Este día tocaba Yosemite!!!! Nos levantamos muy ilusionados y fuimos a recepción a buscar el desayuno, que era cutrillo pero suficiente: Cereales, zumo, café y te, algo de fruta, galletas y poco mas. Nos lo llevamos a la habitación, desayunamos, recogimos todo, llenamos la neverita de hielo y nos pusimos en marcha.
Fuimos a ver el Mono lake... que decepción. No digo que no sea interesante a nivel cientifico por el tema ese de las bacterias y las formaciones calcareas, pero lo que yo vi, fué un lago infestado de gaviotas y como consecuencia, de caca de gaviota. Vaya, que apestaba una cosa mala! Así que estuvimos 10 minutos y nos fuimos directos a Yosemite por el Tioga Pass.
El plan para ver Yosemite era ir con calma y disfrutar de la naturaleza. Decidimos que era mejor ver menos cosas pero verlas bien, que ir corriendo por todas partes y verlo todo casi sin bajar del coche, y así lo hicimos.
La primera parada fué el Ellery lake. Dimos una vuelta por la orilla del rio. Que paz! algunas personas pescando en silencio, dos barquitos de remo en medio del lago, aguas cristalinas... precioso.
Después seguimos el camino hasta Tuolumne Meadows y paseamos un rato por las praderas. Metimos los pies en el río... todo allí te invitaba a relajarte.
Luego fuimos directos al Tenaya lake. Aparcamos y recorrimos el caminito que lleva a la playa. Había poquita gente. Nos quedamos sin habla al ver el lago, que preciosidad! Íbamos con el bañador a punto, así que estiramos las toallas en la arena y estuvimos un rato tomando el sol. Decidimos ir a bañarnos, pero al meter los pies en el agua se nos pasaron las ganas, estaba helada!!!!! Aún así lo intentamos, pero con el agua en los muslos, decidimos retirarnos. Mi pareja se fué a pasear por la orilla del lago y yo me tumbé un rato mas al sol. Se estaba de bien!
Después ya seguimos hasta el Valle y paramos a comer en Sentinel Beach, una zona de picnic cerca del rio donde la gente se bañaba, y que estaba repleta de ardillas. Después de comer fuimos a Swinging bridge. Que bonito, con el puente, el rio... lastima que estaba petado de gente. Seguidamente nos fuimos a ver la Bridalveil fall, y una vez vista, cogimos la carretera hacia Glacier Point. Queriamos ir a ver la pueta de sol, pero como el parque estaba tan lleno pensamos que al igual a esa hora habría demasiada gente, así que fuimos antes.
Por la carretera había un coche parado y entonces paramos y vimos un coyote que parecia algo asustado, así que no lo quisimos avasallar y pasamos de largo. Llegamos arriba y menudas vistas! Desde allí es mas facil hacerse una idea de la immensidad de Yosemite. Estuvimos bastante rato paseando por allí, viendo a las ardillas jugar, observando el valle desde arriba... era todo tan idílico!
Después del encuentro con el coyote seguimos nuestro camino hacia el portal, donde íbamos a dormir esa noche. De camino paramos a comprar provisiones en El portal Market, mala idea: todo carísimo, pero bueno, es lo que hay. Seguimos hasta el hotel, que era el Cedar Lodge. Estaba muy bien, pero era muy caro, nos costó 180$ la noche.
Al día siguiente nos levantamos temprano, desayunamos y volvimos al parque. Fuios directos a hacer el trail del mirror lake. Un agradable paseo por el bosque te lleva hasta el lago. Que bonito! no estaba lleno del todo pero ya era bonito de ver. Estuvimos un rato por ahí, nos descalzamos y andamos un poco por el agua... muy relajante todo!
Volvimos al coche y fuimos a ver las Yosemite Falls. Que bonitas! Las cascadas tienen algo que me hipnotiza. Mientras mi pareja se íba a hacer el loco por las rocas, yo me senté en el enorme tronco de un arbol caido y estuve observando la cascada. Habia demasiada gente para mi gusto, pero aún así era bonito.
Vomo ya era la hora de comer, decidimos ir a alguna zona de picnic saliendo del parque y así lo hicimos. Paramos en El Capitán. la zona de picnic no era demasiado bonita pero estaba aislada y tenias la sensación de que en cualquier momento apareceria un oso. Además estabamos solos y yo aún tenia la ilusión de ver mas animales salvajes. Pero no, ni siquiera había ardillas!
Comimos y luego ya fuimos saliendo del parque para llegar hasta Tulare, donde pasariamos la noche. Al llegar, hicimos el check in, dejamos las maletas y nos fuimos directos a buscar una lavanderia para hacer la colada, la hicimos y luego fuimos directos a un super a comprar provisiones. También pasamos por Pizza Hut a buscar una pizza para cenar. Una Veggie familiar que estaba deliciosa, por cierto. Una vez en el motel resulta que la puerta trasera de nuestra habitación, daba directamente al jardín con piscina, y nos fuimos a dar un chapuzón rapido antes de cenar. Duchita rapida y ya si, cenamos tranquilamente, un rato de tele y a dormir!
El motel era el Motel 99, en Tulare. Nos costó 45$ con piscina y desayuno. Estaba muy limpio, la cama era comoda y la habitación era enorme.