Hoy nos propusimos ir a las playas típicas de los anuncios de Estrella Damm, Macarella y su vecina Macarelleta, para lo cual, tras haber desayunado huevos revueltos zumo , tostadas etc, gracias a haber hecho la compra, a eso de las 10:45 estábamos llegando al parking de Macarella (el de Turqueta siempre lo vimos lleno, parece ser que es pequeño y se llena enseguida) y eso que desde los Apartamentos se tarda 1 hora, hay que llegar casi a Ciudadela y volver para atrás, desventajas de un paraíso natural como también es Menorca (más bien una ventaja, y que siga así)



La playa es espectacular un color del agua del que ya no nos separaríamos en Menorca, turquesa increíble, un paraíso, pero al ser tan pequeña esta hasta la bandera; como Macarella hacia viento hoy también, nos fuimos por el camino de la ladera de la montaña hacia Macarelleta, en 10’ se llega, a una calita más recogida, pero de una belleza espectacular; seguía haciendo viento pero por lo menos hacía calor, por lo que pudimos pasar el día con nuestra nevera portátil y comida, haciendo snorkel y tomando el sol.



También me fui por el Camí de Cavalls que sale de Macarelleta a ver la cala Turqueta (2kms) , por un camino, que como su propio nombre indica, es más propio de equinos que de humanos jejeje pero se va bien, sin problema, en 25 minutos estaba bañándome en Turqueta, que estaba muy saturada ya que llegan los barcos cargados de turistas y les desembarcan por allí para que coman etc antes de volver a irse.


A la vuelta me apetecía correr un poco así que con los escarpines me hice el camino corriendo sin problema, llegando a Macarelleta de nuevo en unos 12’ con una sudada considerable, menos mal de aguas cristalinas y no muy frías

La última parte del día la pasamos en Macarella, y de ahí nos volvimos al apartamento a eso de las 18 horas, en donde, previa ducha y acicalamiento, nos fuimos hasta la cercana Mahón a dar una vuelta; aparcamos en el puerto mismo:

y eso que había bastante ambiente ya que había un velero muy chulo de la marina italiana, el Americo Vespuccio y debían tener algún tipo de recepción a bordo.


De aquí subimos por las escaleras hacia la zona alta, donde vimos que se podía haber aparcado perfectamente, aunque había menos sitios que abajo. Aquí había más ambiente aún, y tomamos algo en una terraza que tenía muy buenas vistas del puerto, junto a la iglesia de Carmen.



De pronto comenzaron a sonar los acordes de Star Wars y resulta que había un concierto de música de La Guerra de las Galaxias en una plaza junto a la Iglesia de Santa Maria, la cuenta para frikis como yo

Tras dar un paseo por puestos y dar una vuelta por la zona nos volvimos al apartamento a eso de las 23 horas.