Hola,
En las dos ocasiones que me he alojado en Hanói durante mi viaje por Vietnam, he estado en dos hoteles diferentes muy cercanos entre sí y al lago Hoan Kiem.
Hotel Solaria
Al llegar me ofrecieron una bebida y un pastelillo. La habitación que había reservado era una Doble Solarium y se encontraba en la 8ª planta, pese a lo cual no ofrecía ninguna vista panorámica como tal.
Era bastante amplia, con la particularidad de que la ducha era transparente y se veía desde el dormitorio. La presión del agua era bastante buena y salía caliente rápido. Aparte del gel, acondicionador y champú, había gorro de ducha, peine, artículos para el afeitado e higiene dental. El aseo estaba separado del resto del cuarto de baño e incluía la típica manguerita para la higiene del culete
La habitación en sí era igualmente espaciosa y muy bien iluminada, con una cama que me pareció comodísima. Había luces específicas para lectura e incluso el espejo estaba iluminado. Una cosa que me gustó fue que había bastantes conectores para enchufar dispositivos. Además había una mesa escritorio, otra mesa baja, sillón individual y sofá. Además minibar, caja de seguridad, preparación de café y té y cada día ponían 2 botellas de agua gratuitas. Había un armario grande con varias perchas, albornoz y zapatillas.
El hotel tiene un Skybar en la planta 10ª pero la panorámica no era especialmente interesante, máxime con el cielo gris y sin sol de la ciudad.
El restaurante para el desayuno es en la planta 9ª y se sirve desde las 6:30. Hay un pequeño buffet en el que predomina un poco más la comida asiática y una carta de la que se puede elegir una bebida y un plato caliente vietnamita, occidental o vegetariano.
El personal del hotel es amable. El día de mi salida me dieron como obsequio unas bolsas de café.
Hotel The Oriental Jade
Situado a menos de 50 metros del hotel anterior en una calle diferente. De categoría superior al otro, de 5*, aunque al entrar en el vestíbulo éste me dio la sensación de algo caótico y poco arreglado. Registro de entrada un poco lento. También me ofrecieron una bebida de bienvenida.
La habitación era una Sapphire con vistas a la ciudad, en la tercera planta. Al entrar pude comprobar que más que vista a la ciudad, era una vista a un tejado y un patio de otro edificio.
Al menos la habitación era grande, con suelo de moqueta, que no es algo que me haga mucha gracia. Por lo menos, la cama aparte de ser grande era muy cómoda. Como mobiliario había además una mesa con silla, banqueta para poner la maleta, aire acondicionado, TV de pantalla planta, minibar, caja fuerte, armario con varias perchas, zapatillas y albornoz, caja con pañuelos de papel, café y té. También varios conectores para enchufar dispositivos y dejaban dos botellas de agua gratuita y un plato de fruta de bienvenida.
El cuarto de baño era espacioso y la ducha tenía buena presión de agua. Había como artículos pastilla de jabón, gel, champú y acondicionador, secador de pelo, bastoncillos para oídos, gorro de ducha, artículos de afeitado y cepillo de dientes, peine y espejo de cara.
En la planta 11 del hotel había un gimnasio, que por lo que cotilleé tenía unos cuantos aparatos y parecía moderno. En la planta 12 había una piscina panorámica y un sky bar. En este hotel sí que me parecieron mucho mejor las panorámicas.
El desayuno buffet, que lo llevaba incluido (200000 VND) me pareció bastante bueno y variado, con diferentes tipos de frutas (sandía, maracuyá, pitahaya, etc...), zumos naturales, sección de fideos y huevos, ensaladas, algunos tipos de dulces, sushis, dim sum, etc...
Personal amable también. También me regalaron bolsas de café.
Ambos hoteles son recomendables.
Saludos.