8 días en Dinamarca, con niños ✏️ Blogs de Dinamarca

Nuestra idea del viaje a Dinamarca realmente surgió del deseo de nuestro hijo de visitar Legoland, porque es muy fan de Lego y organicé el viaje para que el día de la visita a Legoland coincidiera con su octavo cumpleaños. Estaba muy emocionado y se lo pasó fenomenal.

Nos sorprendió que a pesar de ser un martes de finales de agosto (día 26) hubiese tanta gente a la entrada, sobre todo alemanes, pero la verdad es que luego tampoco tuvimos muchas colas y está muy optimizado para que las colas vayan rápido. En algunas atracciones hay dos trenes que van haciendo el mismo recorrido y hay zonas con legos para los niños jueguen mientras se espera en la cola.

Hay muchas atracciones aptas para niños pequeños, para medianos (nuestra hija no llegaba a 1,20 m y no pudo entrar en alguna) y un par de montañas rusas gigantes para los más atrevidos. Hay una zona llamada Miniland con la reconstrucción en Lego de varias ciudades, también una zona con escenas de Star Wars y muchas atracciones están decoradas con figuras de Lego.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

En las fotos no se aprecia bien, pero todo el cangrejo y el indio están hechos con piezas de Lego. También hay una Polar Zone con pingüinos y la zona de Atlantis es un acuario en el que conviven los peces con las figuras y naves de Lego Atlantis. Aquí vive Crabzilla, una especie de cangrejo gigante, que a mis hijos les gustó mucho.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Como ya era finales de agosto, cerraban pronto, a las 6 y las atracciones a las 5, así que fuimos casi cuando abrían (10:00) e intentamos no perder el tiempo para poder verlo todo. Creo que sólo nos faltó subir a una especie de mirador donde puedes verlo todo desde arriba.

Comimos en uno de los muchos restaurantes que hay y de postre, un super helado de 4 bolas que mi hijo no se pudo terminar, a pesar de que el helado le chifla.

A la vuelta, vimos un cartel que indicaba Jelling y yo había leido que en este pueblo había unas piedras con runas, en las que aparece el nombre de Dinamarca por primera vez y decidimos acercarnos. Las piedras realmente no merecen mucho la pena y el centro de interpretación que está al lado estaba cerrado, pero el pueblo es muy idílico. A la entrada hay un pequeño lago, con sus vacas en la orilla y había una especie de barco vikingo dentro, y todo el pueblo está muy cuidado, super limpio, con su pequeña iglesia y el cementerio alrededor. Las piedras están en este cementerio.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Dinamarca en general nos ha parecido un pais muy industrializado, pero también muy rural. Hay muchas granjas y algunas son realmente antiguas y bonitas, pero para verlas hay que salirse un poco de las carreteras principales y la autopista. Visitando pueblos como este o el camino hacia el camping es donde hemos visto granjas más curiosas, pequeños lagos, ovejas, vacas, etc. por lo que merece la pena ir a pueblecitos aunque no sean espectaculares de bonitos para ver este paisaje rural.

Os subo una foto de una granja que veíamos todos los días de camino al camping.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Este día nos acercamos a Aarhus, para visitar Den Gamle By. Se trata de una especie de museo al aire libre al que han trasladado algunas casas de Dinamarca y se puede ver cómo eran y cómo vivía antes la gente, puesto que hay casas de distintas profesiones. Es un sitio muy bonito y muy curioso también para los niños. Hay un bar para poder tomarse algo y también comer (smorrebrot) y también mesas si llevais bocatas, como hicimos nosotros.
También hay una pequeña zona con columpios y juegos antiguos para los niños.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

La verdad es que no vimos nada más de Aarhus, porque se puede estar tranquilamente una mañana entera visitando Den Gamle By. De aquí nos fuimos a Ebeltoft que es un pueblo costero, bastante turístico, con playa y muchas tiendecitas. A la entrada hay una fragata que se puede visitar, pero una vez más llegamos un poco tarde, a las 16:30 y como cerraban a las 17:00 no entramos.

De aquí nos fuimos a visitar el faro de Sletterhage. Como todos los faros, está en un sitio con bastante encanto, rodeado de una playa (de piedras, una vez más), en la que nos dimos un bonito paseo. Levantando las piedras encontramos bastantes cangrejos y también bastantes estrellas de mar, de diversos tamaños y colores.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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Este día creo que fue el mejor de nuestro viaje. Casi por casualidad encontré información en internet sobre el Traktor Bus para ir a la isla de Mandø y la posibilidad de ver focas y pensé que sería divertido para los niños.

Hicimos la excursión con la empresa Mandø Kro, os paso el enlace:
www.mandoekro.dk/en

Hay otra empresa parecida que organiza la excursión con un carro de caballos:
mandoevent.dk/seals

La isla de Mandø, junto con Romø y Fanø, forman parte del parque nacional del mar de Wadden y realmente merece la pena visitarla. Se accede a la isla desde un lugar cercano a Ribe por una pequeña carretera por la que sólo se debe ir con marea baja. Los lugareños van con sus coches, pero para los turistas está el Traktorbus. Debido a las mareas, hay que consultar los horarios de salida de la excursión en la Web, por cambian según el día. Nosotros tuvimos que madrugar para tomar el Traktor Bus a las 10 y en menos de una hora se llega a la isla, que es muy bucólica, con sus ovejas, vacas, un molino...

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A las 11 tomamos el segundo traktor bus para el Seal Safari, que nos llevó a un gran banco de arena. La excursión sale de un bar donde se puede tomar algo y comer, creo que también preparan picnic, pero nosotros llevábamos los bocatas preparados.

Cuando cruzamos la arena y llegamos cerca de la orilla, nos bajamos y pudimos darnos cuenta que aquellas especie de piedras que veíamos a lo lejos realmente eran focas y había cientos. Para no asustarlas, no dejan acercarse más de 50 metros, por lo que no puedes ver las focas de cerca y más o menos puedes ver que algunas entran en el agua, salen, van reptando. Para verlas un poco mejor, es imprescindible llevar prismáticos.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Mi hijo quería emular al Ultimo Superviviente y se puso a recorrer el banco de arena como si fuera un desierto y se encontró una foca muerta. No debía llevar mucho tiempo muerta, porque estaba en buen estado y pudimos ver bastante bien cómo son de cerca.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

El guía se encontró una pequeña pepita de ambar que nos regaló, pero por más que buscó mi marido no consiguió encontrar ninguna más. La pequeña se dio un pequeño baño (sólo los pies) en el Mar del Norte y dijo que el agua estaba calentita, pero también lo dijo en Semana Santa en el Cantábrico y en mayo en un río, así que no me fio mucho y yo por si acaso no me metí.

Cuando volvimos al pueblecito, tuvimo el tiempo justo de comernos el picnic que llevábamos en un lugar fantástico, con vistas al banco de arena y al molino.

Este día hizo un tiempo buenísimo, sin una nube y unos 24ºC. Nos quedamos con ganas de ir a una playa o darnos un bañito, pero el Traktorbus salía de vuelta a las 2. Preguntamos por alguna playa y nos dijeron que cerca de Ribe no hay, hay que cruzar hasta la isla de Romø.

Una vez en la península de nuevo fuimos a visitar Ribe. Es un pueblo con muchísimas casas antiguas, también se puede visitar la catedral y hay un museo vikingo. El museo está interesante, también para los niños, aunque lo vimos bastante deprisa porque con los niños uno no se puede parar a leer los cartelitos.

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Había toda una zona del museo para que los niños pudieran jugar como si fuera la edad media, con trajes para disfrazarse, armaduras, cuencos de comida, etc. Esto a mis hijos les encantó, como podreis apreciar en la siguiente imagen:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

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