Rumania verde,verde. ✏️ Blogs de Rumania

Bueno, pues ya esto se va acabando, salimos de Brasov rumbo a Sinaia.

Buena carretera, se llega bien. Empezó a llover como si no lo hubiera hecho nunca. Aparcamos en la misma puerta del Monasterio y tuvimos que esperar dentro del coche que parara un poco la lluvia. Después de media hora, por fin pudimos salir a visitar el monasterio, a pesar de haber visto un montón, este también nos gustó. Merece la pena la visita, y no dejéis de entrar en el pequeño museo.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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De allí subimos hasta el parking de más arriba, cerca del castillo de Pelisor. Después de aparcar (10 lei) se llega como a una plaza con edificios muy bonitos.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Y enseguida aparece el castillo de Pelisor.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Estaba medio lloviendo, y de vez en cuando, caía fuerte, por lo que nos fuimos directamente al Castillo de Peles a coger las entradas. Una media hora de cola. Ni audio-guía ni nada, solamente hay unos carteles en cada sala donde te dan una reseña breve del contenido de la habitación.

Si tienes la suerte de que en ese momento entre un grupo con guía español, perfecto, de lo contrario irás con rumanos, ingleses o lo que toque. No hay horas de entrada. Abren y cierran la puerta de entrada conforme se forman los grupos.

Nos tocó grupo rumano, con guía en rumano, por supuesto, y tuvimos que ir con ellos. Un poco por delante, a veces por detrás. Pero más atrás, venía otro grupo vociferando así que anduvimos un poco entre los dos. Resultó un poco agobiante, no puedes quedarte el rato que quieras, cuando se acerca el grupo, abren el cordón y cuando pasa, lo cierran otra vez. El ritmo que lleva el grupo es obviamente el que marca el guía, y van rápido, os lo aseguro.

La verdad que es precioso, por dentro y por fuera, pero no me gusta nada, pero nada, ver las cosas a toque de silbato.

¡Qué derroche de riquezas!, esto de las monarquías es para hacérselo mirar. Que quiero ir a la Alhambra, pues hago mi salón, que quiero ir a Turquia, pues otro salón, así hasta donde quieras, por no hablar de jarrones, espejos, maderas, mármoles y todo lo que os imaginéis.

Hicimos el recorrido completo, con las habitaciones de arriba. ¿ Merece la pena pagar la diferencia, que me parece dicho sea de paso, exagerada? Pues no sé qué deciros, decisión muy personal. Lo que no pagamos fue la tasa por fotos. Las fotos de interiores con mi súper máquina, no suelen decir mucho, pero si queréis hacer fotos, os aconsejo pagar, ya que controlan mucho.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Finalmente no entramos en Pelisor, unas fotitos por el exterior ya que había dejado de llover, y rumbo a Bucarest.

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Dejamos nuestro Ford Fiesta que se portó como un campeón durante los más de 2.600 Kms. y cogimos el bus desde el aeropuerto al centro. Un calor asfixiante, atascos, y más de una hora de trayecto.

En Bucarest reservamos “Lucy Accommodation”. Un apartamento muy bien situado, cerca del casco histórico y cerca de la parada bus 783 de Universidad. El dueño encantador, con un inglés perfecto y que nos dio toda clase de facilidades. Nos comunicamos por wasapp, sin problemas. La calle y la entrada de la casa son un poco “viejillas”, pero el apto. está fenomenal.

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Nos dispusimos a disfrutar del último día. Teníamos tiempo hasta las 6,30-7 de la tarde que teníamos que ir al aeropuerto.
Hacía un calor espantoso, como 34º y andando de aquí para allá, resulto un día súper agobiante.

Fuimos primero a ver el enorme Parlamento, sólo por fuera,

*** Imagen borrada de Tinypic ***

de allí fuimos por un parque muy agradable, Cismigiu, entre sombras de los árboles se estaba bien.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Caminando, caminando, llegamos hasta la Plaza de la Revolución. Decepcionante lo descuidado que tienen el monumento.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Paramos a comer y ya nos adentramos en el casco histórico y vimos los restos de Curtea Veche, donde creo que vivió Vlad Tepes, hay una estatua suya, la iglesia, la calle Lipsani, la biserica Stavropoleos….. Todo bonito y bien cuidado, pero como os digo el calor era tremendo y a esas horas de la tarde, solo apetecía sentarse a la sombra.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Finalmente para ir al aeropuerto, con la experiencia del bus del día anterior, decidimos coger taxi. Un poco de aventura ya que no resulta tan fácil pararlos por la calle. Hay que llamar por tfno.. El sistema me parece bueno, además creo que te dicen el precio y te ahorras regateo y posibles abusos. El caso es que paramos a uno y nos pide 100 lei. Nos dio la risa y lo dejamos plantao, los dos siguientes me pedían la “comanda” como no teníamos pues nada. Por fín se paró uno que nos pidió 60, le dije que 50 y ok. Unos 11 € me pareció correcto, los atascos por lo menos a esas horas son tremendos, le costó casi una hora llegar al aeropuerto.

Y se acabó, vuelo con Ryanair y para casa.

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Rumania, país que nos sorprendió gratamente. Gente en general encantadora y paisajes preciosos.

Pensiuneas. Una gozada de alojamientos, son como lo que aquí llamamos “casas rurales”, cuanto más afuera de las ciudades, mejor. Están situadas en paisajes muy bonitos y la comida casera es buenísima. La atención de 10.

La comida en general muy rica, aunque creo que excesiva en grasa. Las sopas buenísimas, los dulces muy ricos también.

Precios. Para nosotros, barato. Alojamientos, una media de 30€ la habitación doble con baño, y a veces con balcón o terraza. Las comidas, cenas por 5-7 €. Las cervezas de 400 ml. pagamos desde 80 cts. a 2-3 euros. Botella de buen vino, 10€ en restaurante, en el súper la mitad.

De las entradas que pagamos, lo más caro, Peles, creo que fueron 60 el tour completo y 30 sin las habitaciones de arriba. La salina de Turda 30. Monasterios e Iglesias 5-10, donde te lo pedían. Todo esto en Leis, el tren Mocanita creo que fueron 24 € dos billetes.

La zona de Brasov-Sinaia-Bucarest, más cara que el resto.

Las carreteras. Las peores la zona de Maramures, Bucovina algo mejor, lo que pasa es que atraviesan todos los pueblos y allí las indicaciones de velocidad son 30-50. A partir de Brasov y hacia Bucarest, mejoran sustancialmente. Hay que hacerse a la idea, sea la carretera como sea, que la media que vais hacer, no pasa de 50kms./hora.

Los conductores. Digamos que el 90% circula normal. Pero ese 10% restante son un peligro público. Adelantamientos en curvas, con raya continua, sin sitio…Paradas donde les da la real gana, en medio de la carretera, en plena curva. A estos energúmenos hay que añadir lo habitual: Carros tirados por caballos, ganado en mitad del camino, por dos veces nos encontramos de morro con 3 caballos preciosos en medio de la carretera, bicicletas que circulan dando eses, pasos a nivel sin barreras… En definitiva que hay que ir con todos los sentidos puestos y alguno más.

Si tú vas circulando normal, digamos que a 80 por hora y ves por el retrovisor que viene un audi, bmw o similar, follao, estate seguro que te va a adelantar, así que atento, y que pase como pueda, porque te va a pasar, sin pestañear, sea curva , raya continua, o venga un camión de frente.

Procurad evitar los sitios más turísticos, en fin de semana: Sinaia, Bran, Salina de Turda, Lago Rojo.
Y última recomendación, si tenéis pocos días y pensáis hacer lo típico de Rumania: Bucarest, Bran, Sinaia etc. No lo penséis más, cambiar la ruta y dirigiros a Maramures-Bucovina, para nosotros, lo mejor del viaje con diferencia.

Termino con una foto del busto de Vlad Draculea, héroe para muchos rumanos, príncipe de Valaquia, conocido como Vlad Tepes (el empalador), y que dio origen y sobre todo dinero a Bram Stoker y los dráculas y vampiros siguientes.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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