Tras mucho esperar por fin llegó la fecha de la partida. Esa semana toca dejar atados los temas laborales, la documentación preparada, la lista de la maleta completa y hacer un repaso de varios frentes que puedan haber variado desde que se reservaron o se estudiaron. A principios de la semana en cuestión volví a mirar la página web de los transportes ferroviarios ingleses por si habían colocado una jornada de reparación o huelga en las fechas del viaje y me encontré con que el día sábado cuando tocaba ir del aeropuerto a Southampton habían puesto una jornada de paros por reclamación de horas extraordinarias pero que afectaba a los primeros y últimos trenes de la jornada. Ante ello, y como nuestro tren era a media tarde, entendí que no nos afectaba y ya está. Además, al reservar los billetes te permitía poner una alerta por si había una incidencia en el viaje contratado de manera que te avisaban si ello sucedía y como esa alerta no había llegado….
A lo largo de la semana, no obstante, me saltó el “sentido arácnido” y el desasosiego hizo que volviera a mirar el asunto encontrándome con que en unos sitios sí aparecía el viaje operativo pero en otros ya ese viaje no figuraba. Para salir de dudas escribí un correo a atención al cliente de la compañía Southern, que operaba el trayecto, pero la respuesta que obtuve es que se contestaba en una semana, con lo cual no servía (de hecho, contestaron la semana siguiente ya durante del crucero indicando que entendían que ya no me podían ayudar porque la consulta era sobre un día ya pasado. Sin comentarios...). Así, las únicas formas de contactar con ellos era a través de un número telefónico o a través de Twitter. Por teléfono me fue imposible porque saltaba una locución y no cogían el teléfono (saturación de llamadas, supongo) por lo que tuve que tirar de Twitter.
Yo no tengo Twitter en el teléfono ni intención alguna de tenerlo por lo que le pedí a uno de mis compañeros de trabajo que me dejara el suyo para poder contactar y que me informaran. En el hilo abierto o como se llame me informaron de que, desgraciadamente, nuestro tren estaba afectado por el paro y que no iba a prestar servicio (anda que avisan….
Así, teníamos dos opciones:
. Ir a atención al cliente en la estación de trenes de Gatwick y pagar el exceso para poder utilizar la nueva ruta de cara a llegar a Southampton.
. Anular la reserva y comprar un nuevo billete con la nueva ruta (esto tenía truco porque el nuevo billete salía muchísimo más caro que la suma del actual más el exceso).
Por tanto, optamos por gestionar el tema en la estación y abonar la diferencia, cogiendo la nueva ruta. Empezamos bien….
En perspectiva, menos mal que me dio por mirar porque, si no, nos plantamos en la estación de Gatwick esperando un tren inexistente y a saber qué habría pasado y cuándo habríamos llegado a Southampton en las condiciones que había ese día.
Pero el "sarao" ferroviario iba a continuar y eso será contado en la próxima etapa.
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