Saint-Béat es un municipio francés de la Alta Garona. Tiene 345 habitantes. A pesar de ser pequeño tiene algunas tiendas.
Está atravesado por el río Garona. Se puede aparcar el coche cerca de la iglesia (o por lo menos aquel día se pudo porque era domingo).

En la antigüedad se llamaba "Passus Lupi" (paso del lobo).
Son muy famosas sus canteras de mármol blanco. Corría la leyenda, falsa, que ese mármol se había usado para la columna Trajana. Sí se usó para las columnas del cercano convento de Saint-Bertrand-de-Comminges, así como para la mayoría de las esculturas en la villa romana de Chiragan, en Martres-Tolosane. Sirvió para hacer también algunas decoraciones de Versalles. El mármol está presente en todo el municipio, principalmente en forma de esculturas.
El edificio más importante es el castillo. Construido en el siglo XII por los señores locales, fue ampliado por el rey Enrique IV. Presenta en particular una importante mazmorra, así como una capilla construida a mediados del siglo XIX después de una epidemia de peste. Tiene una alta torre almenada con un reloj y tiene adosada una capilla.

Está en lo alto de una pequeña colina. En teoría se accede por un camino de tierra que asciende hasta la puerta y pasa junto al cementerio (cerrado por desprendimientos). Por el camino vemos pedacitos de mármol. Al llegar arriba tenemos la desagradable sorpresa de encontrarlo cerrado. Sí puede accederse al mirador por una empinada escalera que se encuentra junto a la carretera, pasada la iglesia. Es un paso muy estrecho entre edificios así que puede resultar difícil verlo aunque está indicado.

Se alcanza la muralla del castillo, que tiene una puerta. Aún se debe subir un tramo de escaleras más. Desde allí se domina toda la villa. Encontramos una imagen de la Virgen.

La iglesia que encontramos a pie de la carretera, la iglesia parroquial de la localidad, también es del siglo XII. Está consagrada a St. Béat y a St. Priviat, cuyas reliquias se encuentran en el interior. Tiene pocas decoraciones más allá de una imagen de Cristo rodeado del Tetramorfos en el tímpano de la pequeña puerta de entrada. A los lados de la puerta hay columnas, dos a un lado y dos a otro. En el capitel más occidental podemos ver las escenas de la Anunciación y de la Visitación. Los dos interiores tienen decoración de entrelazo. El capitel más oriental contiene tres leones rampantes, dos de los cuales comparten cabeza.

En la clave de la arquivolta exterior hay esculpido un crismón trinitario de tipo oscense. Esa puerta, por cierto, queda en un lado del edificio.
La puerta de entrada está a un lado ya que lo que debería ser la portada principal queda adosado a otros edificios. Ni siquiera puede contemplarse la espadaña de frente.
