JUEVES 16 JUNIO 2016: Oporto ✏️ Diarios de Viajes de Portugal

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Hemos vuelto a pasar las de Caín. Resulta que el furgoperfecto que habíamos visto no es para ir con autocaravanas. Nos ha llevado a unas calles que se iban estrechando cada vez más, eso era una ratonera. Al final hemos podido salir a duras penas por una cuesta súper empinada, embaldosada y además mojada por la lluvia que había caído, con lo que las ruedas no agarraban bien y se nos iba cada vez más hacia abajo la autocaravana, con el riesgo de dar a un coche que estaba allí aparcado. ¡¡¡¡ Fatal ¡!!!

Por fin hemos salido y el navegador nos ha llevado a una zona de autocaravanas que había. Está claro que ya no nos vamos a guiar por los furgoperfectos. Está más alejada del centro, pero lo preferimos a tener que jugarnos a nuestra amiga. Hay estacionadas unas 20-25 autocaravanas, al lado del río. Hay parte de tierra y parte de asfalto. Por supuesto, y después de las experiencias de este viaje, hemos optado por la parte de asfalto. No tiene ningún servicio, pero se está de maravilla.

En esta parte del país hay una diferencia en la gasolina de 10 céntimos más barata por litro con respecto a Lisboa.

Nos levantamos por la mañana, hemos dormido como lirones, tantos nervios es lo que tiene, y eso que se ha pegado toda la noche lloviendo. Por el día está lloviendo a ratos y otro rato sale el sol.

Desde el área hasta Oporto hay un paseo muy agradable bordeando el río Duero, con un andador. En unos quince minutos estamos en el puente de Luis I, un modelo de infraestructura ferroviaria. En la parte de abajo pasan los peatones y los coches, y en la parte superior pasa el tren.




Esta zona, la más cercana al Duero, es la población de Gaia, y es donde están las bodegas de vino de Oporto. Se pueden visitar las bodegas en Vilanova de Gaia; por ejemplo las bodegas CALEM, aquí se explica todo el proceso de elaboración por el que pasa uno de las caldos más apreciados del mundo. A pesar de que se pueden considerar prácticamente piezas de museo, todavía se pueden contemplar en el Puerto de Porto las barcas típicas que antiguamente trasportaban el vino en los barriles.



Dedicamos la mañana a visitar la parte monumental del centro-alto de Oporto, se puede acceder a través de un funicular (1,20 € por persona y trayecto) que sale de un costado del puente, o bien subir andando unas cuantas escaleras, que es la opción que hicimos nosotros, ya que íbamos con Yuca y no sabíamos si podríamos ir con ella en el funicular.

Empezamos visitando la Catedral, que destaca por su imponente órgano y su claustro con paredes llenas de magníficos mosaicos blanquiazules, así como el altar mayor, que nos gustó muchísimo. La entrada a la Catedral es gratuita, y para ver el claustro son 3,00 €.



Seguimos con la Estación de principios del siglo IX, construida sobre los restos del antiguo convento de San Benito del Ave María. En su interior se encuentran más de veinte mil azulejos en los que se retratan importantes capítulos de la historia de Portugal.



¡¡ Ojo a las carteras en los alrededores de la Estación ¡! Hay mucha gente intentando pillar a los despistados turistas, y se acercan a ofrecerte marihuana.

En Oporto puedes estar el día entero paseando por sus calles, es una ciudad muy bonita. Lo ideal es empezar por la parte alta e ir bajando por las calles hasta el río. Tiene muchos monumentos y edificios bonitos. En la parte baja se concentra la oferta hostelera de la ciudad.






Además, para visitar tenemos la Librería Lello, posiblemente una de las librerías más antiguas de Europa y con una decoración interior espectacular (en ella se rodaron escenas de Harry Potter). Hay que tener paciencia para entrar, ya que la fila para pagar las entradas puede ser inmensa. También merece la pena ver la Iglesia y Torre dos Clérigos, al lado de la cual pasa el famoso tranvía de Oporto.


Después de dedicar casi todo el día visitando la ciudad, nos quedamos por la tarde descansando en el área de autocaravanas, nos apetece estar un poco de relax después de haber recorrido tantos kilómetros estos días. Además nos encontramos muy a gusto aquí. Mañana seguiremos la ruta.

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