Después de llevar a cabo diversas gestiones en el propio hotel, nos hemos acercado hasta el barrio de Boca, en el que ya estuvimos en septiembre. Hoy la visita ha resultado apoteósica. Nos hemos encontrado con el puente colgante Avellaneda recien restaurado. Flamante, impecable. Ha compensado la jornada.
Un paseo por Caminito y la vista de la nueva escultura que han instalado frente al mar, formada por 1254 bicicletas de acero inoxidable.
Luego algunas fotos inéditas y regreso hasta la confitería London City, donde nos hemos encontrado con el mismísimo
julio Cortazar. Un placer ver su "Rayuela".