nosotras hicimos un tour a Italia en el 2008 en septiembre/octubre que fue fantástico, el guía fantástico también se llamaba Javier no se si ahora seguirá estando porque la verdad que estuvo genial , la única pega que pongo del viaje fue la comida en el hotel de Roma que la verdad que las habitaciones eran bastante buenas pero la comida dejaba mucho que desear muy poca y de mala calidad y el hotel de Florencia que estaba viejecillo pero en ese comimos bien, de lo demás estuvo genial vamos que yo volvería a ir con ellos mil veces
Este año hemos ido con Travelplan a Viena, Praga y Budapest y tela marinera hemos echado de menos a Travelider un montón, vaya viaje más malo la guía un cardo que no se la podía hablar, el hotel de Budapest lo peor que he visto en mi vida el Tulip inn madre mía y la comida pésima no había casi recorridos panorámicos al contrario que en Travelider y luego nos teníamos que buscar la vida para volver a los hoteles un viaje pésimo y desde luego ese touroperador es peor que Travelider pero mucho peor
El pasado 8 de agosto hicimos un viaje con Travelider a Austria y Baviera. Lo contraté unos días antes a traves de una agencia. Para empezar, el precio publicitado era de 899 con Todo Muy Incluído (???), pero finalmente nos salió a unos 1300 cada uno de los dos adultos y casi 1200 la niña. El vuelo de ida nos lo hicieron con escala en Munich, y al llegar a Viena nuestra maleta se había perdido. El guía transfer (uruguayo) apareció por la cinta casi 45 minutos despues de nuestra llegada y tras esperar unos minutos más nos aconsejó y ayudó a formular una reclamación. Resultó que tenía a un grupo esperándonos para completar el autocar de traslado a Viena. Algunos llevaban más de dos horas esperando nuestra llegada, espera que se vió agravada por el retraso provocado con la pérdida de nuestra maleta. Finalmente nos fue entregada esa misma noche en el hotel de Viena. Al llegar al hotel, que no era el Hilton como se decía en la publicidad sino el Arcotel Kaiserwasser, en recepción se hizo saber al guía que no tenían reserva para todo el grupo. Tras varios minutos tensos el guía consiguió de la jefa de recepción que se diera alojamiento a la mayor parte. Sólo algunos fueron alojados en el Hilton (a los que inicialmente se les dijo que fueran por su cuenta). Para no extenderme demasiado, porque hay tema para escribir un buen libro, sólo diré que la guía asignada no apareció hasta el día siguiente, que la cena en ese hotel era distinta para los clientes de Travelider que para el resto (servilletas de papel, menú distinto, trato de segunda y despectivo...), que al día siguiente nos cambiaron el autocar (del que Travelider presumía en su publicidad de que eran mejores que los de otros mayoristas por comodidad, amplitud de plazas, etc.) por un autocar checo bastante maltrecho(asientos sueltos, sistema de calefacción defectuoso que provocaba un calor asfisiante en las plazas traseras, goteo de agua en algunas salidas de aire...). La excusa que se nos dió fue que "alguien" le robó el autocar al chófer mientras dormía. El guía de Viena (un tal Pablo) estupendo, el mejor. Las excursiones opcionales no fueron las que se recogía en el catálogo de Travelider (algunas sí otras ni siquiera fueron ofrecidas), los horarios del programa eran cambiados constantemente (por poner un sólo ejemplo, el día que los del todo muy incluído teníamos que comer en la torre de la isla del Danubio, ni siquiera fuimos a visitar dicha isla y nos llevaron al restaurante Rosenberger con un ticket amarillo con el que sólo nos daban o salchicha o pollo, asi comimos dos días seguidos). El viaje en ese autocar os lo podéis imaginar...difícil, y complicado además por la persistencia de algunos compañeros de viaje en sentarse en las primeras filas reiteradamente, pese a las \"normas\" marcadas por la guía. En Salzburgo tuvimos un guía, Pedro, correcto. Aunque no supo darme información para realizar una excursión opcional no incluída en el programa de Travelider. El hotel en Salzburgo también correcto (Mercury), el alojamiento se nos hizo en dos habitaciones con el inconveniente de tener que repartir parte del equipaje, pero nos pareció una solución correcta dado el tamaño de las habitaciones. El hotel de Viena nos facilitó una habitación Executive que fue genial. Sin embargo en Innsbruck nos alojaron en una doble con supletorio, aunque la habitación era muy amplia, y en Munich hicieron lo mismo pero en una birria de habitación en el hotel Tulip Inn (en las afueras de la ciudad... Leer más ...
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