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Hoy iba a ser uno de los mejores días del viaje.
Nos levantamos muy prontito como siempre a pesar de las insistencias del pobre Mike de estar más tiempo en la cama.
A las 12 teníamos entradas para visitar el Parlamento.
Yo había leido que hay que ir muy pronto a recoger las entradas y que te dan para una hora y allí tienes que estar para la visita pero resulta que en uno de los foros me dijeron que enviando un email a "tourist.office@parlament.hu" diciendo a que hora quieres hacer el tour, en que idioma y para cuantas personas te mandan un email con la reserva y ya no tienes que hacer cola.
Pues eso hice, me contestaron en seguida y sólo tuvimos que estar allí 15 minutos antes de que comenzara el tour para recoger las entradas.
Como habíamos salido tan pronto del hotel teníamos muchísimo tiempo para llegar al Parlamento asi que llegamos a la PLaza Roosebelt y ya en el río atravesamos el puente de las Cadenas y pensamos en dar una vueltecita por el otro lado pero sin subir a la zona del castillo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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Al otro lado del puente llegamos a la Plaza Clark Adam Ter donde está el km 0 de Budapest desde donde salen todas las carreteras del país y a la derecha vimos el funicular que te lleva al barrio del Castillo y que cogeríamos al día siguiente.
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Por aquí nos liamos a andar y a andar disfrutando de las vistas y por toda la orilla llegamos hasta estar justo en frente del Parlamento. Madre mía que bonito, ¡es enoooorme y el estilo recargadísimo pero a mí me encantó!
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En la orilla también vimos una iglesia calvinista con una forma muy rara desde fuera que estaba dentro de un jardincito muy mono, la iglesia de San Miguel y la de Santa Ana.
En la plaza donde estaba la iglesia de Santa Ana pasamos a un mercado a desayunar que todavía no habíamos comido nada desde que habíamos salido del hotel y como estabamos a mitad entre el Puente de las Cadenas y el de la Isla Margarita decidimos seguir hacia delante hasta la isla Margarita y cruzar por allí al lado del Parlamento.
Madre mía la verdad es que hacía mucho sol y nos dimos una buena paliza pero las vistas merecieron la pena totalmente ( a esta hora yo estaba nerviosa porque se nos habían alargado tanto el camino que yo pensé que no llegabamos a las 12...)
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La entrada a la Isla Margarita es por este puente y se ve un parque muy chulo con al gente llegando en bicicleta y haciendo deporte.
Nosotros cruzamos al otro lado y sobre las 11:30 estabamos en la Plaza Kossuth Lajos Ter del Parlamento, recogimos las entradas sin esperar cola y esperamos a que llamaran a nuestro grupo para entrar.
El tour era en inglés (también lo hay en español pero no me acuerdo de las horas) y duró unos 50 minutos. El Parlamento es bonito por fuera pero por dentro es también impresionante todo decorado con mármol y oro.
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Estabamos cansadísimos y pensamos que hoy era un buen día para visitar uno de los maravillosos baños de la ciudad (sino el mejor): los baños de Szechenyi.
Antes de ir a los baños pasamos por el hotel para recoger los bañadores, las chanclas y las toallas. Había leido que la toalla había que alquilarla asi que cogimos la del hotel y nos ahorramos un dinerillo.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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Ya con la mochila, bajamos por la calle comercial de Vci Utca para comer en el mercado Central. Había muchísima gente comprando, sobre todo turistas. En la parte de abajo había puestos de comida y en la primera planta puestos de souvenirs. Yo me esperaba que hubiera más sitios para comer tal y como había leido pero sólo había algunos y estaban llenos de gente. Aun así probamos una especie de pizza con masa como de bollo y que no estaba gratinada y una patata caliente rellena. Bueno no estaba mal, un poco grasiento quizá pero se podía comer.
En el piso menos 1 donde casi no había puestos encontramso un supermercado chino donde nos entretuvimos un rato comprando especies y ya después de esto salimos a la calle en dirección a la plaza de Kalvin Ter.
En esta plaza hay una iglesia calvinista que queríamos visitar pero estaba de obras y no se podía pasar. Siguiendo esta calle vimos el Museo Nacional de Hungría, la Gran Sinagoga y otros monumentos importantes que estabn en la misma calle y llegamos a la Plaza Deak ter donde teníamos que coger la línea amarilla que nos llevaría al final de la calle Andrassy a la Plaza del héroes en la que habíamos estado ayer que es donde estaban los baños.
En esta plaza encontramos el Parque de la ciudad por el que paseamos ayer a la derecha y los baños, el zoo y un pequeño parque de atracciones a la izquierda.
Que os voy a decir de los baños, impresionante es poco.
Es uno de los baños más grandes de toda Europa, el edificio es precioso y lo tienen muy pero que muy bien montado.
Te separan por sexos para que te cambies y guardes las cosas en una taquilla que se abre y se cierra con una pulsera que te dan y ya sólo con tu toalla vas a las piscinas.
Entramos directamente a las piscinas experiores y al principio me quedé un poco chafada porque las piscinas que estaban a 36º devían de ser muy chulas en invierno cuando fuera hace frío pero con casi 40 º de temperatura en la calle meterte en ese agua me agobiaba un poco asi que decidí tomarmelo con calma y quedarme un rato fuera.
Más tarde empezó a hacer un poco de aire, se pasó el calor y ya pude disfrutar totalmente de las tres piscinas exteriores. Era divertidísimo, tenían fuentes y chorros que te daban masajes, mesas para jugar al ajedrez dentro del agua y un pequeño río en el que te llevaba la corriente con mucha fuerza muy chulo.
Después de disfrutar aquí como niños decidimos ver que había dentro, en una zona donde la gente entraba y salía constantemente.
Entramos y tachan: las termas. Estabamos tan emocionados con las piscinas exteriores que nos habíamos olvidado de todas las que hay en el interior con diferentes temperaturas y de las saunas.
No se, probaríamos unas 20: frías, calientes, templadas, congeladas a 10º para luego quemarte entrando en la de 40º...Una pasada, ¡lo pasamos genial!
Teníamos ya la piel arrugadísima como las pasas cuando salimos otra vez a las piscinas del exterior. Al ratito empezó a llover y aunque no hay ningún problema y te puedes seguir bañando decidimos que ya habíamos tenido bastante y que nos marchabamos. Eran como las 19 h y dicen que merece la pena ver los baños iluminados pero a nosotros no nos dió tiempo, lo dejaremos para la próxima visita a Budapest que volveremos a estos baños sí o sí.
Nosotros no tiramos fotos pero he buscado algunas para que os hagais una idea de cómo son aunque en persona todavía impresiona más.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
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Cuando salimos seguía lloviendo y nos resguardamos un rato en un bar que había a la puerta del zoo mientras recuperabamos líquidos.
Había leído en un diario de una viajera que en la Plaza Liszt Ferenc a mitad de la calle Abdrassy estaba llena de bares y restaurantes y decidimos coger el metro y pararnos allí. La parada más cercana es Oktogon y aunque el día anterior habíamos recorrido toda la calle Andrassy habíamos ido por el otro lado y no la habíamos visto.
Efectivamente había bastantes restaurantes y todos tenían bastante buena pinta. Era un poco pronto pero los baños nos habían dado mucha hambre. Nos decidimos por el restaurante Karma que me sonaba por el diario de esta viajera y madre mía que acierto.
No había sitio en la terraza que estaba hasta los topes pero nos dío un poco igual porque todavía chispeaba un poco y aunque había toldo y no te mojabas hacía también bastante aire.
El restaurante chulísimo, con una decoración así como un poco árabe-india. Cobraban un 5% de servicio pero no nos importó porque los precios eran baratos y estaba escrito bien grande en la carta para información de los clientes no como en otros restaurantes donde cuando pides la cuenta te quedas con cara de tonto al ver que te han cobrado más y no sabes si es por ser turista o porque le has caido mal al camarero....
La carta era enorme y pedimos un plato indio enorme de pollo con arroz y diferentes salsas que venía con unos trozos enormes de pan indio, pato con verduritas y dos postres. Todo muy muy rico, nada caro y el ambiente no se, me encantó, muy tranquilito, un poco oscuro y muy guay....
Después de la comida ya no llovía y decidimos andar hasta el centro.
Al llegar al Parque de Erzsebet Ter que por cierto estaba llenito de gente joven giramos a la derecha para meternos por las calles de restaurantes y muy chulo el paseo hasta el hotel también.
Hoy nos había salido todo redondo....
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