Tras desayunar en el hotel y hacer el check out, nos vamos de nuevo a Hallstatt en ésta soleada mañana, para subir en el funicular:


y disfrutar del Skywalk o Welterbeblick, una de las mejores vistas de los alrededores.

La paz y tranquilidad allí arriba, hasta que llegaron los japoneses de turno, fue para recordar, y las vistas inolvidables.

Que no se note que soy guiri...


Estuvimos un rato disfrutando del lugar y guardando estos momentos en la retina.

Después bajamos de nuevo, dimos otra vuelta





Desde aquí y en unos 40' estábamos devolviendo el coche de Sixt en el aeropuerto, pasando el control de seguridad y cogiendo el avión de vuelta a casa, habiendo disfrutado de esta mini escapaba con la nueva ruta internacional de Volotea desde Asturias

Hasta la próxima...agosto
