Escocia en coche ✏️ Blogs de Reino Unido

Habíamos programado un día muy completo, y como la dueña del albergue nos sugirió algún sitio más no previsto, nos tocaba madrugar bastante. Desgraciadamente durante toda la mañana llovió fuerte, pero eso no nos echó para atrás. La primera visita fue el faro de Neist Point, precioso lugar en la zona norte. El párking es muy pequeño, así que recomiendo llegar pronto, y el camino hasta el faro es una gozada.
La siguiente parada era Dunvegan, donde hay una panadería a pie de carretera donde puedes comprar producto local de calidad. No visitamos el Castillo, sino que continuamos hasta Claigan para ir a Coral Beach. Hay un parking grande, y una caminata de unos 20 minutos. La playa no es gran cosa, pero las vistas son grandiosas. Se ven a lo lejos las focas en los islotes, y algunas barcas cerca de ellas haciéndoles fotos.
El próximo lugar para ver era Fairy Glen, un poco antes de llegar a Uig a la derecha. Guarda una hora y media o dos para visitar bien este sitio: hay pequeñas colinas que conquistar, montones de piedra que hacen los turistas, y tiene algo de mágico.
En el puerto de Uig hay una fábrica donde puedes degustar y comprar la cerveza local. Y tras comer allí, fuimos camino de The Quiraing por la supuesta carretera que atraviesa la península. El tráfico era espantoso, mucho más del que se puede asimilar, y tocó armarse de paciencia. Se sube poco a poco, y antes de emprender la bajada hay un paisaje precioso.
La bajada te lleva a la costa, y antes de llegar a Portree vimos la cascada de Kilt Rock (poca cosa pero se para bien y es recomendable) y el Old Man of Storr (no subimos hasta allí porque el parking estaba completo y cuesta casi dos horas).
Una vez en Portree se puede aparcar en el centro si tienes suerte, y el pueblo es muy bonito (especialmente la zona del puerto). Hay supermercados, tiendas, y restaurantes con pescado de la zona, aunque nosotros no nos quedamos a cenar porque tras un día duro de conducir por malas carreteras queríamos llegar de día al albergue.
En Carbost es visitable la destilería de whisky Talisker, pero cerraba a las cinco y la visita guiada era solamente en inglés. Simplemente aparcar allí el coche y admirar el paisaje ya merece la pena.

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Tras desayunar nos montamos en la furgoneta hacia Armadale, lugar desde el que se toma el ferry hasta Mallaig. Nosotros reservamos meses antes por internet la plaza para las 10.30, puesto que va lleno hasta la bandera y no queríamos perder tiempo. Todo bien organizado, pones el auto en un carril y cuando llega el barco te van indicando dónde dejarlo. El viaje es muy bonito, con vistas magníficas, y se pasa el rato enseguida.
La próximas paradas eran las Silver Sands de Morar, así como Camusdarach Beach (donde se rodó parte de la película antes mencionada "Local Hero"). Hay pequeños parkings donde dejar la furgoneta, y tras andar unos minutos te plantas en las playas, todas ellas muy recomendables.
El tráfico es elevado y la carretera no es buena, pero es mejor que en Skye. Íbamos a parar en Fort William, pero finalmente solamente repostamos. No parecía gran cosa, así que preferimos ir a Glencoe. En el pueblo hay una buena cafetería para descansar, y tomamos después la carretera del valle. Paramos en el centro de visitantes para que nos recomendasen qué hacer, y lo mejor era simplemente seguir la carretera hasta las pistas de esquí y parar donde pudieras para disfrutar de la naturaleza. Es imprescindible su visita.
El alojamiento lo teníamos en Oban, y como se pasa cerca de Stalker Castle nos acercamos a la costa para fotografiarlo. No es fácil llegar allí, pero fuimos probando caminos hasta llegar a un carril bici desde el que pudimos verlo bien. Es impresionante, y vimos una barca que acercaba turistas.
Nuestro hotel en Oban era McCaig's Return Hostel, algo cutre pero para pasar una noche cualquier sitio vale. Recepción muy amable, nos recomendaron dónde aparcar, dónde cenar y qué paseo dar por la noche, y el desayuno algo básico pero fue suficiente.

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Madrugando de nuevo, rumbo a Stirling. Subimos en coche a lo alto del pueblo para ver las vistas, y la carretera nos llevó por Tyndrum y por Inveranan a lo largo de Loch Lommond. La lluvia no nos permitió ver el paisaje al completo, pero aun así se apreciaba la belleza.
Paramos a ver Inchmahome Priory en Port of Menteith (incluido en el Explorer), unas ruinas en un islote muy bonito, en el que lo mejor es el viaje en barco que te lleva allí.
Y ya en Stirling dejamos la furgoneta en el mismo parking del castillo (cuatro libras), antes de comer en un pub del centro del pueblo. El castillo es bonito, pero es inevitable compararlo con el de Edimburgo y sale perdiendo. Por la autopista llegamos hasta Glasgow, una lástima no tener tiempo para ver algo de la ciudad porque el hotel lo cogimos a cinco minutos caminando del aeropuerto. Dejamos primero a la familia en el hotel, fuimos antes de las 19.00 a la sucursal de Arnold Clark de Murray Street en Paisley, y después amablemente nos acercaron en coche hasta el hotel.
El hotel fue el Courtyard by Marriott Glasgow Airport, el mejor de todo el viaje por la calidad de las habitaciones y de las camas, pero no pudimos disfrutarlo demasiado ya que el vuelo a Londres salía muy pronto.

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