Esencias del Mediterráneo II - Iberocruceros ✏️ Blogs de Mediterráneo

las 8 teníamos que estar en el teatro y el tema fue más puntual que ayer. Nos subieron en buses y nos dirigimos a Florencia, que está a una hora y media del puerto. Allí vimos por fuera el Duomo (catedral), el Baptisterio, el Puente Vecchio, un par de palacios de los Medici etc.

El tiempo de la ruta es de dos horas en donde una guía te va explicando la historia de los edificios. Luego te dan un par de horas más libres, que nosotros aprovechamos para intentar entrar en la catedral, lo que fue imposible, pero entramos en el Baptisterio (4 euros por persona). Si quieres ir al baño tendrás que pagar, nosotros fuimos en la oficina de turismo (0,60 céntimos por persona). El Baptisterio es donde se bautizaba antiguamente a los cristianos. A lo contrario que ahora, antes se bautizaban a los adultos y hasta ese momento no podían entrar en la catedral ni en ninguna otra iglesia. También aprovechamos para caminar sobre el famoso puente (en la ruta guiada lo ves de lejos) y apreciar la cantidad de joyerías que hay en él. Parece ser que antes todos esos comercios eran carnicerías, pero a los Medici no les gustaba y decidieron poner algo con un poco más de glamour, jejej. Es el único puente de Florencia que no fue derribado en ninguna de las guerras mundiales.

Hubo gente que se fue a comer, nosotros para aprovechar un poquito más el tiempo, pillamos algo en el buffet del desayuno y nos quitamos la espinita cuando tuvimos hambre.

Luego nos dirigimos a Pisa, que es otra hora y media de viaje. Aquí te dejan 40 minutos libres para entrar en la Plaza de los Milagros, en donde está la famosa Torre Inclinada (se inclina desde su construcción debido al suelo pantanoso en la que está ubicada), el Baptisterio y la Catedral. Para entrar en esta plaza entras por la puerta de una muralla y la impresión es única, tres edificios preciosos que deslumbran con luz propia.

Ahora son las 19.25, hace una hora que llegamos al barco y nos dio tiempo a merendar algo y a pedir en recepción que nos cambiaran de habitación debido al ruido. Descubrimos que nuestra cabina está pegada a una sala de máquinas, de ahí el ruido infernal que hay aquí dentro. No creo que tengamos suerte, así que compramos en Florencia unos tapones para los oídos.

Ains, que se me olvidaba, ayer también fuimos al espectáculo en el teatro. Era un trío cómico. La verdad es que eran buenos, pero nos pareció un poco infantil, aunque había gente que se partía de risa. Cuestión de gustos, supongo.

Hoy estamos pensando en no ir, que mañana hay que madrugar un montón para la excursión de Roma y entre el cansancio y las horas de sueño perdidas estamos para el arrastre, jejeje.

👉 Ver Etapa: Día 3: Livorno (Florencia y Pisa) ⏫ Volver arriba Compartir:

Ayer conseguimos que nos cambiaran de camarote. Después de la cena fuimos a preguntar de nuevo y ya nos comentaron que habia una libre.

En el que estamos ahora no hay tanto ruido, pero se mueve un poquito más, ya que estamos muy cerca de la proa y ya sabéis, si queréis que no se mueva demasiado, debereis pillar una cabina lo más centrada posible.

Hoy era el gran día de este crucero, por lo menos para nosotros. Son las 19.30 h y hace una hora más o menos que llegamos, pero, por supuesto, fuimos a merendar a la cubierta 10, como todos los días que podemos.

Salimos del barco sobre las 8.15 y nos dirigimos a las catacumbras de Santa Domitila, donde nos esperaba un guía del vaticano, ya que los de Roma no están autorizados ni para las catacumbas ni para la Plaza de San Pedro.....

La visita fue de una media hora, interesante pero breve. Iba con un poco de miedo a la claustrofobia, pero no tenéis porque tenerle respecto, ya que aunque son estrechas no son demasiado bajas y la duración es breve.

Luego nos dirigimos al Coliseo, pudimos ver un poquito nada más, porque solo nos dejarons 10 minutos libres, seguimos por los Foros Romanos, que son impresionantes, vimos el Capitolio (no nos dió tiempo a volver en el tiempo libre, pero parece ser que hay un ascensor panorámico y desde el que tienes una vista única de la ciudad). Seguimos por la Piazza Venezia hasta llegar a la Fontana di Trevi en donde tiramos una moneda (con la mano derecha por encima del hombro izquirdo) para poder volver a
la capital italiana (la mía cayó fuera, como la de muchos, ya que la distancia desde el que te permiten tirarla está bastante lejos del agua) y llegamos a la Pizza di Spagna, con su espectacular escalinata. Ahí nos dejaron casi 3 horas libres que aprovechamos para comer y visitar la Piazza Navona y el Pantheon. El punto de encuentro era en la Piazza del Popolo que es increíble con sus iglesias. En la que está más cerca del Arco hay unos frescos de Caravaggio que se pueden visitar de manera gratuita.

Nos quedamos con pena porque nos habría gustado pasear por la Piazza di San Pietro, pero al ser hace 3 días la beatificación del Papa Juan Pablo II había colas de por lo menos 2 horas.

La conclusión del día de hoy es que Roma es demasiado extensa y que como nos dijo la guía, hacen falta unos 5 días para poder llegar a disfrutarla. Nos llevamos la idea de una ciudad bonita, con un tráfico caótico y muchas aglomeraciones de gente.

Sabía que el tráfico en Roma era caótico por su fama, pero hay que vivirlo. Los pasos de cebra se los saltan, hacen giros inesperados, van a una velocidad excesiva..........pero si lo piensas es comprensible. Hay tantos problemas cada vez que se remueve la tierra que sólo existen 2 líneas de metro y pocos parkings subterráneos, por lo que los coches aparcan casi siempre en el exterior, en el poco espacio que hay (sobre aceras, tapando contenedores.........), además nunca vi a tanta gente conduciendo y hablando por el móvil, mandando SMS (o algo similar), leyendo el periódico.........ES UN CAOS!! Dicen que hay 2 millones de coches (casi todos pequeños y muchos Smarts) y 1 millón
de motos (tipo Vespa).

Por cierto, el primer dia nos vino la camarera de noche a preguntarnos si hacía la habitación, yo le dije que no hacía falta, porque realmente no habíamos estado en ella y me daba pena. Luego me arrepentí, por si le habría parecido mal.
A mi que me gustan lo detalles "tontos", os puedo asegurar que vale la pena permitirle que os la haga. Te abren la cama, que es lo de menos, y te hacen figuritas con las toallas, que es lo de más, jeje. Me encantó entrar y ver un precioso perro, con su hocico y sus ojitos, jaaj.

Nos vamos a la cena y luego a ver El Club de la Comedia!!!

En la cena tuvimos una sorpresita, ya que los camareros “desfilaron” con música de fondo y luego nos sacaron a bailar a las chicas. Algunos de ellos hasta se hicieron unas castañuelas con los platos pequeños. Desde luego, ellos son lo mejor del barco. Son todos increíbles.

👉 Ver Etapa: DÍA 4: Civitavecchia (Roma) ⏫ Volver arriba Compartir:

pudimos recuperar algunas horas del sueño perdidos.
Unos minutos antes de llegar a Pompeya, la guía nos avisa de que vamos a hacer ya la primera parada prevista (???). Qué primera parada???
Si nosotros solo habíamos contratado Pompeya y en ningún momento se nos comentó nada más. Pues bien, fue en un talle de coral. En dos minutos de reloj, nos explicaro como se trabajaba el coral y como éste daba lugar a camafeos, pendientes....
Y luego nos enseñaron sutilmente donde estaba la tienda. Menudo cabreo!!! Al final perdimos algo más de media hora que podíamos haber aprovechado muy bien en Pompeya. Ya dejamos clara nuestra disconfirmadad en el cuestionario de satisfacción que nos dieron antes de llegar de vuelta al barco.

Pero Pompeya vale la pena, creo que es lo mejor de este viaje. Quien me lo iba a decir?? Roma me decepcionó un poco y no porque no sea bonita, que lo es y mucho, si no porque es un agobio de gente y la excursión un estrés constante, pero Pompeya me dejó maravillada. Son dos horas de caminata por sus calles, visitando el prostíbulo (donde se conservan las antiguas camas y varios frescos) y una de las casas conservadas, donde pudimos ver el salón con frescos y mosaicos, el patio interior.....
Pudimos ver también varias tiendas y bares con sus viejos mostradores y los raíles de las puertas correderas, hornos de pan, varias fuentes públicas, sus pasos de cebra..........Os habéis quedado alucinados con lo de los pasos de cebra, eh? jeje

La verdad es que muchas de las cosas que nos contó ayer la guía, ya lo sabíamos por varios documentales que vimos sobre esta ciudad y poder disfrutarlo en persona, no tiene precio. Los pasos de cebra eran unas piedras más elevadas que la calle por donde pasaba la gente, ya que la ciudad se inundaba continuamente. Al lado de estas piedras, todavía se pueden observar los surcos que dejaban los carros tirados por burros que circulaban por allí.

Pudimos ver también varios cuerpos de personas y hasta de un perro en la posición que quedaron antes de morir, muchísimas vasijas y otros utensilios propios de la época que se recuperaron en las excavaciones.

Hay algo que nos dejó un poco inquietos y es que parece ser que sobre el 2013-2014, el Vesubio puede entrar de nuevo en erupción, ya que según los vulcánologos que lo estudian diariamente, la lava está muy cerca de la superficie. El Gobierno italiano da dinero a las familias que viven cerca para que abandonen sus casas, pero la mayoría no quieren dejar su casa.

Por otra parte, ayer fue el cóctel de gala con el capitán. A las 19 horas haces una cola interminable para la foto con él, luego entras en el teatro y esperas otro tanto, hasta que llega el capitán y te presenta a los superiores de todas las secciones que hacen posible que esto funcione correctamente. Si lo llego a saber, paso del cóctel y me voy directamente a cenar.

Ayer el espectáculo se llamó Carrusel Italiano. Estuvo muy bien, con varias canciones italianas muy bien interpretadas y con un pianista que hizo varios solos.

Hoy toca Cagliari, son las 10 de la mañana y nos vamos a desayunar. A las 13.45 nos vamos a ver las ruinas de Nora.

👉 Ver Etapa: Día 5: Nápoles (Pompeya) ⏫ Volver arriba Compartir: