Idioma: English Español
Mostrar/Ocultar Blogs / Diarios
Mostrar/Ocultar Fotos / Pics
Blogs 
Relatos de Angola, Namibia y Santo Tomé

Relatos de Angola, Namibia y Santo Tomé ✏️ Blogs de Africa Africa

Relatos de mis viajes por Angola, Namibia y Santo Tomé
Autor: Juliomad  Fecha creación:  Puntos: 5 (3 Votos)
Etapas 10 a 12,  total 22
anterior anterior  1  2  3  4  5  6  ..  8  siguiente siguiente

N'dalatando

N'dalatando


Pequeña historia ocurrida en la ciudad de N'dalatando (Angola)
Localización: Angola Angola Fecha creación: 11/07/2019 08:14 Puntos: 0 (0 Votos)
Es N’dalatando una ciudad incrustada en el fondo de un valle rodeado por suaves colinas, que se cubren de verde en la estación de lluvias y de rojo en la estación seca. Desde la cima de una de estas colinas, justo en la que está el repetidor de la estación de radio, parece una ciudad mucho más grande de lo que en realidad es.
La capital del departamento de Kwanza norte, es una pequeña ciudad del interior de Angola. La forma un pequeño núcleo de viviendas de la época colonial y decenas de barrios de casas hechas de adobe. Al ser la capital en uno de sus barrios está el palacio de gobierno, un edificio grande y feo pintado de rosa, copia en pequeño del gran parlamento nacional. Tiene también un moderno edificio de oficinas gubernamentales en cuya fachada hay un gran mapa de la provincia realizado en metacrilato y que por extrañas y desconocidas razones está prohibido fotografiar. Diez de sus calles están asfaltadas, y contrastan con los centenares de otras calles que son de tierra apisonada. Tiene una fábrica de agua embotellada, un supermercado y el edificio de la facultad de agricultura, además de un pequeño hospital donde la gente acude a morirse adecuadamente. Cuenta además con varios colegios públicos y privados estos últimos todos religiosos, un viejo mercado de la época colonial pintado de blanco que posee una torre coronada con un reloj que marca siempre la misma hora y donde la gente acude a vender los productos , tomates, pimientos y cebollas mayormente que cultivan en sus pequeñas huertas. Hay además en la ciudad una farmacia casi siempre desabastecida, un cuartel de policía y la sede de la delegación de hacienda.
Sus 20000 habitantes disfrutan de tres pequeños parques, de la gran reserva biológica de Quilombo a las afueras, un cine que solo abre los fines de semana para ofrecer conciertos de Koduro, una oficina de correos, varias panaderías, de decenas de peluquerías y de un equipo de futbol, que llegó a jugar en la primera división angolana. Tiene la ciudad además una bonita plaza, con bancos hechos en piedra a la sombra de unos inmensos arboles, donde están las ruinas de lo que una vez fue la inmensa delegación del banco central angolano. Además de una gran iglesia cristiana y varios templos protestantes bastante más pequeños. Paseando por la ciudad te puedes encontrar con dos estatuas de la reina Ginga, una minúscula librería que sobrevive a base de fotocopiar los libros que vende, centenares de humildes sastrerías, la sede de los servicios secretos angolanos y una rotonda para ordenar el trafico en un cruce con la carretera general. Cuenta la ciudad además con dos gasolineras, juzgados y una cárcel. No falta la casa del gobernador, la mejor de la ciudad, y frente a ella la sede del gubernamental MPLA (Movimiento Para la Liberación de Angola). Tiene además tres restaurantes decentes, dos bares, decenas de las populares roulettes, innumerables colmados atendidos por mauritanos y un hotel regentado por portugueses. Justo enfrente del hotel, se encuentra la estación de ferrocarril.
Es en el hotel, el Rosa de porcelana se llamaba y hoy tristemente desaparecido, donde disfrutaba de mi pequeño lujo diario. Todos los días después de comer y tras dejar a Adri en el escritorio, tal y como se llama en portugués a la oficina, me acercaba al bar del mismo, me sentaba en uno de sus mullidos sillones y mientras ojeaba en el oficial “Jornal do Angola” la sección de deportes, bebía una taza de aromático café angolano. Es allí, mientras disfrutaba del sabor del café y gracias al aire acondicionado dejaba pasar las horas más calurosas del día y sentado frente a la cristalera, cuando la idea fue tomando cuerpo.
Acercarme a la cercana estación y comprar un billete.
Una mañana y tras hablarlo con Adri la noche anterior decidí poner en marcha mi plan. La idea era sencilla comprar un billete de tren y pasar el día en la cercana ciudad de Malange, la capital diamantífera de Angola, dormir allí y volver a N’dalatando al día siguiente. Así que de buen ánimo salí de casa, cruce con precaución la carretera, los grandes camiones que circulan por la misma no respetan a nada ni a nadie, y me acerqué al gran edificio pintado de naranja y blanco que forma la estación de ferrocarril.
Tras empujar las grandes puertas de cristal, entré en el vestíbulo de la misma. Es un vestíbulo grande, alto, luminoso, limpio, con decenas de sillas de color naranja alineadas unas detrás de otras en rectas filas. Silencio. Salvo por mi presencia allí no había nadie. Mire a los laterales buscando algún panel informativo pero claro, si no hay gente qué sentido tiene que haya paneles, así que me acerque a una taquilla abierta, también es cierto que es la única que no tenia cerrada la ventanilla y tenia luz, para comprar mi billete. La taquilla, moderna y funcional, como no podía ser de otra forma estaba vacía. Espere unos minutos, carraspeé, dije hola en voz baja, pero no apareció nadie. Tosí algo más fuerte, dije hola en voz más alta pero seguía sin aparecer nadie. Cuando estaba a punto de desistir, desde detrás de una puerta que se abrió en la pared apareció por fin un hombre. Vestía una camisa blanca de manga corta, pantalones oscuros, corbata a juego y chanclas.
Serio y responsable se acerco a la taquilla, se sentó en la silla, se colocó la corbata y entonces con una gran sonrisa me preguntó a través de la ventanilla que deseaba.
- Un billete ida y vuelta a Malange- le dije en mi mejor portugués
- Hoy ya no hay ningún servicio - Me contestó el hombre sin dejar de sonreír desde detrás del mostrador.
- Sí lo sé, pero lo quería para mañana miércoles a primera hora y la vuelta para el jueves
- No, tampoco hay billetes para mañana.
- Y ¿eso?
- El tren para Malange, pasa el lunes por la mañana y no vuelve hasta el viernes por la tarde.
- ¿Y a otro lugar?
- A Luanda, en el tren que viene de Malange los viernes -Me respondió el hombre mientras me miraba con cara de este blanco no es muy listo.
- Comprendo. Gracias.
Despacio me aleje de la taquilla y me acerque al gran ventanal desde el que se podía ver la playa de vías.
De refilón, vi como el hombre abandonaba su puesto y se perdía de nuevo en el interior del edificio. Miré al exterior. Conté las vías y llegue hasta cinco, aunque dos de ellas estaban semiocultas por la maleza y las malas hierbas que crecían sin control. En una tercera, justo frente a mí, había una locomotora de vapor con su tándem incluido. Era una vieja locomotora negra y llena de herrumbre, que estaba claro había conocido tiempos mejores. Las hierbas y matojos que crecían entre sus ruedas y ejes, me indicaban que posiblemente no se había movido de allí desde la huida de los portugueses hace cuarenta años. Las dos vías más cercanas al edificio, limpias y con su balasto perfecto, imaginé que son las que debía utilizar el tren que paraba allí dos veces por semana. Me acerque algo más al ventanal y mire hacia los lados. A mi derecha había un pequeño tinglado ferroviario compuesto por dos pequeños almacenes, cuyas puertas y ventanas estaban cerradas y un minúsculo taller igualmente cerrado. Más allá estaba el cruce de las vías con la calle que lleva al supermercado y que como siempre estaba repleto de vendedores ambulantes, motocicletas que van y vienen y gente andando con su mercancía en la cabeza. Hacia el otro lado, a mi izquierda, las vías tras unificarse en una sola se perdían entre las pequeñas casas de adobe de uno de los “musseques” que rodean el centro de la ciudad.
Me di la vuelta y despacio me acerque a la primera de las filas de asientos de plástico naranja. Me senté en uno de ellos dejando la mochila en el suelo. Mientras disfrutaba del aire acondicionado miré a mí alrededor. Allí estaba yo, sentado en el vestíbulo de una estación nueva, reluciente, grande, preparada para atender a decenas de viajeros que esperaban para ir hacia algún destino o que descendían de los diversos trenes, pero estaba solo y me sentí extraño y fuera de lugar. Cómo si lo que no encajase allí, fuese mi presencia y no la falta de otros viajeros. Me sentí como un ladrón. Un ladrón que al entrar aquel día le hubiese robado a la estación una realidad diferente pero totalmente real de sillas sin gente, taquillas sin personal, silencio absoluto y la hubiese sustituido por otra más enrarecida de ruido de pasos, personal en las taquillas, voces susurrantes, pero mucho menos verosímil que la anterior. ¿Qué sentido tiene? ¿Para quién está puesto el aire acondicionado que con su lejano rumor únicamente hace más evidente el silencio del lugar? ¿Por qué están encendidas todas las luces y todos los fluorescentes que con su luminosidad solo acentúan los vacios sin sombras? ¿Para qué tantas filas perfectamente alineadas de sillas naranjas que evidencian las ausencias?. Por último, ¿Alguien alguna vez ha cogido el tren aquí? ¿Algún viajero ha descendido en esta estación del tren Luanda-Malange?
Por el rabillo del ojo, percibo que al fondo, en la pared una puerta se abre, puede que sea la misma por la que desapareció el empleado, y veo como un guardia de seguridad se acerca y se para a mi lado. Me saca de mis ensoñaciones. Amablemente me pregunta si me encuentro bien. Le sonrío y le contesto que solo estoy descansando. Me sonríe. Le veo alejarse y perderse de nuevo tras la puerta. Tras unos instantes me levanto yo también. Me dirijo hacia las puertas y saliendo al calor del mediodía africano, me alejo de un mundo misterioso, y dejo que los fantasmas, los silencios, los vacios vuelvan a tomar posesión de su mundo. Un mundo que solo he entrevisto y al que no se me ha permitido acceder.

Etapas 10 a 12,  total 22
anterior anterior  1  2  3  4  5  6  ..  8  siguiente siguiente


(Windhoek) Namibia

(Windhoek) Namibia


mi visita a Windhoek (Namibia)
Localización: Namibia Namibia Fecha creación: 12/07/2019 08:12 Puntos: 0 (0 Votos)
Lo bueno de llegar a una ciudad de la que no tienes ninguna referencia es que es imposible que te defraude, cómo no te has hecho ninguna idea preconcebida tampoco esperas nada de ella por lo que, aunque lo que te ofrece sea escaso nunca tienes la sensación de que te han engañado. Eso exactamente es lo que pasa con Windhoek, la capital Namibia una ciudad que se derrama por el desierto como una de esas urbes que salen en las pelis americanas, un pequeño centro financiero con algunos, pocos, edificios altos y luego decenas de barrios formados por casitas bajas unifamiliares que se extienden interminable por el desierto.

Cuando llegamos a Windhoek, un misterio de la ciudad es como se pronuncia su nombre, para mi decían Windooc pero a A. le sonaba a Winduc, desde el aeropuerto distante 30 kilómetros de la misma, eran las cinco de la tarde y según nos dijo el conductor del taxi que nos transportaba al hotel era hora punta, la hora en que la gente salía de sus trabajos para irse a sus casas. Lógicamente esperaba peatones andando presurosos por sus calles, vías llenas de coches con conductores impacientes tocando el claxon, paradas de buses repletas de gente nerviosa esperando su autobús, pero está claro que la lógica no es lo mío. La realidad es que había muy pocas personas andando por las calles, realmente nunca hay nadie andando por las calles de la capital, tampoco hay un servicio urbano de autobuses así que era imposible que hubiese gente esperando en inexistentes paradas y en cuanto al atasco, la única parada que tuvimos que hacer se debió a tener que esperar a que un semáforo pasase del rojo a verde. Así que enseguida y avanzando por zonas residenciales de avenidas amplias, bien asfaltadas y señalizadas, sin tráfico y rodeados de casas con jardines perfectamente cuidados llegamos a nuestro hotel.

Una particularidad de nuestro hotel y de otros muchos en esta ciudad, es que no son edificios más o menos grandes dedicados ex profeso a alojar viajeros si no que son casas particulares que han aprovechando una zona del gran jardín para construir alojamientos para los viajeros. En nuestro caso, nuestro hotel, que no tenía ningún letrero o indicación que indicase que allí se podían alojar huéspedes, tenía únicamente cinco habitaciones que daban a un pequeño patio interior, decorado con unos parterres con flores, algunos árboles y una pequeña piscina, y digo pequeña por no decir minúscula, además del típico bar que tú mismo puedes construir para disfrutar con tus colegas que es donde servían el desayuno, mientras que la recepción no era si no el recibidor de la casa del dueño de la finca, donde podías ver a un perro durmiendo apaciblemente en un sofá, unas mesas y unas paredes tan llenas de fotos y recuerdos que te hacen dudar si esa gente no tiene un poco de horror al vacío.

Siempre nos ha gustado nada más llegar a un sitio y justo después de dejar las maletas salir del hotel y aprovechar para dar una vuelta por la zona, reconocer el barrio, comenzar a mezclarnos con la gente o , para que nos vamos a engañar, identificar algún garito que pueda ser merecedor de una visita posterior pero esto aquí fue imposible, como digo estábamos en una zona residencial y cuando salimos a la calle, después de abrir el gran portón metálico que cerraba el acceso al hotel, solo encontramos calles solitarias con altos muros de piedra coronados con alambre de espino o concertinas que protegían enormes casonas. Así que tras un breve paseo y de vuelta a nuestra habitación y después de hablar con la dueña-recepcionista decidimos ir al centro.

Si no tienes coche como es nuestro caso, lo tienes jodido en esta ciudad que pese a no ser muy poblada, no llega a 400000 habitantes, es muy extensa y en la que en la que no hay transporte público. Con lo que la solución para moverse por la misma es que obligatoriamente tienes que usar el servicio de taxi. Pero esto tampoco es sencillo, no puedes salir a la calle y parar el primer taxi que con el que te cruces ya que normalmente no te cruzas con ninguno, ¿he dicho ya que nunca ves a nadie por las calles y que apenas hay tráfico?, sino que además los taxis no llevan ningún distintivo que les distinga de cualquier otro vehículo. Por lo que si quieres ir de un lugar a otro, o regresar por la noche a tu hotel debes hablar con la recepción o con el encargado del restaurante para que te solicite el taxi y acuerde el precio que te cobraran por realizar el servicio. Lógicamente el precio varía si es por el día o la noche o, si el sitio está más o menos cerca o si vas a compartir taxi, a veces ocurre que puede que tengas que compartir taxi con unos desconocidos a los que su hotel o el tuyo pilla de camino. Como nos ocurrió a nosotros, que nos toco compartir un taxi a la salida del más famoso local nocturno de Windhoek el Joe´s Beer house, con unos alemanes pero que al ver el tamaño del vehículo que teníamos que compartir, era francamente pequeño, decidieron con muy buen criterio esperar a que les llamaran a otro. También es normal y especialmente por la noche que en el taxi no este solo el conductor si no que vaya acompañado por otra persona.

Cómo quizás hayáis intuido no es Windhoek una ciudad monumental o de edificios señeros, todo lo contrario, es una ciudad retraída, silenciosa y modesta. Más allá de los típicos monumentos a descubridores alemanes, fundadores germanos de la ciudad e iglesias más o menos coquetas y bonitas, lo que más nos llamo la atención fue la calle dedicado a Fidel Castro en agradecimiento por la ayuda prestada por Cuba a Namibia en su lucha por la independencia. Esta ayuda no consistió únicamente en la lucha de los cubanos contra los sudafricanos en Angola, país que servía de base de retaguardia segura al SWAPO, principal grupo namibio que luchó por la independencia, sino también y puede que incluso más importante en el apoyo diplomático a la independencia en todos los foros y agencias internacionales.

Pese a que nosotros en nuestro par de salidas nocturnas no lo sentimos parece que la ciudad no es tan segura por la noche como aparenta por el día ya que con varias de las personas con la que hablamos, ósea la recepcionista del hotel, el taxista y el camarero del bar, nos trasladó la idea que la ciudad por el día es muy agradable y segura pero no era conveniente andar por las solitarias calles a partir de las nueve de la noche, ¿Por qué las nueve y no otra hora es un misterio? Pese a como digo nosotros no sentimos en nuestras salidas nocturnas sensación de inseguridad alguna. Quizás este miedo venga también porque Namibia es uno de los países con mayor prevalencia de VIH en el mundo, con cifras realmente espeluznantes, tanto así que en la fachada del cuartel general del ejército cuelga una pancarta que dice algo así como que su principal lucha es contra el SIDA y enfermedades oportunistas como la tuberculosis asociadas al virus.

Etapas 10 a 12,  total 22
anterior anterior  1  2  3  4  5  6  ..  8  siguiente siguiente


Ethosa ( Namibia)

Ethosa ( Namibia)


Nuestra experiencie en el parque de Ethosa (Namibia)
Localización: Namibia Namibia Fecha creación: 15/07/2019 08:14 Puntos: 0 (0 Votos)
E
l parque nacional de Ethosa tiene una superficie de más de 20000 Km2, lo escribo para que se lea bien más de veinte mil kilómetros cuadrados, esto es una enormidad, hay países más pequeños, aunque nada si lo comparamos con los más de 100000 Km2 que tuvo allá en sus orígenes, cuando se creó a principios del Siglo XX. Su centro está ocupado en gran parte por el lecho seco de un lago y es conocido con el nombre de “the pan” la sartén, un lugar árido y caluroso de color blanco inmaculado y que solo se inunda con una fina lamina de agua durante la temporada de lluvias. Mientras que el resto del parque es una zona semiárida de praderas con arbustos enanos y arboles del tipo de las acacias o los mopanes, un pequeño árbol de hojas muy verdes y que crece por todo el norte de Namibia. En él parque se dan cita todos los grandes animales de África. Elefantes, jirafas, leones, cebras, guepardos, rinocerontes, hipopótamos, todo tipo de gacelas, ñus y antílopes, orgullosos orix, modestas ardillas, jabalíes verrugosos ¿os acordáis de Pumba del Rey León? pues justo ese, multitud de aves desde el gigantesco avestruz a diminutas y coloridas aves cantoras pasando por garzas y gallinas pintadas, serpientes, roedores… Lo mejor del parque es que no tienes que pasarte horas dentro del vehículo circulando por los polvorientos caminos a ver si tienes la suerte de cruzarte con alguno de los animales anteriormente citados que también, si no que gracias a los bebederos o charcas “waterholes” estratégicamente situados, es posible ver a decenas de animales juntos, sin mucho esfuerzo, mientras beben o se bañan. No creáis por ello que a los animales se les ve en la distancia, nada más lejos de la realidad, es muy normal tener que detener el coche en medio de la carretera mientras que a dos metros por delante del vehículo cruza un manada de cebras, o unas leonas han decidido tumbarse en medio de la carretera y hay que esperar a que perezosas se levantan y tranquilamente se vayan a tumbar entre los arbustos mientras en su camino pasan a medio metro de la ventanilla del coche.

Lo ideal es dedicarle al parque un par de días realizando lo que llaman “the game” pero en lugar de cazar a los animales con rifles, capturarlos únicamente con la cámara fotográfica y así tener la oportunidad de pasar la noche en el parque en alguno de los lugares acondicionados dentro del parque para ello ya sea como campista o alquilando una humilde pero muy bien acondicionada cabaña.

Nosotros pasamos la noche en un lugar llamado Okakuejo, que en lenguaje local significa “lugar de las mujeres”, un sitio agradable, con una infraestructura básica pero muy completa, que cuenta con zonas de acampada, tienda, restaurante, bar, y una piscina un lujo que se agradece. Nada mejor que un refrescante baño a la caída de la tarde después de un duro día de calor y polvo y antes de tomar una cerveza bien fría. El lugar cuenta y es lo más importante con una charcha acondicionada, incluso con asientos y una grada techada para evitar el sol del mediodía, que permite a los turistas ver desde pocos metros de distancia a los animales que se acercan durante todo el día y toda la noche para abrevar. Después de una de las muchas visitas que hicimos por la noche al abrevadero, una de ellas con botella de vino namibio incluido, y mientras volvíamos a nuestro alojamiento, nos cruzamos con un par de chacales que deambulaban por la zona en busca de alimentos y que temerosos huyeron ante nuestra presencia.

Algo que no se suele comentar mucho es el increíble cielo nocturno que se disfruta aquí. Un cielo plagado por decenas de miles estrellas y que se ve coronado por una vía láctea que orgullosa e impresionante cruza luminosa la totalidad del firmamento, producto todo ello de la total falta de contaminación lumínica. Posiblemente con el paso del tiempo y los años, se me vayan perdiendo algunos recuerdos de este viaje pero estoy seguro de que uno de los recuerdos que nunca olvidare será el de estar sentado por la noche en un banco, viendo como una pareja de elefantes disfrutaban de la charcha y sobre nosotros refulgía el cielo más estrellado que se pueda ver.

Etapas 10 a 12,  total 22
anterior anterior  1  2  3  4  5  6  ..  8  siguiente siguiente


📊 Estadísticas de Diario ⭐ 5 (3 Votos)
  Puntos Votos Media Visitas
Actual 0 0 Media 92
Anterior 0 0 Media 168
Total 15 3 Media 12400

05 Puntos
04 Puntos
03 Puntos
02 Puntos
01 Puntos
Para votar necesitas conectarte como usuario registrado.
Te puedes registrar gratis haciendo click aquí

comment_icon  Últimos comentarios al diario Relatos de Angola, Namibia y Santo Tomé
Total comentarios: 3  Visualizar todos los comentarios
Imagen: Yennefer  Yennefer  09/07/2019 18:00   📚 Diarios de Yennefer
Buen comienzo para el relato de tus viajes por aquí y por allá. Espero poder seguir leyendo. Saludos.
Imagen: Agus1973  Agus1973  03/08/2019 07:22   📚 Diarios de Agus1973
He disfrutado leyendo tus impresiones del continente africano. Gracias por compartir.
Imagen: Juliomad  juliomad  06/08/2019 07:45   📚 Diarios de juliomad
Gracias por los comentarios. Me alegro de que os gusten
CREAR COMENTARIO EN EL DIARIO


👉 Registrate AQUÍ

Diarios relacionados
Los Viajes por AFRICA  de Enrique LuisLos Viajes por AFRICA de Enrique Luis Relatos de viajes a Marruecos, Tunez, Senegal, Egipto, Jordania, Cabo Verde, Sudafrica... ⭐ Puntos 4.67 (3 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 58
RodandoporelmundoRodandoporelmundo Nos hemos puesto en camino. Por delante, nos aguarda un viaje de dos años en el que no tenemos metas concretas ⭐ Puntos 5.00 (3 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 17
AfricaAfrica Mis experiencias en África ⭐ Puntos 4.33 (3 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 17
viaje a kenia, tanzania y zanzibar agosto 2011viaje a kenia, tanzania y zanzibar agosto 2011 aqui contaremos un poco de como fue nuestro viaje, tratando de ayudar con... ⭐ Puntos 4.75 (4 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 13
Y de repente, ÁfricaY de repente, África Africa es un continente que sorprende, que atrapa y que hechiza de una forma embriagadora. Éste fue el viaje rumbo a un futuro jamás imaginado, un presente... ⭐ Puntos 3.00 (1 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 10
forum_icon Foros de Viajes
Excursiones-o-Senderismo Tema: ¿Qué país de África elegir?
Foro África Foro África: Foro de viajes por África: viajes que abarquen varios países africanos o dudas generales sobre viajes por este continente.
Ir a tema del foro Ir a tema del foro
Últimos 5 Mensajes de 950
373552 Lecturas
AutorMensaje
Deviajevoy
Imagen: Deviajevoy
Super Expert
Super Expert
16-11-2007
Mensajes: 407

Fecha: Vie Mar 14, 2025 01:25 pm    Título: Re: ¿Qué país de África elegir?

Hola forer@s!

¿Dónde encontráis en qué mes se recomienda viajar a cada país y que acompañe el tiempo? Con google hay demasiada información y no muy clara muchas veces con el tema lluvias.

Estoy buscando mi primer viaje a África y descarto Botswana y Tanzania por los precios que he encontrado (viajo sola y el suplemento individual es terrorífico). Creo que optaré por Kenia sin playas, Namibia o Sudáfrica. ¿Para el típico viaje con todo organizado, cuál recomendaríais si puedo coger 2 semanas en noviembre, enero, febrero o marzo?

Muchas gracias de antemano!
leviatan
Imagen: Leviatan
Indiana Jones
Indiana Jones
28-04-2007
Mensajes: 1312

Fecha: Vie Mar 14, 2025 02:47 pm    Título: Re: ¿Qué país de África elegir?

El tiempo es muy diferente en cada pais yo lo miro la ap de micro sof tiene el tiempo con estadisticas y te orientas
Deviajevoy
Imagen: Deviajevoy
Super Expert
Super Expert
16-11-2007
Mensajes: 407

Fecha: Dom Mar 16, 2025 05:51 am    Título: Re: ¿Qué país de África elegir?

Gracias. Me refería a que si no he entendido mal, noviembre es un buen mes para ir a Namibia pero no para Kenia. Para esta última..e parece que es enero y marzo.

Pero puedo haberlo entendido mal. Acabo de empezar a informarme.


Cualquier opinión es bienvenida!



venecia1
Imagen: Venecia1
Moderador Viajes
Moderador Viajes
26-04-2009
Mensajes: 13581

Fecha: Mar Abr 01, 2025 12:45 am    Título: Re: ¿Qué país de África elegir?

Mensaje trasladado a Viajar a Namibia por Libre o con Agencia Local.
Saludos.
Javilon88
Imagen: Javilon88
New Traveller
New Traveller
19-01-2017
Mensajes: 5

Fecha: Lun Abr 14, 2025 08:55 am    Título: Re: ¿Qué país de África elegir?

Hola Luli,

Viajas este año finalmente? que conseguiste? alguna agencia que recomiendes?
Respuesta Rápida en el Foro

¡Regístrate Aquí para escribir en el Foro!


Mostrar/Ocultar Galería de Fotos
Etiopia
AMANECER EN TURMI
Maketo
Kenia
AMBOSELI
Albertroner
All the content and photo-galleries in this Portal are property of LosViajeros.com or our Users. Aviso Legal - Privacidad - Publicidad
Nosotros en Redes Sociales: Pag. de Facebook Twitter instagram Canal de Youtube