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Colón y Sánchez de Huelva en Porto Santo
• Carabelas como estas podrían haber sido las que partieran a descubrir oficialmente las Américas. La primera esposa de Colón proveniente de la aristocracia portuguesa, facilitó su traslado a Madeira y por ello el Almirante residió por un largo periodo en la vecina isla de Porto Santo. Allí estudió los vientos, mareas y corrientes marinas, estando presente cuando arribó la carabela ATLANTE a esa, con una tripulación moribunda, sobreviviendo sólo el piloto, Alonso Sánchez de Huelva.
• Varios historiadores asumen que la carabela ATLANTE, durante su navegación rumbo a un puerto inglés, fue sorprendida por un gran temporal (¿huracán?) que la arrastró hacia el Mar de los Sargazos. Este mar está al interior de la Corriente del Golfo una especie de río circular-ovalado dentro del Atlántico, de entre 60 y 80 km de ancho y cuyas aguas circunvalan en el sentido de las agujas del reloj. La nave de Sánchez de Huelva habría navegado por la parte meridional (del sur) que va desde las islas de Madeira/Canarias hacia las Antillas, por donde navegó Colón por primera vez. Alonso Sánchez de Huelva habría encontrado el camino de vuelta navegando por la parte más al norte (septentrional) que va desde las Bahamas/Bermudas hacia las islas Azores y Madeira.
• Existe una leyenda al respecto, con varias versiones, siendo la más propicia a Colón la que establece que en su agonía, Alonso Sánchez de Huelva habría narrado a Colón su navegación hacia poniente. Este le habría confidenciado que desembarcaron en una isla que los nativos llamaban QUISQUEI, entregando a Colón las escrituras y relación del viaje con la posición de las islas. La peor versión propugna que Alonso Sánchez fue interrogado y torturado hasta morir, apropiándose Colón de dichos documentos.
• Ante la negativa portuguesa de apoyar su aventura, Colón – conocedor de las cartas de navegación de Sánchez de Huelva - parte a ofrecer sus servicios a otras cortes europeas, obteniendo finalmente el auspicio de los Reyes Católicos para realizar su viaje a las Indias ¿Cuál será la verdad?
Día 5 (JUE 24-Oct): Navegación atlántica
• Hoy es nuestra segunda jornada de 25 hrs de duración. Durante todo el trayecto debemos atrasar gradualmente los relojes para compensar los 6 husos horarios de diferencia entre Barcelona y Miami. De esta manera, día por medio tendremos días de 25 horas, notando menos el jet-lag que si lo hiciéramos de golpe.
• Este día tb amaneció nublado, pero ha ido mejorando y un tibio sol con T cercana a los 25 °C nos permitió pasar unas horas en la cubierta del piso 15.
• En la mañana jugamos el primer Trivia en español (juego de consultas de cultura general), quedando empatados en el primer lugar con otro equipo. Después supimos que en otro equipo había un integrante que iba al trivia previo en inglés y venía con la respuesta a varias de las preguntas. Hay de todo en la viña del Señor…… Nuestro equipo conformado por 3 parejas y un single era bien multifacético, tanto por la experiencia y profesión, como por los países de origen o residencia (Chile, Cuba, EEUU, España, Panamá, Suiza y Venezuela). Lo relevante es que a lo largo del crucero vas descubriendo personas de gran calidad humana con las que compartes durante muchas horas y hasta aflora una incipiente amistad.
• Al mediodía asistí a una charla en inglés sobre consejos de como comprar cruceros. Comentaron que las compañías de cruceros venden la mayor parte de cada crucero a mayoristas, quienes compran habitaciones por cientos y después las revenden. A veces estos intermediarios no lo logran y por eso largan tremendas ofertas de último minuto. Sugieren evitar comprar cabinas garantizadas, pues generalmente suelen ser las peores (son los mayoristas quienes te asignan la cabina, aunque digan que lo hace la compañía de cruceros). Si está todo vendido, entonces te puedes encontrar con desagradables sorpresas en la asignación de tu camarote, como balcón con vista lateral al mar solo si sales al exterior u obstruido por botes salvavidas, cabina en primera fila de proa con mucho movimiento, camarotes muy ruidosos al lado de ascensores o sobre sala espectáculos o bajo piscina, cabinas con vista al mar que en su jerga las denominan “la lavadora” (en piso más bajo y con ojo de buey fijo donde generalmente solo observas las salpicaduras del oleaje). Recomiendan adquirir Vouchers para futuros cruceros NCL por USD250 con USD100 de crédito a bordo (yo los vengo usando desde hace varios años) y comprar ojalá con más de 9 meses de antelación para obtener doble puntuación un su programa de fidelización Latitudes.
• Este ha sido un día de incidentes. Al desayunar unos camareros - creo ucranianos - nos atendieron pésimo, siendo displicentes y con nula actitud de servicio, cosa rara en NCL. Como nunca llegaba nuestro desayuno a pesar de estar el Taste bastante vacío, reclamé a la supervisora y esta nos cambió de camarero, asignándonos uno de los buenos filipinos (Wilfredo Constantino) que nos atendió debidamente. Tengo experiencia internacional en temas de calidad de servicio y en casos como este no me conformo, sino que exijo el servicio apropiado (al estilo gringo). También me preocupo de felicitar personalmente a quien brinda una excelente atención y de comentárselo a algún supervisor si fue extraordinara. Al final, la supervisora nos invitó a cenar al Manhattan, sin hacer la fila de espera que suele oscilar entre 30 y 45 min.
• Al atardecer vimos la excelente peli El Fantasma de la Ópera en la pantalla gigante localizada en H2O (proa). Como era al exterior y estaba fresco, fue necesario ponerse un cortavientos.
• Ahí ocurrió el otro incidente, pues quedé atrapado en uno de los ascensores (jejeje….en casa de herrero….). Después de presionar el botón de piso de destino en cabina, cerró puertas pero no se desplazó. Como el control no obedecía al botón abrir puertas ni a otros pisos de destino, pasado un minuto opté por presionar el botón de alarma. Lo hice varias veces sin resultado alguno pues nadie contestó el intercomunicador. Aunque iba solo no desesperé por ser conocedor del rubro. Esperé varios minutos hasta que el sistema se auto-reseteara y volvió a abrir puertas. Reporté el incidente, solicitando dejaran el ascensor fuera de servicio hasta que un experto lo reparara. Algunas personas enfrentan este tipo de incidentes con variadas reacciones, unos pueden sufrir crisis de ansiedad y otros con claustrofobia se tornan violentos empezando a patear cabina y puerta pues temen quedar sin aire.
• En la noche fuimos al Manhattan, donde servían langosta. Además la supervisora de la mañana (Gabriela de Rumanía) dispuso nos atendieran muy bien, con una mesa en el sector central, cerca de la música en vivo. Además nos obsequió una botella de vino a elección. Seleccioné un buen Merlot de Casa Lapostolle, de los mejores entre los económicos (no podía abusar). Conozco alguno de sus mostos, así como su viña Apalta por haberla visitado un par de oportunidades por reuniones de Salamander Alumni. Esta viña ( es.lapostolle.com/ ...y/history/ ) tiene un objetivo simple pero ambicioso: “Crear vinos de categoría mundial utilizando la experiencia francesa y los magníficos terroirs de Chile”.
• Finalmente escuchamos algo de ABBA en el Bliss, conversando con unas parejas de Barcelona y San Sebastián.
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