El avión de Ryanair salió con una hora de retraso
pero curiosamente sólo llegamos media hora tarde al aeropuerto de Gatwick, nerviositos perdíos por el miedo a perder el Southern que habíamos reservado por Internet. Es importante que tengáis en cuenta a la hora de reservarlos que, desde que llega el avión hasta que llegáis a la estación del tren dentro de la terminal sur de Gatwick, es fácil que os lleve una hora perfectamente, contando que no haya demasiada cola en el control de aduanas…
Nosotros habíamos reservado el Southern por Internet, y una vez allí es facilísimo. Según entras en el hall de la estación a mano izquierda se encuentran las máquinas, en las que introduces el localizador de la reserva, la tarjeta de crédito con la que hayas realizado el pago, y listo!
Te sacan 3 billetes por persona, uno de ida, otro de vuelta, y el comprobante del pago, que tienen esta pinta:

Nosotros habíamos reservado el Southern por Internet, y una vez allí es facilísimo. Según entras en el hall de la estación a mano izquierda se encuentran las máquinas, en las que introduces el localizador de la reserva, la tarjeta de crédito con la que hayas realizado el pago, y listo!


Con ellos nos dirigimos al tren, la verdad es que para 35 minutos que dura el viaje, el tren es cómodo, una especie de cercanías un poco más “apañao”, os dejo una foto:

En 35 minutos estábamos en Victoria Station y desde ahí nos fuimos directos al metro (Tube) donde compramos un billete sencillo dado que ese día sólo íbamos a hacer ese viaje. Llegamos a Borough a las 22:45 justo a tiempo para entrar en el Tesco y comprar lo imprescindible para cenar y desayunar al día siguiente. Hicimos el check in y nos subimos a la 6ª planta donde estaba nuestro estudio, el edificio tiene un total de 23 plantas y todas ellas tienen una vista genial de Londres!

Y a descansar que al día siguiente empezaba nuestra ruta londinense.
