Maun es la capital del Delta del Okavango, un amplio sistema lacustre formado por las aguas del río de mismo nombre. Es un lugar perfecto para poder explorar este delta interior y hay variedad de formas de hacerlo.
Nuestra idea era contratar una excursión en Mokoro y pasar una noche durmiendo en alguna de las múltiples islas que se forman en el delta. Después de ver los precios que nuestro camping ofrecía decidimos coger la excursión de 3 días/2 noches, ya que teníamos tiempo y porque en proporción salía más económica que la de dos días. Después de hacerla nos pareció un ROBO. 1200 pulas/persona para hacer prácticamente nada, allá va nuestra experiencia.
Mokoro:
Pequeñas canoas típicas del Delta del Okavango. Los "remeros" se ayudan de un largo palo para ir moviendo la canoa, la empujan tocando el fondo de los canales e impulsándose ya que son aguas poco profundas.
¿Qué llevar a la excursión en Mokoro durmiendo en el delta?
Para este tipo de excursiones tienes que llevarte tu propia comida, así que cogimos unas cuantas sopas de sobre, pasta, arroz, galletas, agua y poco más. También nuestros sacos de dormir, algo de ropa, crema solar y repelente de mosquitos.
Después de rellenar un formulario y firmarlo, básicamente diciendo que ibas a pasar unos días en una zona con wildlife bajo tu responsabilidad.... ¡ Nos fuimos entusiasmados a nuestra excursión! Una lancha con motor nos llevó desde nuestro camping a la zona donde los remeros y mokoros nos estaban esperando.
Preparados para explorar el Delta del Okavango
Nos presentaron a nuestro remero, que se hacía llamar Trompo y empezó nuestra corta, pero que muy corta travesía en Mokoro. Porque en algo menos de una hora llegamos a una isleta del delta y ahí que hicimos campamento base. Pusimos la tienda de campaña (nos la dejaron los del camping, ya que la nuestra iba fija al techo del Toyota).
¿Y ahora qué hacemos Trompo? ¿cuál es el plan? a lo que nos contestó, descansar.
Después del "descanso", Trompo nos dijo que había llegado la hora de ir de paseo, nos llevó en la canoa a una isla cercana y nos fuimos a pasear con él. ¿No habrá leones? ¿otros depredadores? Porque íbamos los tres solos, como el que pasea por su barrio. Y él contestaba que sí había, pero que lejos, que ahí no había problema.
Y mi cabeza: Venga, paseo, relájate y no pienses en ser la merienda de nadie. Y de repente, un ruído de elefante y Trompo que da un salto como si llevara muelles en los pies (¿cómo hizo eso?
Nos fuimos a dar una vuelta por la isla, algo más de una hora, vimos cebras, pumbas y poco más. El problema llegó a la vuelta, el querido elefante estaba prácticamente en medio del camino que teníamos que seguir para llegar al mokoro, todo el resto era agua con hierbas altas. ¿Qué hacemos? ¿por dónde vamos? Y Trompo, pues por delante de él, sin hacer ruido, los elefantes ven mal. ¡Y va el tío se quita su camiseta verde y se queda a pecho descubierto! Y a mi me hace ponerme una sudadera negra que llevaba atada.
¿Esto tiene que ser broma? Yo por ahí no voy a pasar. Delante de ese enorme bicho y después de su información.... Pues ahí que nos quedamos más de media hora detrás de un arbusto, el sol cayendo, el animal que no se movía y yo a punto de llorar, porque por nada del mundo iba a pasar por delante.
Al final, viendo mi cabezonería (a día de hoy habría hecho los mismo) y nerviosismo, Álvaro y él accedieron a pasara por detrás. Y allí que nos metimos, con el agua pasada la rodilla, entre los juncos y las hierbas y lo que hubiera, hasta que pudimos llegar al Mokoro. Ufff....En este caso dejé un año de vida con el elefante.
Ya de vuelta en nuestro campamento, Trompo hizo un fuego y cocinamos sopa. También aprovechamos para intentar secar las botas de monte que estaban inundadas y la ropa.
Consejo:
Si os da miedo salir de la tienda por la noche, bajo ningún concepto cenéis sopa, o si lo hacéis que sea poca. Tomé bastante....Y por la noche tuve que salir dos veces de la tienda a vaciar la vejiga.... No voy a mentir, había estado escuchando toda la noche a los hipopótamos y a otros animales varios y estaba un poco cagadita de miedo.
Al día siguiente, en el desayuno, Trompo nos contó que habían pasado varios elefantes por nuestro campamento (campamento=su tienda y la nuestra, nadie más) mientras dormíamos. Y nos cambió la tienda de sitio, justo debajo de la rama de un árbol. ¿En serio? ¿Esto no se le podía haber ocurrido antes? Y también se fue con el Mokoro a coger un montón de leña para tener un fuego que durara toda la noche, según él así no se acercarían los elefantes por la noche. ¿Esto también se le tiene que ocurrir el segundo día? No es por ser ni criticones, ni urbanitas, pero la falta de "organización" nos pareció terrible...
Nuestra tienda, bajo "la protección del árbol"
Segundo día de excursión, nuestras actividades consistieron en:
1º. Paseo matutino en una isla cercana. Vimos muchos ñus, cebras y jirafas, no vamos a quejarnos
2º. 5 horas o más de "descanso". Amenizadas por dos elefantes que pasaron por nuestro campamento y el pobre Trompo todo agobiado diciendo que nos escondiéramos detrás de un árbol.
3º. Paseo durante el atardecer, casi no vimos animales.
4º. Cenar y a dormir.
Último día, desayunamos y como siempre Trompo tan acertado con los comentarios preguntándonos si por la noche no habíamos escuchado un rugido de león. ¿Eh? No, estás bromeando, no ¿no? Nos dijo que era verdad, pero que estaba lejos.....
Al poco rato, Trompo empezó a mostrarnos huellas en un caminito de arena y vi una que no me hizo mucha gracia. Le pregunté a Trompo a ver de qué podía ser y ¿ que contestó?: It´s a lion, but far, very far (su inglés era bastante limitado pero se hacía entender bien). Y ahí ya.....me dio un FLUSH! Y le dije It´s enough!
Entre el elefante del primer día, la poca seguridad o mejor dicho nula que nos daba este hombre, las horas tiradas sin hacer nada...Ya no aguanté más...Y nos volvimos al mokoro a esperar la hora para acabar nuestra desastrosa excursión.
¿Excursión de varios días en mokoro por el Delta del Okavango o excursión de un día?
Si tenéis tiempo de sobra en vuestro itinerario, recomendaría la excursión de dos días, durmiendo una noche en el Delta. Son unos paisajes increíbles y los sonidos de la noches (de los animales) son toda una experiencia. Eso sí, intentaría ir en un grupo más grande que en el que fuimos nosotros (los dos solos con Trompo).
Y si no tenéis tiempo, sin duda, la excursión de día para vivir la experiencia.
No recomendamos la excursión de 3 días /2 noches. Pero como siempre, eso va en los gustos y experiencias de cada uno
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