Viaje fin de carrera Riviera Maya - Palladium Kantenah - ✏️ Blogs of Mexico

Todo comienza hace un año cuando mis compañeros y yo buscábamos un lugar para irnos de viaje de fin de curso. Tras muchas horas de discusiones y búsquedas nos decidimos por Riviera Maya; la simple razón por la cual ganó es que podíamos tener fiesta y playa, a la par que cultura, el poder visitar Chichen Itza o los famosos cenotes nos decantó por RM antes que Punta Cana.

Una vez decidido el destino nos tocaba elegir agencia, esto si fue un auténtico calvario… Nos recorrimos media Salamanca en busca de agencias y ofertas, lo cual nos abrió un abanico de precios lejos de lo que nos podíamos permitir (la primera oferta superaba los 2000€, pensé que si estaba loco el hombre…), pero en una de nuestras visitas a Halcón Viajes conocimos a Tino, un agente como los que no quedan, preocupándose día tras día por nuestro viaje y conseguirnos el mejor precio posible.

Después de un mes de “intensas negociaciones” conseguimos tener un precio fijo para nuestro viaje de fin de carrera: 1200€ excursiones con Xcape incluidas (varias de ellas nocturnas que ya contaré más adelante), transporte hasta Madrid desde Salamanca y vuelta desde el aeropuerto así como las tasas del aeropuerto. Y lo más importante, el hotel que había querido desde que elegimos RM como destino, el Palladium Kantenah; de hecho rechace expresamente el upgrade al Rivera, ya que Tino, nuestro agente, nos comunicó que desde el hotel habían mandado un mail diciendo que iríamos al Rivera, lo cual dije que no, que yo quería Kantenah. El hotel cumplió nuestra petición y a nuestra llegada no hubo problema en cuanto al tema de habitaciones.


Vamos, que para ser 13 personas como éramos nos salió un pelín caro, tal y como luego vi por el foro en algunas ofertas; pero en esas fechas (9-16 febrero), los precios en otras agencias eran disparatados.

En definitiva, ya teníamos el viaje planeado, con excursiones de Xcape como deseábamos y el vuelo con Air Europa, pero SORPRESA! Volábamos con Orbest, ya que entre las dos aerolíneas se turnaban Cancún y Punta Cana, pues bien, nos tocó justo cuando su desaparición , fue todo bastante cómico en la vuelta, aunque ya contaré más adelante.

Por cierto, me gustaría apuntar varias cosillas en cuanto al viaje en grupos. Nosotros éramos un grupo pequeñísimo, 13 personas, lo cual no da para acogerse a grandes descuentos, pero si sois un grupo de unas 50/80 personas los descuentos son muy jugosos… también tenéis el hándicap de que algunos hoteles no acepten tanta gente, y por lo que tengo entendido, Palladium era uno de ellos… aun así os recomiendo el hotel.

Como recomendaciones previas al viaje decir que no olvidéis protección solar del 50! El sol pega que da gusto, y yo que soy de piel muy blanca parecía un cangrejo el segundo dia… además de un Relec para los mosquitos y un poco de Ibuprofeno por si aparece la resaca no hay que preocuparse de nada más.

De ropa sobretodo cosas fresquitas, nada de abrigo por si acaso… hace calor, peor que en agosto en Benidorm! La humedad es tremenda y dan ganas de ir todo el día en bañador.
A lo largo del diario iré contando más cosillas que podrán seros de utilidad.

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Después de días de auténticos nervios, noches de borracheras como calentamiento previo a lo que nos espera allí y maletas que no cierran unas horas antes de salir, por fin llego el día 9.

Teníamos que coger un bus hasta Madrid barajas, lo cual fue una suerte para nosotros que AvanzaBus tenga servicio directo y no muy caro, algo así como 22€ por trayecto, lo cual ya teníamos incluido dentro del precio.

Lo primero que hicimos ese día nadas más despertar fue ir a la farmacia a pesar la maleta, aunque en verdad os digo que a la hora de facturar no mirar el peso, por lo tanto chicas, no os preocupéis por meter un par de zapatos más .

Salíamos sobre las 8.30 de Salamanca y hasta llegar al aeropuerto T1 que era nuestra terminal tardaríamos cerca de las 2horas, por lo tanto sobre las 11 estábamos allí, el autobús nos dejó en el parking de la T1, por lo tanto solo fue cruzar la vía que hay para los taxis y entrar a la terminal.

Lo primero fue ir a buscar al stand de Orbest para facturar las maletas. Decir que estaba llenísimo de estudiantes como nosotros, los cuales fuimos conociendo a la largo del viaje. Después de media hora de hacer cola entregamos las maletas junto al pasaporte, que es lo que nos pidió la señorita. Íbamos entregándolos de 3 en 3 para que nos asignara asientos, ya que el avión iba lleno hasta arriba.



Después de una espera que se hizo infinita nos llamaron para embarcar y voila! Ya estábamos en el aire, el avión me pareció bastante confortable y nada ruidoso, no sé si sería porque era muy nuevo, pero me lleve una grata impresión, de hecho, había dos compañeras que nunca había volado y decían que ojala todos los viajes fueran así.


Nos dieron un par de comidas, no me acuerdo muy bien que eran, pero sé que la primera era lasaña y la segunda algo parecido. También te ofrecían zumos y agua durante todo el vuelo y una almohada y manta por si querías dormir.

Yo fui un valiente y me bebí unas cervezas en las comidas ya que eran gratis, la gente se asustaba por beber en el avión, pero en verdad he de decir que no note nada, es decir no me puse borracho por dos cervezas.


Yo tenía ventanilla y la verdad que fue una gozada, en la foto que adjunto se ve cómo llegamos al límite de la Península Ibérica y nos disponemos a pasar el Océano Atlántico, algo precioso la verdad.

El resto del vuelo aparte de ver agua poco más se podía hacer… hablar, conocer gente de otros grupos, ver películas o leer, ya que dormir era imposible con más de 100 estudiantes dando voces.

Otra imagen que adjunto es cuando sobrevolamos Miami de noche, otra autentica pasada aunque solo se vieran luces.

Y por fin, después de 12horas de vuelo aterrizamos en Cancún. No sin antes rellenar unos papeles de inmigración que son obligatorios y te piden al bajar del avión.
Después de entregar los papeles y pasar el control de pasaportes fuimos a por las maletas, cruzando los dedos para que aparezca! La mía por suerte salió nada más llegar yo a la cinta, pero a algunas compañeras les tardo como una media hora en salir.

Pasamos el semáforo, todos menos una chica a la que la abrieron la maleta, total 2 minutos como mucho! Pensé que iba a ser peor…

Y salimos a buscar a nuestro operador TravelPlan para que nos lleven al hotel. Ahí ya se notaba el calor… madre mía, tenía la camiseta como si me hubieran tirado un cubo de agua, y eso que no soy de sudar mucho

Después de un pequeño problema con los transfer al hotel, por lo cual me toco discutir con el chico de travelplan “decía que no éramos nosotros”, nos montamos en el bus.

Una hora y media como poco hasta llegar al hotel, lo cual después de estar 12 volando pues como que no sienta muy bien, pero bueno… además poca cosa se podía ver ya que era de noche, tan solo los controles policiales que parecen de película, policías con metralletas y gafas de sol al más puro estilo gánster!

Durante el trayecto el encargado de TravelPlan en Palladium nos habló sobre cosas que hacer allí y que no hacer, lo típico vamos, y diciendo lo importante que era que fuéramos a la reunión del día siguiente que menuda mentira… os contare por qué.

Durante el viaje me levante a preguntarle en privado que nosotros ya teníamos a Xcape como nuestra agencia de excursiones, y que sabíamos a qué hora venían a buscarnos el día 16 para salir al aeropuerto, por lo que el hombre me contesto: vale amigo, no hace falta que vengan ya que esto es solo para vender nuestras excursiones!

Me fui riendo de cómo engañan a la gente… pero vamos, que en ese autobús éramos todos jóvenes y nadie pico en el anzuelo de ir a que nos cuenten nada.

Después de parar en varios hoteles llegamos a Palladium! Había leído muchísima información del hotel y estaba ansioso por hacer de todo!

En la siguiente etapa cuento como fue la llegada y las primeras impresiones en el hotel.

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Como ya habéis podido apreciar, este no es un diario común, estoy queriendo contar la experiencia de Riviera Maya desde otra perspectiva diferente a la que tienen los demás diarios, sin desmerecerlos por supuesto! Pero no he encontrado un diario escrito sobre un viaje de fin de carrera, y la verdad que si hubiera encontrado uno me hubiera venido genial para mi viaje

Retomando la etapa anterior… llegamos al hotel ya de noche, con restaurantes cerrados, tiendas y sin apenas gente en el lobby.

Lo primero fue llegar y hacer el check-in en las habitaciones, nosotros teníamos el Kantenah, 4 triples, aunque triples triples no eran… es decir, tenían dos camas en las cuales dormías las pocas horas que teníamos de descanso. Decir que las camas dan de sobra, de hecho nunca nos importó compartir la cama ya que ni siquiera te debas cuenta de que tenías alguien al lado.
Nos recibieron con un zumo refrescante y unas toallas, un buen detalle. Nos recogieron las maletas y nos asignaron villas a todos. La mía era la 41, tercera planta.


Nos acercó un trabajador de allí con un carricoche estilo a los de golf y nos dejó a la misma puerta, se tardaba 1 minuto andando, pero como no sabíamos llegar exactamente mejor que nos acercara.

Nada más entrar vi que nos tocó una de las habitaciones remodeladas, era muy bonita, decorada con cosas muy chulas y una televisión de plasma que parecía a estrenar.

Un apunte sobre la habitación; tenía de todo, secador, plancha, minibar (lo reponen dia tras dia), televisión... pero los enchufes son otra historia, ya que las cosas cargan mucho mas lentas que en España. Nosotros dejabamos cargando toda la noche los moviles y por la mañana solian llegar al 80/90% pero nunca del todo

Deshicimos el equipaje y lo primero fue ponerse el bañador para ir a la piscina de adultos, no sin antes pasar por el bar del lobby y pedirnos los primeros cubatas, donde tras 15 minutos de espera aparecieron los chicos de Xcape, con el itinerario de excursiones y las pulseras que debíamos llevar para estar identificados fuera de hotel.

La mayor sorpresa fue ver que nos tocaba al día siguiente la excursión del barco en Cancún, la mejor de todas…. Y nos encontrábamos tan cansados que nos daba miedo no estar al 100% para la ocasión, pero como podréis ver más adelante no fue así

Me gustaría señalar, para quien le interese, que allí no tienen las mismas marcas que en España en cuanto a algunas bebidas… Whisky´s si tienen los comunes como J&B y Jack Danield´s, pero para los aficionados al Ron como yo decir que ponen Bacardi añejo, de sabor muy rico, y para mí al nivel de Brugal o Barcelo. En el Kantenah estaban los dos bares Premium que servían copas de marcas caras igual de gratis que en el resto aquí probé un ron de Guatemala que estaba exquisito! Hacer caso al camarero que os aconsejara muy bien.

Una vez que ya teníamos el itinerario de excursiones, pulseras, pelotazos y toallas nos dirigimos a la búsqueda de la piscina de adultos; decir que media hora fue poco para dar con ella! Llegamos hasta la playa, piscina principal, restaurantes… pero no dábamos con la de adultos… al fin, una de las chicas que venía con nosotros la encontró y a voces en la oscuridad llegamos todos. Que tranquilidad y que rica estaba el agua! Por fin descansábamos desde nuestra salida de Salamanca hacía ya muchas horas.

Estuvimos allí una hora más o menos, probando todos los cocteles que pudimos que son varios y muy buenos! Y como ya se hacía muy tarde decidimos ir a cenar… que como no quedaba otra opción sería en el 24 horas de la playa.

Con este tuvimos más suerte para encontrarle, ya que en nuestra búsqueda de la piscina para adultos dimos con el! Ducha en la habitación y en media hora todos en el lobby del hotel.
Pues bien, el despliegue de fritanga fue importante, tanto ese día como otros que volvíamos de fiesta a nuestro querido 24horas; hamburguesas, patatas, alitas de pollo, sándwich… comida que cuando tienes hambre sienta genial.

Después de una buena cena y unas cervezas bien frías nos fuimos a la habitación a dormir; en unas horas tendríamos un largo día por delante.

El famosos jet lag apareció en nosotros, ya que solo pudimos dormir 4 horas; pero he de decir que allí se descansaba muchísimo, es decir, que con pocas horas de sueño rentaba para pasar todo el día.

Por fin pudimos ver el lobby de dia y apreciar sus detalles y figuras, las cuales son realmente bonitas.


Pues bien, ese día desayunamos en uno de los buffet restaurantes; espectaculares, tenían de todo, desde los típicos desayunos Yankees hasta tortitas y creps, pasando por zumos naturales, donuts, bollería… es decir, que había de todo y para todos.


Nos vino a recoger la furgoneta de Xcape en nuestro lobby para poner rumbo a Cancún, donde cogeríamos el barco que nos llevaría hasta Isla Mujeres.

Señalar que en el Riviera había un grupo de estudiantes Catalanes, los cuales también tenían Xcape como agente de excursiones, por lo tanto coincidíamos con ellos en varias travesías, compartiendo furgoneta o autobús.

Hasta Cancún desde nuestro hotel tardamos algo más de una hora, pero se hizo muy ameno ya que durante el viaje ponen música, videos y además te cuentan anécdotas los chicos de España que están con Xcape. Decir que dejan meter bebida en la furgoneta, porque yo me lleve así como un litro de ron-naranja y el conductor no me dijo nada, es más, me dijo que si le daba un trago!

Llegamos al puerto de Cancún, y ante nosotros aparece un inmenso barco decorado de naranja “color Xcape”, con música a todo trapo y lleno de estudiantes; calculo así a ojo que seriamos cerca de 100 personas entre 22-25 años.


Decir que el viaje consistía en ir a Isla Mujeres, visitarlo por nuestra cuenta y volver a Cancún. A la ida del viaje pudimos hacer Snorkel, aunque más que Snorkel aquello era supervivencia.

Recomendaría a la gente que ni se molestara en hacerlo, ya que el guía va tan rápido que es imposible ver nada bien sin ahogarse en el intento, y eso que yo sé nadar más o menos y me costó mi trabajo llegar al barco sano y salvo… había gente que tenían que ir a buscarla porque no tenían fuerzas! Menos mal que dejaban chalecos salvavidas que sino alguno no lo cuenta.


Después del snorkel abren el tobogán y el trampolín y hacen competiciones! Había de todo… yo ni lo intente porque el golpe podía ser pardo si se caía mal, pero muchos amigos si lo hicieron y no se les dio nada mal jajaja

Llegamos a isla mujeres y con el tiempo justo fuimos a comer, no sin antes ver un desfile que había ese día con bailes típicos y disfraces del lugar.


Rápidamente volvimos al barco y comenzó lo bueno… barra libre hasta Cancún a velocidad lentísima! Menuda fiesta, de lo mejorcito que se puede experimentar siendo universitario. Todo gente joven con ganas de pasarlo bien, bebiendo hasta saciarse lo malo eran los vaivenes del barco, que algunas veces terminaban con gente en el suelo, pero no pasaba nada, nos reíamos todos un montón.




Conocimos a mucha gente, muchas chicas sobretodo … con un buen ambiente que no se ve en otros lugares. Terminamos la fiesta y nos despedimos hasta próximos días que haríamos más travesías con ellos. Volvimos en nuestra furgoneta hasta el Palladium y otra vez a nuestro querido 24 horas.

En la siguiente etapa contaré todo el apartado turístico cultural que tuvimos, así como la noche en la discoteca Coco-Bongo que fue de lo mejorcito del viaje.

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