Sovereign 19 Mayo 2012 ✏️ Blogs de Mediterráneo

Domingo 20 de Mayo

Este día es de navegación y luego de comentar con personal del barco y tras la experiencia propia, es preferible que sea al revés el recorrido. Es decir Mónaco primero y la jornada de navegación la última. Los motivos por parte de la tripulación que los clientes ya estamos más acostumbrados al barco y no damos tanto por saco. Y los motivos nuestros que aprovechas esa última jornada para descanso y relax.

En fin, continuando este pequeño diario, el domingo se presenta despertando con ilusión, después de la primera noche navegando, y acudiendo a la cubierta 11, para desayunar en el bufet. Ya no voy a decir nada de la educación de la gente, que voy a parecer un cascarrabias, pero uno va aprendiendo con el tiempo el comportamiento humano y con un poco de observación en este día seguro que ya os pasa como a mi y ya sabéis por donde cojean los demás, y es fácil coger la comida y acomodarse en un sitio para desayunar tranquilo.

Posteriormente para las personas que como yo son creyentes y quieren acudir al servicio religioso, hay un sacerdote en el barco (por cierto todo un chaval de casi 90 años y se maneja por el barco con una soltura envidiable) Aunque estaba anunciado en la cubierta 7 en la sala de exposiciones, se traslado el oficio a la discoteca Zoom, en la cubierta 8.
Luego todo un día por delante para intentar exprimir el barco. Aunque en mi caso el tiempo no acompañaba y eso hace que la gente se fuera hacía los bares y los colapsara. Ya que la piscina y cubiertas exteriores no estaban como para estar allí.

Aún así hay que decir una mención especial al equipo de animación, ya que se exprimen para en estos casos poder hacer más ameno el tiempo que por razones metereológicas no se puede aprovechar al aire libre.

Como no, yo me hice una rutina que pasaba por ir a ver a mi sonrisa preferida del Café San Marco y no seáis mal pensados, que a lo que iba es a tomar café, el mejor del barco (bueno y alegrarme la vista también)

El Spinnaker es un lugar en el que se está también muy bien, ya que tiene ventanales amplios, con lo que puedes estar tomando un café, copa, coktail, cerveza o lo que uno guste, charlando y observando el mar. Que en mi caso me gustaba bastante por la tranquilidad que infunde. Y aprovecho para indicar que la bebida es óptima. Y tanto las bebidas alcohólicas como lo demás es igual que cualquier otro lugar y aquí no te mienten. En otros lugares… en fin quien no ha ido a un bar ha pedido una copa de algo concreto y le han cascado garrafón, con alevosía y maldad jejeje. Aquí sabes lo que hay y está bueno. En cuanto al refresco, y lo dice un ex-adicto a la cocacola (alguien que tomaba casi dos litros de cocacola al día y era capaz de reconocer con los ojos tapados una cocacola de lata, de otra de grifo, de botella de plástico, de cristal, de dos litros, de litro, light o zero y sobre todo distinguirla de la Pepsi y otras marcas) pues lo que decía, creo que estoy más que indicado para decir que efectivamente es un jarabe que no es cocacola, pero es bebible y no está mala. Y si la mezclas con algo pues no hay tanta diferencia, mi nota al refresco de cola, un 5.5

Antes que me olvide, si tengo una crítica constructiva al zumo de naranja del desayuno en el bufet. Ummm no se si existe todavía, pero en mi época había una cosa llamada tang, pues el sabor es parecido, más aguado, pero parecido. Así que de zumo de naranja nada de nada.

En este día el espectáculo era a las 21:00 para el segundo turno de cena, pero antes a las 19:45 sesión de fotos, para los que queríamos acudir con el Capitán (muy joven por cierto, el Sr. Augusto Neto) Posteriormente según te hacías las fotos te daban una copita para brindar y pasaban algo de picar. Todos en el teatro y cuando acababan de hacerse las fotos era cuando empezaba la presentación de todos los Oficiales del Buque. Presentado por una gran maestra de ceremonias, Marta Rossi. La verdad es que sorprende ver la cantidad de nacionalidades diferentes que hay en la tripulación y que la hace parecer una autentica torre de Babel, pero que funciona a las mil maravillas.

Después del brindis, al Restaurante a cenar. (la gran mayoría de la gente va vestida de semi gala, pero los hay que van con vaqueros) Así que para gustos los colores. Aunque para mi gusto, y como opinión personal. Ya que la cena está considerada de gala, y el Capitán y sus Oficiales están vestidos con uniforme de gala y el personal femenino como por ejemplo Marta Rossi, la Directora del Entretenimiento y la International Hostess: Anna Riba, estaban vestidas con elegantes vestidos de noche. Que va a hacer uno??? Desentonar? Pues para mi gusto lo mejor es acudir como manda la tradición.

Y como me lio tanto a hablar, en este caso a escribir, no he comentado nada de la actuación, que me encantó y me hizo recordar el niño que llevo dentro y tal y como dice Jorge Moreno, el Mago. La vida es una ilusión y que bonito es que te hagan sentir esa ilusión de cuando eras niño. Hay que reconocer que es muy bueno (gran maestro ha tenido en el Sr. Tamariz) Y todo un profesional, ya que se lesionó la rodilla en el espectáculo y nadie se dio cuenta, salvo al verle cojear al día siguiente por el barco. Recupérate pronto Mago.

---

Lunes 21 de Mayo

Me despierto con ganas de la primera excursión y amanecemos ya en el continente Africano. Y por fin aparece el sol, así que parece que las condiciones ayudan. Es una maravilla levantarse un poco antes y estar en la terraza viendo acercarse el barco a tierra mientras va amaneciendo. Algo espectacular, lo recomiendo, aunque haya que madrugar un poco.

Desayuno prontito en la cubierta 11 y no preocupación por el horario ya que se sigue la hora del barco (no cambia) y no hay que preocuparse por el despertador del tlf, ya que con anterioridad le he desactivado el cambio automático de hora.

Así que mi teléfono sigue con la hora de España y por consiguiente la del barco y me levanto a la hora correspondiente. Si es verdad que alguien ha podido levantarse confundido con la hora de Túnez.

Por cierto, no hay problema en sacar algo de comida, así que sin pasarse, claro está. Unos bollitos rellenos y unos panecillos con algo de fiambre, bien envueltos y a la bolsa. Por si durante la excursión hay algo de hambre y o bien no se encuentra un bar barato (recordemos que hay crisis

Como esta excursión la hacemos con una empresa externa, en este caso es T.I. hay que estar en la cubierta 3, donde se exponen las fotos, en el momento que llamen al grupo. Llaman por el número que aparece en la tarjeta de embarque, que es nuestra identificación, viene nuestro nombre, el restaurante con turno y mesa asignado. Y el número, en mi caso el 10, con el que tenemos asignado el desembarque y las emergencias.

Toca una pequeña espera, no mucha y se pasa con agrado charlando.

Nuestra conocida voz (se os hará familiar ya lo veréis) de Marta Rossi, irá anunciando grupos para ir a desembarcar, y por fin suena: “Su atención por favor, los grupos 10, 11 y 12 acudan a la cubierta 3” lo de su atención por favor, es algo que me ha encantado

Así que rápido bajamos las escaleras y desembarcamos del Sovereign por primera vez y nos encontramos con el muelle, unos cuantos tunecinos con unos camellos para darte una vuelta o hacerte unas fotos y otros con unos halcones para lo mismo. Ya se sabe que el turismo se supone que trae dinero… (he dicho se supone ya que hay mucha foto cautiva, acercándose con disimulo o descaro y haciendo foto sin dar algo al hombre)

Llegamos al edificio de la terminal y una pequeña cola de unos 5 min, para que las autoridades locales revisen el pasaporte y un documento que nos habían dado en el barco ya relleno y que sólo había que revisar si todo estaba bien puesto y añadir obligatoriamente la profesión. La verdad es que a mi ni miraron estaban charlando y como si fuera una maquina, sellito de rigor, parten el papel y se quedan con una parte y ale el siguiente.

Una vez fuera de la terminal, se ven taxis y algo desorientados te pones a andar deduciendo que los autobuses están al fondo, la caminata es cortita, unas dos manzanas y a la derecha un parquin con los bus. Y los señores de las empresas con carteles para distinguir la gente de las diferentes excursiones. Toman lista y ale al bus.

Por cierto todo un detalle de su organización fue encontrar una botella de agua fresquita en cada asiento del bus. Se agradece el detalle (creo que era agua ya que era transparente liquido y lo parecía… jejeje lo digo por que la etiqueta escrita en árabe no me quedaba claro)


En estas excursiones hay que tener en cuenta que la suerte, juega un factor importante para el desarrollo, ya que depende quien te toque en el bus, gente amable, simpática, puntual, que se pierda etc va a depender el desarrollo de todo (ojo, esto no lo digo por la gente que me toco, que todos era fabulosos y no digo lo de la tardanza por la gente de Finisterre, que les esperamos con agrado jejeje) aunque si había una señora que le había hecho ganarse el cielo a su marido. En fin a otra cosa

Aprovecho para indicar que hubo una pareja gallega encantadora y que hizo el crucero muy agradable, muchas gracias por todo, sois fabulosos.

El guía, era bastante atento y educado y se le veía muy puesto en lo suyo. Algo de tráfico en la entrada a Túnez, con lo que retrasa bastante el plan del día. Estas cosas las tendrían que tener en cuenta para ver posibles itinerarios alternativos o buscar otras soluciones ya que se pierde mucho tiempo, y eso en una excursión de un crucero es algo vital.

Nos llevaron hasta el zoco y ahí nos indicaron que mucho cuidado, que regatees, en fin normas básicas, y que no nos alejáramos de una calle en concreto para no perdernos ya que es un laberinto de calles. Y ale, libertad para pasear, comprar, hacer fotos etc… como los turistas llevamos en la frente un cartel de soy turista jejeje en mi caso lo llevo en toda la calva. Pues todos los de los puestos se tiran a por ti para enseñarte sus productos y que compres. Hay alguna cosilla que está bien y aunque la mayoría que comprábamos nos marchábamos con la idea que hemos regateado y sacado un buen precio… no hay nada como mirar al vendedor verle la cara de: si tú crees que te lo llevas barato, pero te lo has llevado al precio que yo quería y sigo ganando dinero. Pero lo importante es que tanto vendedor como comprador nos quedamos contentos, pues en ese caso a otra cosa mariposa.

Luego al bus de nuevo para ir a Cartago y antes de subir un encuentro con algunos miembros del foro que me reconocieron y no se como lo hicieron, acaso mi camiseta del Real Madrid con el nombre detrás “calvito” fue una pista esencial? Jejeje

De nuevo algo de atasco para salir de la ciudad y una pequeña decepción ya que las ruinas de Cartago, son muy ruinosas jejeje, me explico, mal conservadas, pocas y encima no te bajas del bus para una mísera foto (quizás un bus descapotable es una opción a tener en cuenta)

Si paramos al pie del antiguo puerto de Cartago y apenas se ve nada ya que hay una lagunita y las ruinas enfrente. Para colmo la calle es estrecha y nuestro bus en medio, con lo que enseguida se formó atasco y nos marchamos rápido.

De ahí nos llevaron al pueblo de Sidi Bou Said, un bonito pueblo costero muy colorido, todo está en blanco y azul, las casas son blancas y sus puertas, ventanas y rejas de color azul claro. Recuerda a pueblecitos andaluces. Y aparte de dar una vuelta hacer fotos y ver unas vistas maravillosas de la bahía. El punto fuerte es que hay muchos puestos para venderte más cosas y estos son algo más agresivos, en el sentido que quieren venderte algo a toda costa, ojo sin problemas, que quizás la palabra agresivo ha sonado mal. Yo aquí casi hago negocio ya que les gustó mi camiseta del Madrid con mi nombre y casi se la vendo, pero me regateo y yo le dije que en España no se regatea que 200 euros o nada jejeje

Por cierto importante, no metáis la pata como yo y a protegerse con cremas solares que luego me pasé todo el viaje con la calva ardiendo.

En el recorrido de vuelta vemos un cementerio americano, de combatientes de la I Guerra Mundial y unos depósitos de agua de los romanos, impresionantes de verdad, pero lo suyo hubiera sido parar bajar, ver in situ su grandeza y unas fotitos… pero ahí queda el comentario para que se pueda mejorar en un futuro.
Llegamos de nuevo al puerto y despedimos con un aplauso al guía que se lo ha currado.

De nuevo andando al barco y hay cambio de impresiones con la gente de la excursión del barco o de otras empresas para
ver cual ha sido mejor, que te han enseñado a ti y esas cosas. Parecido todo ya que la del barco si paró en unas ruinas de Cartago, y eran dos piedras mal contadas.

Una vez en el barco, lo más indicado era ir en el día de hoy al Restaurante Duero, de la cubierta 4 ya que tenían una sorpresa: Cocido Madrileño, ufff como sienta el cocidito, pero luego necesitas siesta. A pesar que no está cocido con agua del Canal de Isabel II (quien vive en Madrid, sabe que el agua madrileña es de lo mejor) el cocido sabe bien y entra de maravilla.

Y luego se supone que a darse una ducha, cambiarte y prepararse para el resto de la jornada, pero hay algo que no puede faltar y es mi visita a mi destino preferido, el Café San Marco, así que evito en lo que puedo al resto de camareros que amablemente me dicen si quiero tomar algo y cuando aparece la sonrisa del barco, entonces si quiero tomar un café (he de reconocer que para no hacerles un feo, alguna vez si les pedía algo al resto de camareros, pero me lo tomaba rápido para pedir otra vez jejeje) Me habré vuelto un adolescente a mi edad? La edad del pavo la dejé a finales de los 80 jejeje

Una ducha y a prepararse para el espectáculo de hoy: Parque del terror con el ballet de Adriana Locilento, lo hacen de maravilla, muy buenos y no he mencionado a los cantantes de la Banda Jet Set de Brasil, la voz de Camila es espectacular y Ricky lo hace bien también.

De ahí a cenar, haciendo una breve parada al Café San Marco o al Spinnaker (como elegir uno u otro? Fácil)
Y al Guadiana, cubierta 3 para cenar con nuestros queridos Ramses y Florentino y sus detalles, sabiendo ya que bebemos para tenerlo preparado y varias sorpresas más, para hacernos más agradable todo. Al terminar una copita tranquila en el Spinnaker y luego la gente de la mesa donde cenábamos, nos fuimos al 360º cubierta 14, un sitio que está muy bien con música en vivo (mejor de día por las vistas) y en el que no sabíamos si era cuestión de las copas, mojitos, piñas coladas o es que el barco se movía mucho esa noche.

De ahí a descansar

P.D. Impresión de la excursión: parece que interesa más ir a sitios comerciales para que nos dejemos el dinero, que enseñar lugares. Mucho tiempo para compras. De todas maneras le doy un aprobado a la excursión

---

Martes 22 de Mayo

Hoy tengo ganas de levantarme temprano y ver la llegada a Italia, en concreto a Nápoles y es una gozada ver amanecer viendo como te acercas con tranquilidad a la costa y sobre todo ver Capri al fondo y el Vesubio. A primera hora si se veía algo, pero con el pasar de las horas las nubes no dejaban ver todo su esplendor, belleza y grandiosidad, con un toque de respeto y miedo (por mucho que se empeñara en repetir la fabulosa guía de este día, en repetir que no tienen miedo al volcán y viven tranquilos. Que los especialistas dicen que se puede predecir con un mes de antelación cualquier actividad) a que le de a la Madre Tierra por rugir con fuerza

Con todo esto, para no perder las buenas costumbres, nuestros compañeros de viaje del “Norwegian Epic”, ya están en puerto mientras nosotros vamos realizando las maniobras de entrada a puerto, muy bonito por cierto y un preciosa estatua religiosa al lado de un pequeño faro. Mientras vamos atracando en el puerto de Nápoles

Una pequeña recomendación para curiosos, es bonito ver la tv del camarote en el canal, donde sale el mapa con la situación del barco y ver la cámara de proa viendo el horizonte.


Aunque se puede desayunar en el restaurante Duero de la Cubierta 4, la costumbre hace que vayamos a la Cubierta 11, al Bufet, más que nada por las vistas y luego poder a un paso estar asomado viendo el paisaje.

Una muestra de los desayunos, hay muchas cosas donde elegir, pero como para gustos los colores, pues ese día me apetecía esto.


En Italia, la legislación actual, no permite que entremos con comida, así que el tema de poder hacer unos bocatas o pillar algo para la excursión, es un riesgo que cada cual tiene que asumir y ver que hace. La opción que tomamos fue evitar problemas y no llevar nada, aunque luego en la aduana pasamos sin que miraran ninguna bolsa.

El desembarco resulta bastante rápido, en este caso los primeros en salir son los grupos 4,5 y 6 (por supuesto me refiero a las excursiones de agencias ajenas a Pullmantur) Una vez pasada la aduana, el edificio del Puerto es bastante grande y con tiendas. Se bajan unas escaleras y nos encontramos en el parking, con todos los autobuses tanto de las agencias, como de la naviera.

En este caso, y como en Túnez, la excursión la realizamos con T.I. en esta ocasión se llena antes el bus para que podamos salir, ya que no hay que andar como en Túnez.

Se presenta nuestra guía, que es fabulosa, muy buena y simpática. Se llama Fiorella y se la reconoce rápido con su paraguas al viento para que no nos perdamos. Desde aquí hago un llamamiento a sus jefes, para que a pesar de la crisis le compren algo para que los excursionistas no nos perdamos y que no tenga que llevar un paraguas (aunque luego visto el tiempo que nos hizo, era práctico)

Un aviso para todos, el uso de todos los baños públicos en Italia es previo pago, normalmente 50 céntimos ó 60 ct. Depende del sitio. Así que llevar algo de cambio suelto por si acaso.

Una vez que el autobús sale de las instalaciones del puerto, es algo complicado, por las obras y lo intrincado de las calles. Por fin después de un buen rato se sale a las calles de Nápoles y el recorrido se hace algo largo y tedioso por los atascos y las obras en muchas calles (parece Madrid, todo el asfalto levantado jejeje)

Una vez hemos visto monumentos que merecen mucho la pena, el bus se encamina de nuevo a paso lento hacía el puerto y se dispone a entrar de nuevo a las instalaciones portuarias, ante la sorpresa de todos. Pero rápidamente por megafonía, Fiorella nos dice que la autopista para ir a Pompeya, tiene el acceso desde el puerto. Algo raro, pero así tienen montado el tráfico allí. Se pierde mucho tiempo de la excursión con estas vicisitudes, pero es lo que hay.


Una vez ya estamos saliendo de Nápoles hay algo que para una ciudad que vive del turismo les hace perder puntos. Y es que hay un poblado enorme de chabolas y vertederos de suciedad y escombros en toda la salida de la ciudad. Algo no muy agradable de ver y que al estar tan cerca del puerto, hace desconfiar a algunos para luego dar una vuelta por la ciudad. Eso sí hay algo que causa gracia y asombro a todos los que vamos en el bus.¿ Que tienen todos los tejados de esas chabolas? Pues casi, el 90% tienen antena parabólica instalada.

Como he mencionado antes, a la llegada a Pompeya, nuestra guía nos menciona la tranquilidad con la que viven y nos encamina hacía la entrada a las ruinas de esa histórica y preciosa ciudad, previo paso a la recogida de un receptor que hay que llevar colgado y un auricular. Un eurito por persona (va muy bien pero si te despistas un poco de la guía, ya que constantemente vas escuchando sus explicaciones y si notas que se va la cobertura es que te has perdido o entretenido demasiado jejeje). Una pequeña cola de unos 5 minutos por algún otro grupo y compramos la entrada que son 11€ por persona, no suelen tener cambio y no admiten tarjeta.

El recorrido por las ruinas de Pompeya se hace delicioso y va de sorpresa en sorpresa, ya que cada piedra, cada muro, cada pintura tiene una gran historia que nos explica con una claridad tan amena Fiorella, que hace que la excursión a pesar de ser larga en el tiempo no se hace pesada.

Hay muchas cosas que ver y no voy a desvelar nada, que es mucho más grato sorprenderse uno mismo allí, con las historias. Pero recomiendo no perderse los puestos de comida en la calle (si, ya existían los locales de comida rápida), el prostíbulo (impresiona por al organización que tenía) ahhh y no está actualmente en servicio jejeje. Y los baños con sus vestuarios.


Impresiona mucho ver como murieron y ver los restos, viendo como muchos estaban acurrucados y tapándose la boca y nariz para no ahogarse.

Una vez hemos salido, un rato de tiempo libre para tomar algo y comprar. Nos invitan a un chupito de Limoncello y un pequeño taller donde un anciano muy simpático (creo recordar que tenía 93 años al charlar con el) hace maravillas con sus manos, puliendo conchas de mar.

Justo cuando nos teníamos que montar en el autobús, una tormenta tremenda nos sorprende y tenemos que esperar a cubierto, pero como no para, al final tenemos que ir al bus como podemos. Al final a Fiorella le sirvió el paraguas jejeje.
Camino de regreso al puerto y vamos meditando en si comer en el barco, o ir a dar una vuelta y comer en Nápoles.
Una vez visto que con la lluvia, la opción más recomendable es el barco, nos dirigimos rápido a embarcar, se realiza sin ningún problema tanto el paso de la aduana como embarcar y desembarcar las veces que quieras.

Lo mejor para comer, resulta acudir al bufet, en la cubierta 11


Así que, una vez la comida ya reposa en el estómago, lo mejor es por supuesto un delicioso café. Luego aprovechamos para salir un momento a las tiendas del puerto para comprar alguna cosilla.

Recomiendo ver como se sale del puerto, relajado y pudiendo ver como en este caso un arco iris. Se supone que al final de un arco iris hay un tesoro, en este caso el tesoro estaba en el Café San Marco.

El espectáculo de hoy es Viva Brasil, un gran espectáculo de danza y con las maravillosas voces de la Banda Jet Set, y hay que ir vestido de blanco tropical.

En la cena, los camareros hacen que nos lo pasemos muy bien con sorpresas y bailes. Y para terminar una copita en el Spinnaker.

---