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Jueves 28 Febrero
Día 6 Venecia (Puente Rialto, Plaza San Marcos)
Nos levantamos a las 05:50 AM pues nuestro tren salía a las 6:55 y aunque estábamos bastante cerca de Roma Termini, nunca está de más salir con tiempo de sobra. Empacamos y salimos hacia la estación de Tren.
Por recomendación de Marco Polo, había comprado mis boletos con antelación en el Ferggianeto por 80 euros hacia Venecia Santa Lucia e impreso los boletos en casa.
Al llegar a Termini fue fácil encontrar el andén correcto, pues las pantallas y tableros lo indican con claridad.
Ojo, hay colegas por todo Termini que no son empleados de Tren Italia que se ofrecen a llevarte a tu carro de tren y una vez en la puerta cargan tu maleta, la colocan en los espacios para el equipaje y te llevan hasta tu asiento. Por más que insistí en que no nos ayudara, parecen sordos; y uno de ellos hizo eso mismo que les cuento. No lo hacen con mala intención, solo tratan de ganarse una moneda, la cosa es que te piden 2 euros como propina, le dije a mi mujer que sacara 50 centavos, se los dio y el hombre queda mirando como esperando más, le digo “No more”, parece entender molesto y se retira sin mayor problema.
Estoy sorprendido de la puntualidad y eficiencia del sistema de trenes, en mi país ya es nulo el servicio de tren para pasajeros. En cuanto dio la hora, empezó a andar sin más y allá sale a toda velocidad rumbo a Venecia, durante el trayecto en las pantallas te va mostrando con un GPS en qué punto te encuentras. También me sorprendió que los asientos tuviesen enchufes, lo cual agradecí para cargar mis aparatos.
Solo hace algunas paradas en los puntos más importantes: Mestre, Bologna y un par mas que no recuerdo; de todas formas el tren llega a la hora que dice tu boleto.
El tren cuenta con cafetería, baño y servicio de Wifi (pagando un suplemento).
Durante unos instantes que no recuerdo por que zona, al mirar por la ventana me pareció ver algo de nieve quizá por lo cercano a las montañas, pero no lo se, me conforme con verla asi, de lejecitos, pues sabia que aunque llovía y hacia frió ya estábamos fuera de temporada para que nevara.
En fin...luego de una pequeña parada en Venecia Mestre y luego de algunos minutos, encontré feliz a mi mujer, pues ya estábamos cruzando el puente hacia Venecia.
La estación es pequeñita, no hay pierde con la salida y así, sin más, apreciamos por primera vez el Gran Canal, era mediodía. No sé si esta siempre, pero saliendo hay una casetita como de información turística y compra de tickets para quien sabe que. Si andan perdidos, aconsejo pasarse por ahí.
Como tal no teníamos un itinerario establecido, simplemente nos dejamos llevar por la espontaneidad un día a ver la parte central de la isla, otro día la parte Oriente, otro día Lido y así. Es lo mejor, pues estaríamos 4 días y las distancias son tan cortas que veríamos todo con calma.
Nada más salir, empezamos a perdernos por las calles para buscar el desayuno-comida. Llegamos a un local pequeñito atendido por japoneses, chinos o vayan a saber ustedes con unas mesitas en el exterior y la lista de precios a la vista de todos. Por supuesto pizzas, grandes y cada una a 7 euros. Pedimos 1 para cada quien más bebidas. Pedí la cuenta y vino el auto robo a mi persona. Fueron 20 euros en total, saque 2 billetes uno de 20 y uno de 5. Le entregue ambos pesando que debía regresarme cambio para dejarle su propina de 2 euros y me dice “muchas gracias”
¿Por qué hice eso? No lo sé, momento de distracción creo yo, me quedo un rato esperando aun que me den mi cambio, hasta que mi esposa me dice “¿eres muy generoso o te llueven los euros?” Me doy cuenta del tremendo error y qué más da!!! Ni modo que vaya a reclamárselos.
Después del sablazo con propia mano, seguimos perdiéndonos un rato, parando en algunos puntos los cuales no me moleste en buscar en el mapa, Iglesias, placitas y demás. Sacando fotos a diestra y siniestra, simplemente disfrutando el placer de estar en Venecia. Decidimos ir al primer punto conocido y enfilamos hacia Puente Rialto, no hay pierde, en muchas esquinas de las callecitas hay indicaciones, las cuales seguimos, antes de llegar, paramos en una dulcería para comprar algunos chocolates para los amigos y seguimos andando, antes de llegar a puente Rialto, encontramos una placita donde venden souvenirs de lo más variado así como puestos de comida barata. Compramos algunas chucherías y una crepa con nutella para mi esposa (3 euros) y llegamos a Puente Rialto a contemplar el Gran Canal mientras se acaba su crepa.
Seguimos con andar lento hasta llegar a otro punto identificable y el mas importante de Venecia: Plaza San Marcos.
Su basílica dorada con clara influencia bizantina, el campanario, la misma plaza me deja boquiabierto, fotos allí, allá, el disparador de la cámara no descansa, a lo lejos se ven venir varios acosadores con la rosas que habíamos visto en Piazza Popolo en Roma, sabemos cómo evitarlos ahora con un firme “No, grazie” y seguimos hasta donde termina la plaza. Justo ahí está el servicio de Góndolas y un montón de gondoleros con sus Jerseys a Rayas y su sombrero y no puedo evitar empezar a tararear la canción de los Hombres G. El precio está a la vista: 80 eurazos por 40 minutos puff!! Me lo habían advertido en el foro e íbamos preparados; no había presupuesto para tal lujo por muy romántico que fuese, después mi mujer se decepciono al ver a varios que no cantaban; muy serios los hombres esos, dijo que así no valía la pena y estuve de acuerdo.
Descansamos y salimos de nuevo, otra vez a perdernos, no me canso de hacer eso y dejar por una sola vez los itinerarios planeados ya empezando a oscurecer descubrimos una Gelateria que además vende Pizza al Taglio y Calzones de varios sabores.
Me hago con uno de carne tipo Kebab y ella con uno de 4 quesos, pido una birra y 2 más para llevar (fueron creo que 8 euros), además ella pide un gelato a 1.30 euros, mismo tamaño que los de Roma y más baratos. No soy de los que me encanta la fruta, pero ese gelato de manzana verde estaba para morirse, y me prometí regresar en cuanto pudiera por uno igual. Regresamos a San Marcos ya casi de noche no sin antes pasar por la tienda de Ferrari que esta a una callecita de ahí, cosas chulísimas, relojes, chamarras, aunque todo un lujo para el bolsillo que llevábamos.
Regresamos por otro gelato de manzana (me hice adicto a ellos) y llegamos al mismo localito atiborrado de mas gente que vi antes, mi mujer descubre el por qué : Venden Vino por copa y birra muy barata. El vino 60 centavos de euro el más barato y los más caros 80 centavos.
El localito es pequeño pero el hombre habla ingles, mi mujer no es de vino así que empiezo por dos copitas de Cabernet, pues el Merlot se había terminado. Luego Pido Chardenneu que es blanco y le doy a probar a mi mujer, le gusta y empezamos con el copeo.
No recuerdo cuanto tomamos, creo que fueron como 8 o 9 euros en total entre copa y copa. El tendero nos sirve la última pues avisa que va a cerrar (8 de la noche sin pretexto).
Nos sentimos normales, subimos las escaleras, pero llegando a la puerta de la habitación, todo se empieza a mover, instintivamente se lo que pasara; como sea alcanzo a poner la alarma de mi celular y me tiro a la cama, siento a mi mujer hacer lo mismo y zaz!!! Perdí la noción!!! xD
Mi primera borrachera en Europa con vinito blanco, nunca me había puesto ebrio con vino…al día siguiente escucho la alarma, me levanto a bañar y me doy cuenta que casi no tengo resaca (mi hígado es mas evolucionado), pero mi mujer estaba crudísima como decimos acá. Resaca horrible para ella…la levanto a bañar pues teníamos que salir temprano a Verona…
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