Nuestro primer amanecer en la Digue va acompañado del canto de los pájaros, que aquí no es un simple pío pío, hay una variedad de trinos que nos hizo hasta jugar a diferenciarlos, así encontramos el pájaro "wassap" (en serio), el pájaro besitos, el pájaro metro (pitido de cerrarse las puertas) y un sinfín de tonterías que sólo se pueden hacer en vacaciones.
Vamos a conocer la más famosa de las playas de la isla, Anse Source d' Argent, que está dentro de una gran finca privada.
La entrada son 100 rupias (6,00€) y es válida para todo el día, aunque nosotros no pagamos nunca, gracias a la generosidad de los vecinos de bungalow.
El parque es enorme, con caminos de tierra que transcurren entre cocoteros y una gran plantación de vainilla que huele maravillosamente.
Al llegar a un riachuelo junto a una taberna tendréis que dejar las bicis y continuar andando.
Por supuesto nadie os va a robar, nada, aún así hay gente que las ataba con candados.
Primera playa Anse la Union
Es una playa muy muy baja a la que, como algún forero comentó, se puede acceder haciendo "trampa" desde el helipuerto caminando por el agua.
Pagar las tasas del parque (6,00€ por persona al día) ya va a criterio de cada uno.
Yo tuve suerte con el regalo de los vecinos, pero seguramente de haber querido volver dos o más veces hubiera hecho la trampa en cuestión.
Desde aquí penéis el camino que os llevará a Anse Source d'Argent
Source d'Argent significa fuente de plata.
Estas rocas graniticas tienen un tono plateado bajo la incidencia del sol que las hace brillar cual mineral de plata, especialmente bajo los rayos oblicuos de la puesta de sol.
Es impresionante, pero no quiero que vengáis con la idea preconcebida, esto solo lo podréis valorar con vuestros propios ojos.
Podéis pasear y buscar la cala que más os guste, algunas son grandes y arenosas y otras pequeñitas, casi secretas.
Nosotros nos quedamos ese día justo detrás de este techado de palmas
Aunque la marea estaba alta se podía caminar hasta el arrecife, con el agua como máximo cubriendo hasta la cintura (Imprescindibles escarpines de goma, no se puede llegar nadando y todo es arrecife)
...peces de colores a un metro de la orilla, brutal...
Perdonad la calidad de las fotos acuáticas, es nuestra primera cámara submarina y no le tenemos pillado aún el truquillo y muchas veces se entelaba.
Aquí encontré al amigo que nos acompañaría el resto de días en La Digue.
Para agradecerme un trozo de embutido que le dí, este simpático perrillo estuvo vigilando mi mochila todo el día.
Cuando nos fuimos nos acompañó a la carrera hasta el alojamiento, unos 2 Km, y se quedó en la entrada, mirándonos (su instinto le avisó que no podía entrar en el terreno privado).
Fue inevitable que le llevara algo más de comer, cuando el personal de recepción se hubo marchado a su casa.