Vuelo PLM 1101 Madrid-Atenas. Todo se desarrolló sin ningún tipo de contratiempos. Salimos a la hora exacta y llegamos incluso con un poco de anticipación en algo menos de tres horas. El avión, un Jumbo 747-400. No hubo necesidad de recoger las maletas puesto que las llevaban directamente al camarote, así que subimos al autobús y nos llevaron al barco. El trayecto, una hora. Antes de subir hicimos el registro de entrada, entregamos los pasaportes y nos dieron la tarjeta de embarque, que serviría para todo, llave del camarote, para entrar y salir del barco, para pagar cualquier gasto que hicieras en el barco, etc. Previamente había que facilitar una tarjeta de CREDITO (no de DEBITO) donde cargar los gastos que fueran surgiendo a bordo, o bien hacer un depósito en metálico; a elegir. Más práctico lo de la tarjeta de crédito, pues con el dinero tendrías que estar más pendiente de lo que gastabas para reponerlo y luego el último día hacer la consabida cola…
Una vez en el barco. una persona de la tripulación nos acompañó al camarote y nos indicó que si teníamos ganas de comer lo podíamos hacer en la cubierta 11, que es donde está el buffet, cosa que hicimos inmediatamente… El resto del tiempo hasta la hora de la cena (en nuestro caso las 10,15, pues habíamos pedido el segundo turno), tiempo libre para familiarizarnos con el barco. A las 9,15 teníamos el primer espectáculo en el teatro. En líneas generales, y sin querer ser muy exquisitos, los espectáculos estuvieron aceptablemente bien. Un par de buenos cantantes, chica y chico brasileños; un ballet bastante decente compuesto por 8 personas, 4 chicas y 4 chicas; un mago aceptable con funciones de gracioso, y el presentador de todo esto. Como cosa llamativa en el teatro las butacas tienen delante unas pequeñas mesas que te permiten, antes de que empiece el espectáculo, que los camareros te traigan lo que quieras beber; una vez iniciado ya no sirven más, lo que no impide que si quieres te lo traigas tú del bar más próximo. Al acabar el espectáculo, la cena. En la tarjeta que nos facilitaron antes de embarcar venía asignado el turno de cena y la mesa, que sería la misma durante toda la travesía. La nuestra era para 6 personas, un matrimonio joven, de unos 30 años, otro matrimonio de nuestra “quinta”, de “taitantos”; con ambos congeniamos muy bien y todo resultó muy agradable. Sólo una pega: la mesa estaba situado en un paso muy estrecho por lo que todos tropezaban con mi silla… La comida del restaurante estuvo siempre bien, dentro de unos límites razonables. Tenía 4 platos para elegir dentro de cada grupo: entrantes, primeros, principales y postres, incluso platos vegetarianos y postres sin azúcar. El servicio por parte de los camareros, excelente. Después de esta larga exposición ya no volveré a hablar sobre este tema.
Navegación rumbo a Alejandría. Naturalmente todo el día en el barco. Por la mañana tuvimos el simulacro de emergencia, luego la explicación del tema de las excursiones y por la tarde el control de pasaportes por los funcionarios de aduanas de Egipto y de Israel. Los de Egipto se limitaron a ponernos el sello en el pasaporte, pero los de Israel, mucho más meticulosos, nos hicieron pasar uno por uno delante de ellos para comprobar que éramos los que figurábamos en la foto, nos tomaron nota del número de camarote y de momento nada más, pues el visado de entrada nos lo dieron la noche anterior a la llegada al puerto de Ashdod. Esto supuso unas colas interminables que duraron más de 4 horas, desesperante; aunque nos iban llamando por cubiertas las colas fueron eternas. Podéis haceros a la idea de que hay que hacer cola para todo; en mi opinión creo que hay bastante desorganización: yo he ido en cruceros con el doble de pasajeros que éste y ni por asomo se producían estas enormes colas. El resto del día cada uno lo pasó como pudo, en la piscina, tumbados en las hamacas tomando el sol, leyendo o recorriendo los diferentes bares y reponiendo líquidos sin ningún tipo de limitación.
Nosotros, que ya tenemos una cierta edad, nos apuntamos a la excursión del barco por pura comodidad. Por cierto, hubo mucha demanda y tuvieron que ampliar el número de autobuses y aun así algunos no pudieron hacerla. En líneas generales, a mí me pareció bien: la guía, una muchacha egipcia, nos explicó todo muy bien y era muy agradable.
Visitamos en primer lugar los jardines y el palacio de Montaza, residencia de los antiguos reyes, el último Faruk, hasta que Nasser se hizo con el poder.
Luego fuimos al Museo Nacional de Arqueología, aceptable.
A continuación nos llevaron a las catacumbas de Shawkafa, para mi gusto poco interesantes dado su absoluto estado de abandono: con decir que al llegar a la planta más baja para pasar había unos tablones que estaban sueltos y mi esposa, como muchos otros, casi se pega un trastazo.
Después de esto fuimos a comer; el restaurante me sorprendió por su limpieza y la calidad del servicio, cubiertos y platos muy elegantes. La comida, sencilla: una crema (no recuerdo de qué), entrecot de carne de vaca o pescado y de postre dulces típicos, y un surtido de pan muy variado y muy rico, también café o té; para beber agua mineral, si querías podías pedir vino o cerveza, previo pago de su importe. En resumen, bien.
Por la tarde nos llevaron a la Biblioteca, que es una maravilla: es enorme con una luminosidad extraordinaria y dotada de todos los adelantos más modernos. Contrasta con el resto de la ciudad que aun en las calles principales tiene un estado de abandono espectacular.
Luego fuimos a la fortaleza, donde antiguamente estuvo el célebre Faro, y por último visitamos la Mezquita de El Mursi (el Murciano, pues era de allí, de Murcia), preciosa.
Un poco de tiempo libre para tomar “contacto” con los vendedores callejeros y regreso al barco.
Si la excursión la haces por tu cuenta no hay ningún problema: a la salida del barco, fuera de la estación marítima hay taxis, con los que tendrás que negociar, tú decides si te fías de ellos para que te hagan un recorrido semejante al de la excursión y te vayan esperando mientras haces las visitas; por supuesto dejar muy claro el precio antes de salir, a ser posible por escrito, y no soltar un euro hasta que os dejen en el puerto. Al hacerlo así puedes ahorrar unos pocos euros, pero claro no tendrás guía que vaya explicando nada de lo que visites y tendrás que buscar dónde comer, pues la excursión dura todo el día. Es cuestión de gustos. Respecto a la moneda: para los taxis y las compras se puede pagar en euros y en las tiendas también con tarjeta; para las visitas hay que pagar en moneda local, lo que te obligará a cambiar en algún banco del recorrido.
oreto nunca habia oido nada de el tour de este crucero y la verdad que tiene muy buenas escalas y me parecio muy interesante. Gracias por compartirlo,te doy mis estrellas.
Si quieres tienes la posibilidad de pinchando el icono de la montañita subir fotos si le pones un enlace
Estoy encantado de haberte sido útil con mi relato, ésa era mi intención.
Respecto de las fotografías, he intentado incluirlas por todos los medios a mi alcance, pero no lo he conseguido.
¿Podrías ampliarme un poco el método que me dices para hacerlo, pues no sé cuál es el icono de la montañita? Gracias
Foro Cruceros por el Mediterráneo: Cruceros por el Mediterraneo: España, Italia, Francia, Monaco, Grecia, Islas Griegas, Turquía, Croacia. Excursiones, barco, escalas, búsqueda de compañeros, navieras, salidas, puertos.
Hola
Vamos de crucero en Junio por las Islas griegas,es el primer crucero que realizamos y me gustaria que me dierais algun consejo sobre todo sobre las excursiones,noches tematicas,tema de bebidas y que podemos llevar.Salimos de Civitavella y hacemos escalas en Siracusa,Malta,mikonos y Santorini,vamos con MSC.
Hola Tartaro, fusiono tu mensaje al hilo de Excursiones que tal como te ha indicado Ángeles es el adecuado.
Lee un poco este hilo, tiene muchísima información que hemos ido haciendo entre todos
Todo se puede hacer por libre, sin problema, también tienes hilos de puertos con información más concreta