sydney fue fundada en 1788, cuando un grupo de 11 barcos, conocidos como la Primera Flota, que transportaba prisioneros británicos, desembarcó en lo que hoy conocemos como Botany Bay. Los colonizadores se establecieron en Sidney Cove, al norte de la bahía, que más tarde se convirtió en la fabulosa ciudad de Sydney.
A pesar de que los habitantes de esta nueva colonia a punto estuvieron de perecer de hambre durante los primeros 15 años, siguieron llegando más flotas. A finales del siglo XVIII Sidney atrajo a una gran cantidad de militares, los mercaderes del ron, que conviertieron a este licor en la moneda de cambio y ellos se establecieron como los auténticos gobernantes de esta colonia. Posteriormente se exploraron las Montañas Azules, Blue Mountains, y Sydney se unió a las llanuras de Nueva Gales del Sur. Durante 1850 y años posteriores se descubrió oro en Victoria y la importancia de Sidney decayó al irse muchos de sus habitantes en busca de fortuna a estas nuevas tierras.
La Gran Depresión de los años 20 se cebó con la población de Sydney, pero para la década de los años 30 la ciudad ya se había recuperado y se convirtió en la ciudad más importante de Australia. Las sucesivas guerras en las que Australia se ha visto involucrada han afectado de diferente manera a la ciudad de Sidney.
Durante la Segunda Guerra Mundial sufrió el ataque de algunos submarinos japoneses, pero la mayor consecuencia, que perdura hasta el día de hoy, que tuvo esta guerra sobre la ciudad fue la cantidad de inmigrantes de todos los países que llegaron a sus costas.
El siglo XX ha visto el desarrollo urbanístico y económico de Sydney. En 2000 Sidney acogió los Juegos Olímpicos, considerados por Juan Antonio Samaranch, presidente del Comité Olímpico Internacional entonces, como "los mejores Juegos Olímpicos de todos los tiempos".
SYDNEY OPERA HOUSE
La Opera House de Sidney, considerada como una de las maravillas del mundo moderno, es un edificio magnífico, que se alza como icono de Australia en una de las bahías más bellas del país. Si lo contemplas detenidamente podrás ver en sus líneas arquitectónicas un barco navegando a toda potencia. Pero su arquitecto, el danés Jørn Utzon, se adelantó a su tiempo al diseñar un edificio modernista, con sus tejados similares a enormes conchas blancas, cubieras con 1.056 millones de azulejos fabricados en Suecia de color blanco brillante y crema, aunque desde la distancia sólo se percibe el color blanco, para un espacio que iba a albergar teatro dedicado a la ópera, siempre encasilladas en modelos más tradicionales.
La idea de construir un teatro de la Ópera nació a partir de la Segunda Guerra Mundial, cuando Australia vio la falta de un espacio musical para las representaciones de Ópera en el país. En 1954 el gobierno de Nueva Gales del Sur eligió Bennelong Point como lugar en el que llevar a cabo la construcción, por su estupenda localización junto a los Jardines Botánicos de Sidney.
Se anunció una competición internacional, en la que se invitó a arquitectos de todos los rincones del mundo a enviar sus diseños para la construcción de un complejo que incluyera dos salas principales, un restaurante y salas públicas de reuniones. 234 arquitectos, procedentes de más de 30 países diferentes, enviaron sus proyectos. El diseño de Jørn Utzon ganó el concurso y se impuso a diseños más tradicionales, pero no antes de haber sido desestimado por ser considerado como 'demasiado ambicioso'.
En un principio se estimó que su construcción llevaría alrededor de cinco años y tendría un coste aproximado de $7 millones. Pero Utzon, consciente de que podrían sugir problemas técnicos ya que su diseño requería de una tecnología avanzada que no existía en el mercado aún, solicitó más tiempo para hacer frente a esos posibles problemas. Sin embargo, el gobierno denegó su petición y urgió a Utzon para que comenzara la construcción en 1959, dos años antes de lo que el arquitecto había propuesto.
Enseguida comenzaron los problemas. Se emplearon varios años rediseñando el tejado después de que se terminara la construcción del enorme podio, que contaba con una escalera de 86 metros de ancho. Las columnas que iban a soportar el peso del tejado ya se habían construido cuando se demostró que el peso de este iba a ser demasiado grande para ellas, por lo que tuvieron que ser demolidas y construidas de nuevo.
Estos y otros problemas que surgieron a lo largo de la construcción del Teatro de la Ópera de Sidney hicieron que Utzon se enfrentara a los medios de comunicación y al gobierno de Australia, que no estaba convencido de la viabilidad del proyecto. Robert Askin, elegido alcalde de Sidney y uno de los más fieros opositores al proyecto de Utzon, intentó reducir gastos, que se estaban disparando, mediante la retención de pagos. En 1966 Utzon presentó su dimisión y regresó a Dinamarca. Desafortunadamente nunca regresó a Australia para ver su obra de arte terminada ni construyó ninguna otra obra de arte.
Un grupo de arquitectos australianos se hicieron cargo de terminar las obras de construcción del Teatro de la Ópera de Sidney. Ya se había completado la fachada exterior del edificio, por lo que los cambios que se tuvieron que hacer en el diseño fueron mínimos. La Opera House de Sidney finalmente se terminó en 1973 y el coste final ascendió a $102 millones, casi 15 veces la cantidad que en un principio se había estimado para su construcción. La mayoría del presupuesto para la construcción de este edificio se obtuvo de un juego de lotería que se mantuvo tanto tiempo como duraron los trabajos de construcción.
De las disputas que surgieron a raiz de los problemas económicos y los enfrentamientos políticos nada quedó tan pronto como se abrió al público la Sydney Opera House, el 20 de octubre de 1973, en una ceremonia de inauguración en la que participó la Reina Isabel de Inglaterra. Gracias a esta maravilla del mundo moderno Sidney apareció en los mapas internacionales, tanto como ciudad cultural como icono arquitectónico. Más de dos millones de turistas visitan la Opera House de Sidney, convirtiéndo este edificio en una de las atracciones más visitadas del mundo.
SYDNEY HARBOUR BRIDGE
El puente más emblemático de Sidney, Sydney Harbour Bridge o Puente de la Bahía de Sidney, es uno de los lugares más bellos de Sidney, además uno desde los que tendrás mejores vistas de la ciudad, incluida la Opera House. Construido de metal, Sydney Harbour Bridge está abierto al tráfico y a los peatones. Hasta 1967, el puente era la estructura más alta de Sidney y, de acuerdo con el Libro Guiness de los Records, es el puente que tiene los arcos más anchos del mundo, además de ser el puente de acero más alto, situándose su punto más alto a 134 metros sobre el nivel del puerto.
Conocido en la ciudad cariñosamente como "The Coathanger" (El Perchero), el Harbour Bridge o Puente de la Bahía de Sidney es uno de los puertos más bellos del planeta y el más grande. Si no tienes miedo a las alturas, puedes subir a lo alto del puente, una experiencia que no olvidarás fácilmente. Y si te encuentras en Sidney el 31 de diciembre, asegúrate de que llegas al Sydney Harbour Bridge con tiempo más que suficiente para encontrar un buen lugar desde el que observar la maravillosa demostración de fuegos artificiales que tiene lugar todos los años junto a la Opera House.
Desde la ópera tenemos una magnífica perspectiva del otro gran icono de la ciudad, el Sydney Harbour Bridge, el característico puente que une las orillas norte y sur de Sydney. Por experiencia os podemos decir que hay que controlarse para no disparar fotografías como una ametralladora dado lo fotogénico del conjunto. Desde la ópera caminamos hacia el oeste, voreando la bahía Sydney Cove, y pasamos por el Circular Quay (el centro neurálgico de Sydney, con los muelles de los ferrys, la terminal marítima de pasajeros, una estación de tren, tiendas, restaurantes, etc), un buen lugar para palpar el pulso diario de esta ciudad. Continuando más allá llegamos a The Rocks, lugar donde se asentaron los primeros colonizadores europeos que llegaron a esta zona. Hoy día es una zona muy turística, con muchas tiendas y restaurantes, pero aún así vale la pena pasear por aquí para disfrutar de sus estrechas calles y bonitos edificios coloniales. Algunas perspectivas de esta zona, con los imponentes rascacielos de vidrio y acero a sus espaldas, pueden recordar fácilmente a la ciudad americana de San Francisco. Cruzando por algunas de sus callejuelas llegamos a unas escaleras que suben hasta el nivel de la Bradfield Hwy, la autopista que cruza el famoso puente. Caminando unos 400 m. Por su acera lateral llegaremos al pilar sudeste del puente, el llamado Pylon Lookout. Aquí se puede subir hasta lo alto del pilar por 8'5 A$ o bien cruzar paseando todo el puente hasta su extremo norte. Las vistas desde aquí son realmente impagables: la ópera, la línea de rascacielos tras Circular Quay, los suburbios de Sydney, la bahía y las numerosas embarcaciones que la navegan. Todo ésto se ve desde este mirador único. Para los más aventurados, y con presupuesto alto, también existe la posibilidad de vivir la experiencia del Bridgeclimb, una escalada de 3'5 horas por la estructura metálica del puente hasta llegar a su punto más alto. No apto para personas con vértigo.
SYDNEY BOTANIC GARDENS
Los Reales Jardines Botánicos o Royal Botanic Gardens (Mrs Macquaries Road; abierto todos los días de 7am a 8pm de noviembre a febrero, hasta las 6.30pm en marzo y octubre, hasta las 6pm en abril y septiembre, hasta las 5.30pm en mayo y agosto y hasta las 5pm en junio y julio) ofrecen un refugio perfecto para escapar del bullicio de la ciudad. Cubriendo más de 70 acres de tierra, los Royal Botanic Gardens están situados cercanos a la Opera House, y son visitados tanto por los habitantes de la ciudad como por turistas, quienes podrán descubrir kilómetros y kilómetros de senderos que cruzan el parque de un punto a otro. Puedes unirte a cualquiera de los diferentes tours que encontrarás en el parque, y si no quieres andar, también existe un tren con el que podrás recorrer el parque. Hay cientos de especies diferentes de plantas, muchas de ellas con varios cientos de años de antiguedad. Las podrás encontrar a lo largo y ancho de los jardines o en áreas específicas.
Royal Botanic Gardens Mrs Macquaries Road Sydney NSW 2000 Australia
Phone: 02-9231 8111 or weekends 02-9231 8125Fax: 02-9231 8054(International code +61).
THE ROCKS
The Rocks es una de las zonas más visitadas de Sidney y no es difícil descubrir el por qué. Situado a los pies del Sydney Harbour Bridge y en la parte oeste de la Bahía de Sidney, The Rocks estaba originalmente ocupado por tribus aborígenes y supone el primer asentamiento europeo en Australia, en el año 1788. Es, por tanto, el àrea más antigua de Sidney, que, en recientes años, ha sufrido un proceso de metamorfosis sin precedentes. De ser un distrito antiguo, The Rocks ha pasado a convertirse en una zona de restaurantes y cafes de primera calidad, con interesantes tiendas y puestos que encandilan a los turistas. Y todo esto se ha llevado a cabo sin destruir el encanto de la zona y los edificios históricos, consiguiendo que en The Rocks se mezcle el mundo moderno con el mundo antiguo, formando una de las zonas con más carácter y atractivas de Sidney.
La mayoría de las actividades en The Rocks se centran alrededor de las compras, la degustación de una cocina moderna y exótica y la fotografía.
SYDNEY TOWER Y SKYWALK
La Torre de Sidney (Centro Comercial de Centrepoint, esquina de Pitt Street y Market Street; abierta todos los días, excepto el día de Navidad, de 9am a 10.30pm de domingo a viernes y hasta las 11.30pm los sábados; autobús Sydney Explorer, parada 14, cualquier ferry desde Circular Quay, estación de tren Town Hall y estación City Centre de monorail) es, sin lugar a dudas, el mejor lugar de Sidney para obtener vistas panorámicas y sin interrupción de la ciudad. Si te dan miedo las alturas, no te lo pienses dos veces: Sydney Tower es una de las estructuras más seguras del mundo, habiéndose diseñado de tal manera que es capaz de resistir terremotos y vientos extremos. 56 cables estabilizan la torre y si todos esos cables su juntaran uno detrás del otro, serían lo suficientemente largos para ir desde Sidney a Alice Springs o desde Sidney a Nueva Zelanda.
Y si te gustan las emociones fuertes, no dejes de probar Skywalk, situado en el techo de Sydney Tower, a 260 metros sobre Sidney. Amarrado mediante unos arneses, te podrás desplazar sobre una plataforma movible y con el suelo de cristal, desde la que podrás ver Sidney desde una perspectiva diferente, incluyendo los edificios más singulares de esta ciudad y con las Blue Mountains en el horizonte.
Sydney Tower is open 7 days a week 365 days a year from 9:00am to 10:30pm. Sydney Tower is open on all public holidays except Christmas day. To pre-purchase your tickets with 10% off
Skywalk is open from 9.30am to 8.45pm leaving aproximately every 45 minutes. (subject to seasonal demand)
DARLING HARBOUR
Darling Harbour es todo lo contrario a The Rocks, una zona moderna y futurista, en la que los turistas tendrán una gran variedad de actividades y lugares que visitar. La moderna arquitectura de Darling Harbour está enmarcada por los rascaciles del centro de Sidney por una parte y modernas y coloridas cadenas de hoteles por la otra. Por la noche, Darling Harbour es aún más impresionante, cuando se iluminan los edificios y éstos se reflejan en el agua.
En Darling Harbour podrás visitar Sydney´s Chinese Gardens, Paddy´s Market, diferentes museos entre los que se encuentran el Museo Nacional Marítimo, Sydney Aquarium, Wildlife World y mucho más.
En la zona oeste de la ciudad, y alrededor de la bahía Cockle, se encuentra esta zona portuaria que en los últimos años ha sido convertida en una moderna zona de ocio, con tiendas, restaurantes, cines, hoteles, etc. Aparte de pasear por ella aquí encontramos el Aquarium (parece recomendable, aunque nosotros no lo visitamos), algunos museos y el Chinese Garden of Friendship, un precioso y tranquilo jardín de estilo chino diseñado por paisajistas de Guangdong (la entrada cuesta 6 A$). Muy cerca de aquí se encuentra el Barrio Chino, cuyo eje principal es Dixon St, con una gran cantidad de restaurantes y tiendas. Por pura casualidad nosotros coincidimos con un concierto de homenaje a The Beatles (aquí parecen continuar de moda 40 años después) en un escenario montado sobre el agua de la bahía.
Una forma distinta de ver la zona de Darling y el centro es desde el monorail, el cual realiza un recorrido circular elevado sobre el suelo. Emplea unos 15 minutos en dar la vuelta completa y cuesta 4 A$ el trayecto, aunque nos permite dar las vueltas que queramos mientras no descendamos de él. Hay varias estaciones a lo largo de su recorrido
ZONA CENTRO
Callejear por el centro de Sydney es una agradable experiencia en la que podemos ver algunos lugares y edificios interesantes, como por ejemplo el Sydney Town Hall (un edificio de 1874 donde reside el Ayuntamiento), la catedral de St Andrew (la más antigua de Australia) o los imponentes edificios Queen Victoria Building y Strand Arcade, magníficamente restaurados y que hoy día hospedan grandes centros comerciales. En la calle Liverpool y aledaños podríamos situar el Spanish Quarter, visible por algunos restaurantes con nombres, comida y música "típicamente" españoles, aunque son caros y no deja de sorprender que en el restaurante Casa Asturiana, por poner un ejemplo, se acompañe la cena con flamenco. Alrededor de la calle Dixon, unos 200 metros más al sur, entramos de lleno en Chinatown, con muchos restaurantes y algunos comercios de Todo a 100. En ambos barrios suele haber un gran ambiente nocturno, sobre todo en la calle Liverpool. A lo largo de Macquarie St, en el lado este de la zona centro, hay un buen número de interesantes edificios públicos: la iglesia de St James, el museo Hyde Park Barraks, el edificio Mint o el Parliament House.
Una ruta panorámica absolutamente recomendable es una que circumvala las bahías de Woolloomoolloo y Farm Cove. Esta arranca en la calle Victoria St de Kings Cross, calle en la que podemos ver algunas bonitas casas. Desde su extremo norte, en el pequeño parque Embarkation, en Potts Point, tendremos unas estupendas vistas de la ciudad y sus principales símbolos. Bajando desde aquí por unas escaleras accedemos a Cowper Wharf, la carretera que circunvala la bahía de Woolloomoolloo. Aquí encontramos el famoso, según parece, Harry's Café de Wheels, un pequeño chiringuito de comida take-away que abrió en 1945 y desde entonces ha tenido multitud de visitantes ilustres (podemos ver fotos de famosos del cine, del deporte, la política, etc. De todo el mundo que pasaron por aquí). Siguiendo la bahía conectamos con el lado este del enorme Royal Botanic Garden hasta llegar al Mrs. Macquaries Point, con vistas sensacionales sobre la ciudad, la ópera y el puente que quitan el aliento. Continuamos bordeando Farm Cove y, como nos viene casi de paso, nos desviamos para visitar la Government House, la que fuera la residencia del gobernador de Nueva Gales del Sur. Fue construida en 1837 y es una especie de castillo gótico, muy inglés. Muy bonito el edificio como su entorno. La visita es gratuita, aunque para verlo por dentro hay que unirse a una visita guiada que hay que pagar. Finalizamos esta ruta panorámica recorriendo 300 m. Más desde aquí hasta llegar a la Opera.
MANLY
Manly (ferry desde Circular Quay) es uno de los distritos de playa más populares de Sidney. Situada a tan solo unas millas de Sidney partiendo del puerto, Manly debe su nombre al Capitán Arthur Phillip, después de que éste se encontrara cara a cara con las tribus aborígenes que habitaban la zona, a las que describió como "seguras de sí mismas y varoniles" ("manly" en inglés). Manly es el destino perfecto si lo que buscas es playa, con 18 playas, calas y ensenadas en las que puedes bañarte, navegar o incluso hacer surf. Además, Manly ofrece una gran variedad de tiendas, restaurantes y bares y atracciones para mantener a toda la familia entretenida.
Oceanworld (West Esplanade, Manly; abierto todos los días excepto el día de Navidad de 10am a 5.30pm) es un espectacular parque zoológico en el que podrás acercarte a algunos de los animales más peligrosos del planeta, como son los tiburones, cocodrilos, arañas y serpientes. Y si te animas, podrás nadar con tiburones y otras impresionantes criaturas marinas.
Es un bonito enclave situado en una estrecha península al norte de Sydney. Parece ser un lugar muy frecuentado por la gente de Sydney durante los fines de semana. Desde donde nos deja el ferry, en Manly Cove, basta recorrer los 400 metros de The Corso, una calle peatonal llena de tiendas y restaurantes, para llegar a la bonita playa de Manly, abierta al océano Pacífico. El paseo marítimo que rodea esta playa, la calle North & South Steyne, es uno de los caminos escénicos que se proponen a los visitantes de Manly. El otro, aún más interesante que éste, es el Manly Scenic Walkaway, un bonito paseo a pie de 9 km que pasa junto a pequeños puertos y playas, bonitas casas, puntos panorámicos, y que se adentra en el Sydney Harbour National Park. En el Manly Visitors Centre (junto al ferry) nos pueden proporcionar un mapa muy útil para recorrer estos caminos escénicos. Si no se va muy apretado de días opinamos que vale la pena venir hasta aquí y pasar al menos medio día.
Para llegar a Manly desde Sydney basta con tomar el ferry a Manly en Circular Quay. El trayecto dura 30 minutos y es muy bonito, por lo que vale la pena ir en la parte exterior del ferry. Ya sólo por disfrutar de la llegada a Sydney vale la pena. El billete de ida y vuelta cuesta 11'6 A$.
BONDI BEACH Y ALREDEDORES
Bondi Beach (autobús 380, 382 o 333 desde Alfred Street, o tren a Bondi Junction desde la estación central, luego tendrás que tomar uno de los autobuses anteriormente mencionados) es la playa más conocida de Australia y se encuentra en Sidney, a tan solo unos 20 minutos en coche del centro de la ciudad. Bondi Beach es un aplaya de más de un kilómetro de arean blanca, donde te encontrarás tanto a turistas como a los ciudadanos de Sidney disfrutando de este bello paraje. Además de los ingredientes esenciales de una playa del sur de Australia como son el surf, las gaviotas y el perfume de las cremas solares, Bondi Beach tiene un estilo propio. En Bondi Beach vas a observar y a ser observado y nunca se está demasiado bronceado o demasiado musculoso.
Bondi Beach tiene además una gran cultura gastronómica. Campbell Parade es una zona concurrida, ocupada casi en su totalidad por restaurantes, cafeterías y heladerías. Cualquiera de los restaurantes son un buen sitio para calmar el apetito además de para observar la vibrante vida que discurre en Bondi Beach. Y no te olvides de sacarte una foto con los socorristas, famosos en Australia por el buen trabajo que hacen además de participar en un programa de televisión.
La playa de Bondi es quizás la más famosa de Sydney y una de las más populares en Australia para los surfistas. De hecho el primer club de surf del mundo se creó aquí. Esta playa es grande y bonita, pero aparte de esto, sorprende su ambiente de mezcolanza de diversas comunidades inmigrantes y sobre todo la gran cantidad de gente que se puede ver haciendo deporte a lo largo de la playa o el paseo marítimo adyacente: surfistas, bañistas, o haciendo fitness, jogging o similar. Increible. Un itinerario a pie muy recomendable desde esta playa es ir hacia el sur por la calle Sandridge hasta conectar con un precioso camino que bordea los acantilados sobre el océano hasta llegar a Tamarama, una cala con fuerte oleaje. Continuando el camino llegamos a Bronte, un lugar encantador donde un parque con hierba llega hasta la misma playa. Vale la pena comprar comida para llevar (por ejemplo fish & chips) en alguno de los numerosos chiringuitos cercanos y comer al aire libre en alguno de los bancos que hay enfrente de la playa, mientras vemos a los surfistas desafiando a las grandes olas. Lo dicho, muy recomendable.
Para llegar a Bondi tomamos el autobús nº 380 en Oxford St (2'7 A$ el trayecto), el cual nos deja justo enfrente de la playa. Volvemos al centro de Sydney tomando el autobús nº 378 en Bronte (también 2'7 A$), junto al parque.
FORT DENISON
Fort Denison, también conocido como "Pinchgut", es uno de los edificios históricos más emblemáticos de la ciudad de Sidney, situado en el centro de la Bahía de Sidney.
El Fuerte Denison ha tenido, y tiene, una historia atípica. Cuando la Primera Flota llegó a la región en 1788, lo que hoy conocemos como Fort Denison era tan sólo una isla rocosa, popular entre las tribus aborígenes como lugar en el que pescar. En seguida se convirtió en el lugar al que los convictos que cometían un segundo crimen eran enviados para pasar una temporada encadenados y a base de pan y agua.
En 1839, dos buques de guerra americanos entraron en la bahía al amparo de la oscuridad y rodearon lo que ya se conocía como la Isla "Pinchgut". Las autoridades australianas temían un ataque por parte de Francia o de America, lo que les llevó a construir un fuerte alrededor de la isla.
La Torre Martello, la única de su clase que existe en Australia, fue completada en 1857, utilizando para ello 8,000 toneladas de arena. El nombre de la isla cambió a Fuerte Denison en 1862 y en 1992 la isla entró a formar parte del Parque Nacional de la Bahía de Sidney.
Fort Denison es hoy en día un destino turístico, abierto todos los días del año. Existen dos tours diarios, que puedes reservar en el Centro de Información del Parque Nacional de la Bahía de Sidney, en The Rocks.
TARONGA ZOO
A tan sólo 12 minutos en ferry del centro de la ciudad, cruzando el puerto más espectacular del mundo, se encuentra Taronga Zoo (Bradley's Head Road, Mosman; abierto todos los días de 9am a 5pm; ferry desde Circular Quay, tren desde Circular Quay o Wynyard Station). En Taronga Zoo podrás rodearte de coloridas aves mientras éstas vuelan en libertad en el anfiteatro del zoo, o subirte a bordo del teleférico, desde el cual tendrás unas vistas panorámicas sensacionales de Sydney Harbour. También podrás sacarte fotos con algunos de los animales que aquí residen, como son los koalas, o dar de comer a muchos otros. Pero no te pierdas también a los tigres, gorilas, girafas, elefantes u osos, todos ellos en su hábitat natural, que habitan en Taronga Zoo.
Aunque a nosotros no nos gustan demasiado los zoológicos, creemos que este en particular vale la pena, ya que ofrece la posibilidad de ver la numerosa fauna autóctona australiana, única en el mundo, aunque sea en cautividad (durante el viaje ya tendremos oportunidades de verlos en libertad o no), como canguros, wallabies, wombats, koalas, ornitorrincos, y muchos más. Además el zoo se encuentra ubicado en un lugar fantástico, con unas vistas excepcionales de la ciudad de Sydney y su bahía. El zoo es tan grande y hay tantas especies que fácilmente se pueden emplear más de 3 horas en ver las más significativas.
Para llegar al zoo hay que tomar el ferry en Circular Quay. Aquí podemos comprar el ZooPass que por 31'6 A$ incluye la entrada al zoo, el ferry de ida y vuelta, y el teleférico de subida y bajada entre el ferry y la entrada superior del zoo. Esto es más económico que comprados por separado (ya sólo la entrada al zoo vale 25 A$ y el ferry 4'5 A$ por trayecto). El trayecto en ferry entre la ciudad y el zoo es de 15-20 minutos.
HUNTER VALLEY
Hunter Valley a dos horas en coche al norte de Sidney, es famoso por muchas razones, pero sin duda si tenemos que destacar una de ellas es por sus bodegas y sus vinos. En el área de Hunter Valley conviven más de cien bodegas de vino diferentes, que puedes visitar bien por tu cuenta o bien en un tour de uno o más días de duración. En Cairns Unlimited siempre recomendamos hacer visitas guiadas, ya que así tendrás también la ocasión, no solo de observar el paisaje, sino también de aprender más sobre aquello que estés visitando.
Además de los famosos vinos que produce la región de Hunter Valley, una industria emergente es la de aceituna, produciendo aceite de oliva de gran calidad así como otros productos derivados de la aceituna. Es también una zona rica en queso, determinadas especie de fruta, uvas, miel y algunos manjares propios de la zona, como son condimentos fabricados caseramente y chocolate hecho con chiles.
Una vez en Hunter Valley también tendrás la ocasión de montar a caballo a través de viñedos, montar en globo para ver amanecer, visitar diferentes galerías de arte o recorrer la región en coche de caballos o bicicleta.
RESTAURANTES
Para cenar bien y no muy caro recomendamos el Mamma's Kitchen, un restaurante italiano en el 57 de Liverpool St. Entre la Ópera y Circular Quay hay varios chiringuitos donde es posible comer algo rápido. Otro sitio que no está mal es el restaurante Jacksons on George (176 George St).
CATALINA ROSE BAY
Este restaurante es visita obligada para los amantes del marisco y las vistas del océano- justo aquí comienza cada año la Regata de Yates Hobart. Los grandes ventanales de cristal están muy a tono con la decoración nautica del restaurante. Se alternan las influencias españolas con las japonesas en estas creaciones de pescado y marisco que se desacen en la boca. Allí podrá degustar platos como la crépinette de cangrejo y pargo o vieiras marinas con codorniz ahumada. El gusto por la carne de cerdo de Sydney está representado en una terrina de asado de cerdo con chicharrones servida sobre taquitos de mango. La presentación de los platos compite con la elegancia de este espectacular restaurante. Cierra los domingos por la noche. 1 Sunderland Avenue, Rose Bay Tel: (02) 9371 0555. Fax: (02) 9371 0559 Página web:
www.catalinarosebay.com.au/ Precio: 85A$.
GUILLAUME AT BENNELONG
Éste es el único restaurante en Sydney que es a su vez un auténtico símbolo arquitectónico mundial. Guillaume at Bennelong es la más pequeña de las tres estructuras que conforman la Opera House. Ésta es la vision artística de Jørn Utzon: una sala abovedada, con techo de cemento visto o "costillas". Los tonos marrones y la luz ámbar crean un espacio cálido y sensual. Bajo la dirección de Guillaume Brahini, un chef con tres estrellas Michelin, el menú del restaurante se basa en productos de la tierra cocinados con técnicas francesas. Algunos de sus platos son: ballotine de trucha del océano y pollo Glenloth asado sobre ravioli de foie gras de pato. Su especialidad es el atún con albahaca y vinagreta con semillas de mostaza. No hay cena más glamurosa que la que ofrece este restaurante. Es esencial reservar con bastante antelación. Cierra los domingos. El restaurante ofrece un menu para antes de la función, entre las 17.30 y las 19.00, y el precio por tres platos es de 65A$. Sydney Opera House, Bennelong Point Tel: (02) 9241 1999. Fax: (02) 9241 3795. Página web:
www.guillaumeatbennelong.com.au/ Precio: 78A$.
QUAY
Quay consiguió, por segunda vez, en el año 2004, el premio como "Restaurante del Año" que otorga el Sydney Morning Herald. Decorado con gran gusto en tonos grises y pasteles, el restaurante es famoso por sus fantásticas vistas de la Opera House y el Harbour Bridge- se recomienda reservar una mesa en la sección de la torre, que goza de vistas de 320° sobre el puerto. El chef del restaurante, Peter Gilmore, es famoso por sus presentaciones geométricas. Entre éstas podemos señalar su flor de zucchini rellena de cangrejo o su ravioli de codorniz a la brasa. Asegúrese de dejar espacio para los postres, porque su tarta de chocolate Valhrona es casi de otro mundo.
Overseas Passenger Terminal, West Circular Quay Tel: (02) 9251 5600. Fax: (02) 9251 5609.E-mail: info@quay.com.au Página web:
www.quay.com.au/ Precio: 95A$. Vino: 55A$.
SALT
El fuerte de ese restaurante son las creativas combinaciones del chef, Luke Mangan: su asado de venado con natillas de maíz y salsa de chocolate está dando mucho que habalr últimamente. Otras de sus especialidades son la tempura de codorniz y el asado de conejo. El restaurante se inauguró en 1999 y desde entonces, su cocina ha atraído a una clientela experta en la buena mesa. Cierra los domingos y lunes. The Kirketon, 229 Darlinghurst Road, Darlinghurst Tel: (02) 9332 2566. Fax: (02) 9332 2530. Página web:
www.saltrestaurant.com.au/ Precio: 90A$.
TETSUYA'S
Este restaurante es visita obligada para los críticos gastronómicos que deseen probar lo que ofrece Australia en lo que a buena cocina se refiere. El menú degustación consta de 12 platos de delicias japonesas/francesas. Este bonito restaurante es el décimo tercer mejor restaurante del mundo, según la revista Restaurant. La decoración es de estilo japonés, con madera oscura, moqueta color chocolate, sillas de Arne Jacobsen e incluso un relajante jardín japonés. El menu consiste de platos pequeños, como el famoso confit de trucha de Tazmania con huevas de trucha, los ravioli de langosta con vinagreta de algas marinas o pollo con rábanos japoneses a la brasa y salsa de pan. Cierra los domingos y lunes. 529 Kent Street Tel: (02) 9267 2900. Fax: (02) 9262 7099
www.tetsuyas.com/ Precio: 175A$.
FRATELLI PARADISO
Asegúrese de practicar su italiano y ponerse sus mejores galas para cenar enel Fratelli Paradiso. Aquí es donde acude la crème de la créme de Sydney para disfrutar de la auténtica cocina italiana. El risotto está perfectamente al dente; los calamares Sant'Andrea son tiernísimos; y la lasaña al horno con parmigiano está deliciosa. El restaurante está presidido por un mural de los labios de los Rolling Stones comiendo pasta. Fratelli Paradiso cuenta además con una pastelería en la que se crean irresistibles tartas, pasteles y hojadres.
12-16 Challis Avenue, Potts Point Tel: (02) 9357 1744. Fax: (02) 9357 1244. Precio: 55A$.
ICEBERGS DINING ROOM & BAR
Icebergs causó sensación cuando abríó sus puertas en bondi a finales de 2002. Construído sobre la antigüa piscina Bondi Icebergs, es actualmente uno de los mejore bares para cenar e ir de copas de Bondi. Su oferta culinaria incluye platos neo-mediterráneos como ensalada caliente de cangrejos de río King Island con patatas y guisantes frescos, o trufas de Umbria con tagliatelle casero. El arquitecto australiano Carl Pickering es el que se encargó del diseño de Icebergs, que cuenta con mesas azules y pantallas de aluminio. El restaurante goza también de unas fantásticas vistas a la famosa playa de Bondi. Cierra los lunes. 1 Notts Avenue, Bondi Beach Tel: (02) 9365 9000. Fax: (02) 9365 9099.E-mail: idrb@idrb.com Página web:
www.idrb.com/ Precio: 75A$. Vino: 35A$.
ARTHUR'S PIZZA
Nada sacia el hambre tras todo un día de compras por las boutiques de Paddington como una pizza tradicional o un buen plato de pasta de Arthur's Pizza. Aquí se sirven todos los platos clásicos italianos, junto con combinaciones más inusuales como salchicha de pato con provolone y patatas. Si el restaurante está lleno (que normalmente está), es aceptable que se siente en una de las mesas del pub de al lado. Los posters de cine de Jim Jarmusch adornan la estancia.
260 Oxford Street, Paddington Tel: (02) 9331 1779. Precio: 32A$. Vino: BYO (1,50A$ por persona).
BBQ KING
Podrá ver los patos pequineses colgados en la ventana, que son en definitiva lo que atraen a esta parrilla de Chinatown. El restaurante abre hasta las 02.00 y el menú inlcuye platos como su fantástico cochinillo y otras delicias chinas. No espere muchas florituras, sin embargo sí que disfrutará de una comida deliciosa.
18-20 Goulbum Street Tel: (02) 9267 2586. Fax: (02) 9267 2001. Precio: 32A$. Botellín de cerveza: 6A$.
BILL & TONI'S
Esta alegre trattoria del este de Sydney ha servido pasta, schnitzel, albóndigas (y no mucho más) durante un cuarto de siglo. Los cestos de pan y los refrescos de naranja son gratuitos, y el café que se sirve en el piso bajo es probablemente el mejor y el más fuerte de Sydney. 74 Stanley Street, East Sydney Tel: (02) 9360 4702. Precio: 20A$. Vino: BYO.
CHINTA RIA THE TEMPLE OF LOVE
La pieza central de este restaurante malasio, en Cockle Bay Wharf, es la estatua de un Buda gigante. Allí podrá disfrutar de asequibles platos de laksa (sopa picante) y noodles, en un ambiente carnavalesco, en medio de humeantes sartenes.
Level 2, 201 George Street Tel: (02) 9264 3211. Fax: (02) 9264 1411. Página web:
www.cocklebaywharf.com/chinta.html Precio: 40A$. Vino: 25A$.
HARRY'S CAFÉ DE WHEELS
Éste no es un restaurante, si no un puesto de pasteles de carne. Harry's lleva sirviendo los tipicos pasteles de carne australianos, con guisantes y puré de patata a marineros, matones y marchosos desde 1945. Por eso se ha convertido en toda una atracción turística, decorado con fotografías de los famosos que se han acercado por allí (incluyendo el legendario Coronel Sanders). And the pies? Bloody good tucker, mate. Harry's permanece abierto hasta las 04.00 durante los viernes y sábados.
Cowper Wharf Road, Woolloomooloo Tel: (02) 9357 3074. E-mail: enquiries@harryscafedewheels.com.au Página web:
www.harryscafedewheels.com.au/ Precio: 4A$ (cada pastel). Vino: No tiene licencia para servir alcohol.
THAI POTHONG
King Street, Newtown parece tener más restaurantes tailandeses que Bangkok, y Thai Pothong ofrece la mejor relación calidad-precio. Los platos como el pollo con anacardos o la sopa torn yung son deliciosas. El servicio es muy atento y el restaurante está siempre lleno de gente que saben que están comiendo bien a un precio razonable. El restaurante es de estilo asiático, con luces tenues y una colección de antigüedades tailandesas, sombrillas y combinaciones de flores.
294-298 King Street, Newtown Tel: (02) 9550 6277. Fax: (02) 9519 8050. Precio: 35A$.
WASAVIE
Wasavie es un restaurante japonés con un toque francés. Allí se sirve el sashimi con una "piedra caliente" para cocinarlo a su gusto. El buche de cerdo caramelizado es tan tierno que se puede cortar fácilmente con los palillos chinos. Hay también toda una selección de mousses para postres. Wasavie no acepta reservas después de las 19.00. Cierra los lunes.
8 Heeley Street, Paddington Tel: (02) 9380 8838. Fax: (02) 9380 7955. E-mail: wasavie@saqura.com Precio: 40A$. Vino: BYO (3A$ por el descorche de la botella, por persona).
SHOPPING
Los grandes almacenes más famosos de la ciudad son: David Jones, 86-108 Castlereagh Street, Gowings, esquina de Market Street con George Street, que data de 1868, y Myer, 436 George Street.
Castlereagh Street es la calle de los diseñadores, aunque también los encontrará en los prestigiosos almacenes Chifley Plaza, 2 Chifley Square, y en el MLC Centre, 19-29 Martin Place. También hay centros comerciales y dos espléndidas galerías victorianas: el Strand, 412-414 George Street, y el Queen Victoria Building, 455 George Street, también conocido como QVB. Market City, Thomas Street, Haymarket, tiene tiendas de fábrica y mercados tradicionales.
Un impresionante grupo de diseñadores de moda de cosecha propia han establecido Sydney como la capital de la moda de la región y han conseguido acercarse a los mercados asiáticos y americanos. Entre los diseñadores más populares se encuentran Collette Dinnigan (que frecuentemente acude a la Semana de la Moda de Paris), 33 William Street, Paddington, y Lisa Ho, 2ª-6ª Queen Street.
Para comprar artículos con sabor local, diríjase a Simon Jonson Quality Foods, 55 Queen Street, Woolahra, donde encontrará los alimentos más exquisitos. Para arte aborigen, acérquese a Coo-ee Aboriginal Art, 31 Lamrock Avenue, Bondi Beach, y la ropa de surf más moderna la encontrará en Surfection, tienda 2021, 500 Oxford Street.
Merece la pena explorar Oxford Street para inspeccionar la gran variedad de tiendas que allí puede encontrar, desde las tiendas más gay en Darlinghurst, pasando por los pequeños establecimientos de moda de Paddington y Woolahra, hasta las mejores tiendas de antigüedades de Queen Street. Un poco más lejos, en Bondi Junction, se encuentra Westfield Bondi Junction, un complejo commercial de gran calidad donde encontrará tiendas de diseñadores internacionales, grandes almacenes y tiendas especializadas para satisfacer todo tipo de necesidades.
Darling Harbour, Chinatown y el barrio histórico The Rocks están llenos de tiendas de souvenirs y artesanía. The Rocks es también el lugar más apropiado para comprar joyas hechas de auténtico ópalo australiano. The Rocks Opal Mine, 13 Clocktower Square, y Flame Opals, 119 George Street, cuentan con buenas selecciones de piedras preciosas, así como Gemstone Boutique, 388 George Street. Para perlas de la costa noroeste de Australia, diríjase a Paspaley Pearls, 142 King Street, donde encontrará algunas de los mejores ejemplares del mundo.
Hay mercados en Balmain, Bondi Beach y The Rocks. Sydney Fish Market abre todos los días (07.00-16.00), en Pyrmont, y ofrece más de 100 especies del pescado más fresco, además de puestos de sushi y cafeterías.
El horario comercial suele ser de lunes a sábado (09.00-18.00), y los jueves no suelen cerrar hasta las 21.00. Cada vez hay más tiendas que abren los domingos. Los precios incluyen un 10% de IVA. Podrá encontrar varias tiendas de artículos libres de impuestos tanto en el centro de la ciudad como en el aeropuerto. Para poder comprar en estas tiendas deberá enseñar su pasaporte junto con su billete de avión.