Como cada verano dedicamos nuestras vacaciones a descubrir un lugar nuevo. Este año la elección del destino la ha decidido
mi grupo favorito.
Siempre nos había llamado la atención Escocia por la combinación entre naturaleza, historia y cultura que se puede disfrutar en los meses más calurosos (o menos frescos) del año, así que hemos aprovechado y hemos hecho coincidir el viaje con la asistencia al concierto de The Gaslight Anthem en Edimburgo.
Hemos estado nada más y nada menos que quince días. Con un país relativamente pequeño, dan para mucho (¡incluso hemos bajado a Inglaterra un par de días!).
Hemos hecho un recorrido un poco aleatorio, a veces nos hemos movido en transporte público como tren o autobús, con excursiones organizadas o incluso en bici.
Hemos empezado el viaje por
Glasgow, y regresaremos desde Edimburgo, más que nada por los horarios y precios de los vuelos, pero ha sido buena decisión porque (no se me enfaden los glasgüenses) Edimburgo es más bonito.
En la foto, la siempre fotogénica Edimburgo
Hay que decir que Glasgow no está nada mal. Llegamos a media tarde, dejamos las mochilas en el alojamiento y vamos a caminar.
Nos llama la atención que puntos tan remarcables como la Catedral, el Ayuntamiento o la Universidad están en partes opuestas de la ciudad, que carece de un centro histórico como tal.
Lo que sería el centro social de la ciudad hoy en día es la plaza
George Square, que alberga el ayuntamiento (
City Chambers) y las calles circundantes.
Un par de calles más al sur está la estatua del
duque de Wellington, siempre coronado con un cono naranja, un emblema de la ciudad y muestra del sentido del humor de los escoceses.
Y por hoy poco más, simplemente paseamos, cenamos y a descansar que esto no ha hecho más que empezar.
Para empezar el día con plena inmersión, desayunamos una buena ración de Scottish Breakfast. Viene a ser casi igual que un English Breakfast: salchicha, bacon, tomate asado, judías… pero con el añadido de una rodaja del famoso
Haggis.
Foto de la web Britannica
Es una morcilla que además de carne lleva avena, y la sirven frita. Lo que hoy probamos no nos gusta mucho, pero tendremos varios intentos a lo largo de los días y finalmente encontramos algún haggis realmente bueno.
El día de hoy nos dará tiempo de visitar casi todo
Glasgow.
Empezamos el día visitando la
Catedral y su cementerio (llamado Necropolis).
Esta catedral gótica está dedicada a San Mungo. La tumba del santo se encuentra en la cripta.
En el cementerio destacan cruces celtas con sus característicos grabados entrelazados. Además hay unas bonitas vistas del exterior de la catedral.
Posteriormente y después de comer, nos dirigimos al museo y galería
Kelvingrove. Como todos los museos públicos del Reino Unido, es gratuito.
El elegante edificio fue construido para formar parte de una exposición internacional de principios del siglo XX.
La colección se divide en dos grandes temáticas, por un lado, arte, y por otro, ciencia.
Una de sus obras más destacadas es un crucifijo de Dalí, pero en este momento está en préstamo y no lo podemos ver.
Es de nuestro especial interés la sala de arte nouveau dedicada al arquitecto y diseñador Mackintosh y sus contemporáneos. En Glasgow es la figura equivalente a Gaudí para los barceloneses.
A continuación nos acercamos a la
Universidad, que está a corta distancia, donde hacen
tours guiados, pero no llegamos a tiempo así que exploramos las instalaciones a nuestro albedrío.
Destacan los claustros, el patio de columnas y el museo
The Hunterian.
Parece ser que es habitual en los museos escoceses tener un amplio abanico de temáticas “todo en uno”.
Aquí tenemos una sección sobre la muralla antonina, una zona de ciencias naturales con fósiles y gemas, y una exposición sobre los inicios de la medicina moderna, entre otras.
Además, cruzando la calle, está la Galería de Arte Hunterian, pero actualmente está medio en reformas. No queremos dedicar mucho tiempo a museos, ¡hace demasiado buen tiempo!
La universidad se visita rápido, y todavía es media tarde, así que nos acercamos caminando a los
jardines botánicos donde hoy se ha reunido toda la población de la ciudad para disfrutar de la ola de calor tumbados en el césped.
Hay un precioso palacio de cristal que hace de invernadero y dentro el calor es definitivamente tropical.
Para acabar el día iremos a cenar al pintoresco callejón
Ashton Lane. La callecita peatonal está repleta de restaurantes de todo tipo.
Volveremos al hotel cruzando nuevamente el parque Kelvingrove donde vemos ensayar a un grupo de gaiteros.
Hoy tenemos reservada una excursión organizada para visitar el castillo de
Inveraray y el valle de
Glencoe entre otros puntos de interés con la compañía
Timberbush Tours.
El motivo inicial de esta excursión era ver las fotogénicas ruinas del castillo de
Kilchurn, pero nos pareció que sin coche propio era muy difícil llegar.
Pero apenas pararemos para tomar una foto en este castillo

, porque la excursión incluye también una parada en el lago Lomond, otra en el castillo de Inveraray, otra en la localidad de Oban y un par en Glencoe.
También veremos el castillo Stalker desde el autobús, sin siquiera parar. Es una lástima no haber podido verlo mejor porque es realmente bonito.
La primera parada es en el pintoresco pueblecito de
Luss, a la orilla del
Loch Lomond. Aquí el día es fresco, gris y con neblina. Nos sorprende ver unas señoras bañandose.
A continuación nos dirigimos a la localidad de
Inveraray, donde visitamos el
castillo, que es más bien de tipo palacio, y ha sido residencia de los duques de Argyll desde hace varias generaciones.
El duque es el jefe del Clan Campbell, una de las dinastías más poderosas de Escocia desde la Edad Media.
Se pueden visitar los jardines y los interiores, ostentosamente decorados con mobiliario, tapices y pinturas que remontan al siglo XVII. Se puede visitar por dentro y por fuera en algo más de una hora.
Para comer hacemos parada en
Oban, un pueblo pesquero muy concurrido, y finalmente de regreso hacemos un par de paradas breves en el valle de
Glencoe, donde disfrutamos de este mágico paisaje.
Los riachuelos se abren paso entre las rocas y entre las montañas, cubiertas de un verde aterciopelado hasta el horizonte. Hay senderos, pero no nos alejamos mucho de la carretera porque la parada es corta y hay que seguir.
Este tipo de excursiones son la única forma de visitar Glencoe sin coche propio. Por una parte, resulta cómodo que te lleven, y además el guía-conductor va explicando la historia del lugar, pero por otra parte, las paradas han sido cortas y nosotros hubiéramos preferido poder caminar más por el monte.
Una vez en Glasgow no podemos dejar de dar un último paseo y acercarnos a la preciosa estación victoriana
Central Station antes de cenar.
Foros de Viajes |
Tema: Viajar a Escocia: Edimburgo, Tierras Altas, Lago Ness... |
Foro Londres, Reino Unido e Irlanda: Foro de Reino Unido e Irlanda: Londres, Edimburgo, Inglaterra, Gales, Escocia, Irlanda del Norte, República de Irlanda, Dublín.
|
Ir a tema del foro
|
|
Últimos 5 Mensajes de 1234
750869 Lecturas
|
| Autor | Mensaje |
xansolo
 Willy Fog
 25-09-2014 Mensajes: 11553
|
@Light
Por un lado, cada uno va cuando puede ir... Pero hay que tener en cuenta las consecuencias. Por ej. Yo iba a ir a Irlanda en abril, pero varias cosas que quería ver no era posible en esas fechas y por eso acabé yendo en verano...
Y lo mismo pasa con Escocia. Abril igual es un poco justito para poder ver los frailecillos, ya que aunque quizás sí empiecen a anidar en ese mes, es más propio verlos en verano... Tú vas muy a primeros de abril, no sé cómo de justo serán esas fechas para ello. (igual depende de la temperatura, no tengo mucha idea... Si el invierno se alarga, igual no... Leer más ...
|
|
Light
 Experto
 26-03-2007 Mensajes: 143
|
Parece que me has leído la mente... Justo estaba mirando vuelos con vuelta el 11 🤣
Totalmente de acuerdo contigo, nuestro problema es poder cuadrar calendario por trabajo y el año que viene son los únicos días asegurados para coincidir pero creo que aunque la conexión de vuelta sea algo peor voy a reservar del 2 al 11 y ese día de mas ya nos da un respiro.
Aún así tengo que reposar y pensar en algo mas realista y que podamos disfrutar incluso improvisando sin tener que estar pendientes de la ruta y el reloj.
Los frailecillos si nos hubieran gustado pero podriamos prescindir de ello... Leer más ...
|
|
xansolo
 Willy Fog
 25-09-2014 Mensajes: 11553
|
@Light
Pues no sé, prueba a hacer otro boceto (pensando también el los tiempos de ir de un sitio a otro)... A lo mejor haciendo el viaje al revés de lo normal (le llamo normal porque no sé por qué, muchos solemos viajar en sentido horario XDDD, pero quizás te convenga hacer al revés):
Por ej. Llegar y ver Edimburgo (la tarde de llegada y un día más...)
Luego subir por Pitlochry hacia Skye...
Bajar de Skye hacia Glenfinnan... Con esto igual (hay que montarlo para ver si es factible), ya puedas estar ahí en torno al 7-8...
Luego quizás pasar por Oban, y de ahí cruzando las... Leer más ...
|
|
kileann
 Indiana Jones
 20-09-2007 Mensajes: 1036
|
A principios de abril no es buen momento para los frailecillos, seguramente no habrán llegado. Siempre recomiendan junio/julio como la mejor época.
Los frailecillos, por cierto, no se ven en la isla de Staffa, se ven en la isla de Lunga, que está cerca de Staffa.
De todos modos, ir solo a Staffa ya merece la pena. Es una pasada la isla. Las formaciones volcánicas son impresionantes
|
|
mmonneg
 Silver Traveller
 01-07-2022 Mensajes: 10
|
Mi pareja y yo estuvimos en Escocia 10 días (del 11 al 21 de Agosto). Solo 4 gotas el primer día en Edimburgo. El resto de días prácticamente soleados e incluso un día llegamos a 30º, algo impensable allí.
Paso a detallar nuestro recorrido en los 10 días que estuvimos en Escocia:
- Día 1
Salida desde el aeropuerto de Barcelona y llegada al aeropuerto de Edimburgo a media mañana. Cogimos coche de alquiler y dirección a Edimburgo (unos 30 min. De distancia). Visitamos la zona turística de Edimburgo, visitamos el castillo y pasamos noche en la ciudad.
- Día 2
Salimos temprano de... Leer más ...
|
|
|