
Rojo de las cabinas, los autobuses, los buzones… Azul de las banderas británicas distribuidas por toda la ciudad. Gris del cielo y la carretera. Y es el gris el color con el que yo definiría a esta ciudad, y es que es difícil darle otro color a una ciudad en la que solo sale el sol 2 meses al año, y en la que lo más probable es que no podamos ver otra cosa que no sean nubes… De hecho, mi novia y yo llegamos a la capital británica mentalizados de que nos iba a llover todos los días… por suerte, no fue así.
Hotel y transportes
Hicimos este viaje del 11 al 17 de abril del año pasado, y fue el viaje “oficial” de ese año. Miramos precios por Internet, por agencias, por todos lados… y al final nos encontramos mejores precios en una agencia de mi pueblo que por Trivago…
1 – Vuelo y traslado al centro
Cogimos un vuelo de Easyjet desde el aeropuerto de Lisboa, que salió una hora tarde porque una mujer se puso enferma en el avión justo antes de despegar, y tuvo que venir el médico, bajarla del avión, sacar su equipaje de la bodega… creí que no saldríamos nunca! El caso es que dos horas después aterrizamos en Luton, donde cogimos un autobús verde por 13₤, que nos dejó en la estación Victoria, muy cerquita de nuestro hotel. La vuelta, desde Heathrow, la haríamos con la portuguesa TAP. A este aeropuerto se puede llegar en metro. El vuelo nos costó unos 170€ a cada uno, muy caro para lo que se puede conseguir…
2 – Hotel
Escogimos un hotel del que luego nos arrepentiríamos porque parecía de cámara oculta (aunque eso dio lugar a algunas risas), llamado Victoria Blair & Tudor Inn, situado en Warwick Way, y eso es lo único bueno que tenía el “hotel”, que en 5 minutos a pie estabas en Westminster. Nos costaron 475€ las 6 noches, lo que no era demasiado caro para ser Londres y estar casi en el centro. Por lo menos tenía desayuno incluido, que no es que fuera muy abundante, y el recepcionista era bastante agradable.
3 – Transporte público
Gracias a estar tan cerca del centro, apenas tuvimos que hacer uso del transporte público, y de hecho, solo cogimos el metro dos veces, una para ir hasta Greenwich y otra para volver al aeropuerto (nuestro vuelo de vuelta salía de Heathrow). Para el día de Greenwich compramos una tarjeta para un día que nos costó 6.60₤. Para Heathrow hay que comprar un billete especial por 5₤, siempre que se salga de la estación Victoria. El metro es exageradamente caro, y por ello decidimos hacer los recorridos a pie o en autobús. Los billetes de autobús costaban 2,20₤, y tenían su gracia porque ibas viendo la ciudad por el camino, aunque eso sí, allá donde podíamos íbamos a pie (y eso le pasaría factura a mi chica, como siempre que vamos de viaje, jeje…). Aviso importante: coger un autobús en Victoria es un caos, porque las paradas van por letras y en Victoria hay como 15 letras y 15 paradas de autobuses…
Aquí os dejo con el mapa del metro de Londres
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Hotel y transportes
Hicimos este viaje del 11 al 17 de abril del año pasado, y fue el viaje “oficial” de ese año. Miramos precios por Internet, por agencias, por todos lados… y al final nos encontramos mejores precios en una agencia de mi pueblo que por Trivago…
1 – Vuelo y traslado al centro
Cogimos un vuelo de Easyjet desde el aeropuerto de Lisboa, que salió una hora tarde porque una mujer se puso enferma en el avión justo antes de despegar, y tuvo que venir el médico, bajarla del avión, sacar su equipaje de la bodega… creí que no saldríamos nunca! El caso es que dos horas después aterrizamos en Luton, donde cogimos un autobús verde por 13₤, que nos dejó en la estación Victoria, muy cerquita de nuestro hotel. La vuelta, desde Heathrow, la haríamos con la portuguesa TAP. A este aeropuerto se puede llegar en metro. El vuelo nos costó unos 170€ a cada uno, muy caro para lo que se puede conseguir…
2 – Hotel
Escogimos un hotel del que luego nos arrepentiríamos porque parecía de cámara oculta (aunque eso dio lugar a algunas risas), llamado Victoria Blair & Tudor Inn, situado en Warwick Way, y eso es lo único bueno que tenía el “hotel”, que en 5 minutos a pie estabas en Westminster. Nos costaron 475€ las 6 noches, lo que no era demasiado caro para ser Londres y estar casi en el centro. Por lo menos tenía desayuno incluido, que no es que fuera muy abundante, y el recepcionista era bastante agradable.
3 – Transporte público
Gracias a estar tan cerca del centro, apenas tuvimos que hacer uso del transporte público, y de hecho, solo cogimos el metro dos veces, una para ir hasta Greenwich y otra para volver al aeropuerto (nuestro vuelo de vuelta salía de Heathrow). Para el día de Greenwich compramos una tarjeta para un día que nos costó 6.60₤. Para Heathrow hay que comprar un billete especial por 5₤, siempre que se salga de la estación Victoria. El metro es exageradamente caro, y por ello decidimos hacer los recorridos a pie o en autobús. Los billetes de autobús costaban 2,20₤, y tenían su gracia porque ibas viendo la ciudad por el camino, aunque eso sí, allá donde podíamos íbamos a pie (y eso le pasaría factura a mi chica, como siempre que vamos de viaje, jeje…). Aviso importante: coger un autobús en Victoria es un caos, porque las paradas van por letras y en Victoria hay como 15 letras y 15 paradas de autobuses…
Aquí os dejo con el mapa del metro de Londres
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[size=18]4 – Comida y bebida
La mayoría de los días comíamos de bocadillo en la calle, pues aprovechamos que no hacía demasiado frío y no llovía. Desde luego esto era lo más económico. El resto de las veces, pues entrábamos en sitios de comida rápida. Uno muy peculiar son los chinos que te venden las típicas cajas de cartón que puedes llenar hasta con tres platos distintos, por 5₤. En los bares en los que entramos siempre pedíamos pintas de cerveza, con un coste de entre 4₤ y 5₤. Los cafés siempre los tomábamos en algún Starbucks (mi novia es fan) y los precios en los Starbucks son altos. Desde 2₤ el café solo, hasta las 5₤ un café elaborado.
5 – Souvenirs
Como buena ciudad turística, está plagada de puestos y tiendas de recuerdos, por no decir que cada monumento tiene la suya propia. Hay de todo y a todo tipo de precios, aunque eso sí, los precios varían abismos de unos puestos a otros. Mi chica se compró un colgante de un reloj por 5₤, que habíamos visto previamente por 10₤ y por 15₤. Lo de los llaveros es un cachondeo, porque el mismo (el típico del autobús) lo puedes ver por 1₤, 2₤, 3 por 5₤, 6 por 5₤, por 75 p… Los imanes lo mismo, de 1₤ a 4₤… Lo que quiero decir es que no compréis lo primero que veáis… Las tiendas son más caras que los puestos callejeros, que a su vez son más caros cuanto más cerca de un monumento estén.
La mayoría de los días comíamos de bocadillo en la calle, pues aprovechamos que no hacía demasiado frío y no llovía. Desde luego esto era lo más económico. El resto de las veces, pues entrábamos en sitios de comida rápida. Uno muy peculiar son los chinos que te venden las típicas cajas de cartón que puedes llenar hasta con tres platos distintos, por 5₤. En los bares en los que entramos siempre pedíamos pintas de cerveza, con un coste de entre 4₤ y 5₤. Los cafés siempre los tomábamos en algún Starbucks (mi novia es fan) y los precios en los Starbucks son altos. Desde 2₤ el café solo, hasta las 5₤ un café elaborado.
5 – Souvenirs
Como buena ciudad turística, está plagada de puestos y tiendas de recuerdos, por no decir que cada monumento tiene la suya propia. Hay de todo y a todo tipo de precios, aunque eso sí, los precios varían abismos de unos puestos a otros. Mi chica se compró un colgante de un reloj por 5₤, que habíamos visto previamente por 10₤ y por 15₤. Lo de los llaveros es un cachondeo, porque el mismo (el típico del autobús) lo puedes ver por 1₤, 2₤, 3 por 5₤, 6 por 5₤, por 75 p… Los imanes lo mismo, de 1₤ a 4₤… Lo que quiero decir es que no compréis lo primero que veáis… Las tiendas son más caras que los puestos callejeros, que a su vez son más caros cuanto más cerca de un monumento estén.