Chic@s, ¿qué os voy a decir del VIAJE? Si habéis leído todas las etapas, ya os daréis cuenta de que he repetido hasta la saciedad que ha sido unos de los mejores que hemos hecho hasta ahora. Por supuesto, nos han quedado cosas por hacer o por ver, pero no puedo quejarme porque incluso hubo cosas que no estaban entre los planes previstos y que surgieron sobre la marcha.
Ahora, después de casi dos meses de nuestro regreso y haciendo balance un poco de todo según escribía este diario, puedo concluir varias cosas:
- VUELOS: Lo de volar con Iberia, si os soy sincera, cada vez me gusta menos. Y no es que hayamos tenido ningún problema, al menos en este viaje. Pero si comparamos los trayectos que hicimos con ellos con, por ejemplo, el de American Airlines de San Francisco-Chicago… pues no tiene ni punto de comparación. Respecto a todo: comida, espacio entre asientos, facilidades en ellos, amabilidad de la tripulación,… He tenido la posibilidad de volar con varias compañías de distintos países e Iberia, lamentándolo mucho, no está precisamente entre las mejores. Aunque viviendo en Asturias, creo que no nos va quedar otra que seguir usando sus servicios…
- HOTELES: Creo que no nos equivocamos con ninguno. Desde el modesto motel de Los Angeles hasta el lujo del Bellagio, estuvimos encantados en todos. Yo os los recomiendo 100%.
- COCHE Y GASOLINA: Pues lo mismo que con los hoteles. El servicio que nos prestó “ealquilerdecoches.com” fue perfecto. No tuvimos ningún problema y viendo muchas –pero que muchas- webs de alquiler, ellos siempre fueron los que mejor precio nos dieron en todo momento.
En cuanto a la gasolina, está tirada de precio si lo comparamos con España. Siento no poder poneros el presupuesto final de todo el combustible, pero como sabéis perdí mi agenda donde lo llevaba apuntado y de memoria no me acuerdo lo que gastamos. Eso sí, como consejo, no dejéis nunca el depósito casi vacío (yo con mi coche suelo hacerlo) porque hay sitios en los que hay gasolineras “a porrillo”, pero en otros , como Yosemite o Death Valley, ocurre todo lo contrario. Y creedme, no os gustaría quedaros tirados en medio de esas carreteras que parecen no tener fin.
- COMIDAS y RESTAURANTES: Pues con el presupuesto en este caso me ocurre lo mismo que con la gasolina: perdida la agenda, perdidos los gastos anotados. Lo que sí os digo es que tampoco gastamos tantísimo; más que nada porque hubo muchos días que comíamos en plan picnic, sandwiches, de supermercado… Y casi os diría que fueron los que más. Además, nosotros tenemos “la suerte” de que siempre almorzamos o cenamos con agua (no bebemos vino, ni refrescos, cervezas,…) y ésta es gratis siempre que la pidas del grifo; incluso en muchos sitios te la ponen sin ni siquiera pedirla.
Por cierto, que no llevábamos un “horario de comidas” al uso, como solemos hacer en el día a día, sino que comíamos cuando teníamos hambre, sin preocuparnos de la hora que fuese. Al fin y al cabo ya sabéis que el horario americano difiere muchísimo del español…
En cuanto a los restaurantes, casi todos a los que fuimos, os los recomendaría. He ido hablando de ellos en cada etapa. El único que no nos gustó para nada fue el de Olvera Street en LA (“La golondrina”), pero imagino que eso va en gustos. Uno muy especial es el de Mariposa, “Charles Street Dinner House”, y ¡cómo no! el “Peggy Sue’s”.
- RUTAS: Como ya dije en la presentación del diario, no queríamos estar mucho en carretera, sino disfrutar más de las ciudades, de ahí que no visitásemos ciertos Parques Nacionales que la mayor parte de los forer@s eligen en este tipo de road-trip. Sé que algunos de estos parques merecen muchísimo la pena, pero preferimos dejarlos para otra ocasión y hacer otra ruta distinta. Estuvimos muy conformes con las rutas que al final hicimos (todas planeadas menos la de Mariposa a San Francisco).
Las carreteras a veces se hacen muy pesadas, tanto para el que conduce –en este caso siempre fue Sergio- como para el copiloto; sin embargo otras, como los días de Death Valley y Yosemite, son una gozada por todas las paradas “de obligado cumplimiento”. Yo os recomendaría llevar muy bien planificadas estas rutas y llevar plan B, especialmente si vais en épocas que pueden ser “problemáticas”, por ejemplo durante el comienzo de la temporada de invierno por Tioga Road para llegar a Yosemite.
- LOS ANGELES: Tanto Sergio como yo estamos de acuerdo en algo: las zonas de Hollywood y Beverly Hills fueron las que menos nos gustaron. Con esto no digo que no vayáis: ¡hay que ir! Pero no nos encantó tanto como otros lugares, como fueron por ejemplo el Observatorio Griffith. En este caso, nos quedamos con las ganas de volver a visitarlo durante la noche, para poder usar los telescopios que ponen a disposición de los visitantes para observar las estrellas.
Otra de las cosas que nos quedaron por ver: ir a Venice Beach y ver sus canales. Teníamos pensando hacerlo el último día, pero nos entretuvimos tanto en Universal, que no hubo tiempo. Por cierto, con respecto a este último: a pesar de que no seáis muy fans de los parques de atracciones, yo os recomendaría igual hacer la visita. No tiene nada que ver con cualquier otro en el que yo haya estado.
Y el mismo día de Universal fuimos a los estudios de la Warner: de lo mejor del viaje. Hicimos el “VipTour”, pero creo que si volviésemos a LA haríamos otro de los que ofrecen: el “DeluxeTour”. Eso sí, tendríamos que ahorrar un poquito porque no es precisamente barato…
- LAS VEGAS: He oído y leído opiniones para todos los gustos sobre “la ciudad del pecado”. Yo sigo pensando que es única en el mundo (el que yo he tenido la posibilidad de conocer, claro está): es el patio de recreo para los adultos de todo el mundo. Creo que, al menos, hay que visitarla una vez en la vida.
Las posibilidades con respecto a todo son inmensas: hoteles de todos los precios, restaurantes, atracciones tanto gratuitas como algunas otras realmente caras,…
Y, por supuesto, no podemos olvidarnos que al lado de Vegas está una de las maravillas más increíbles que he visto en mi vida: El Gran Cañón del Colorado. Visita imprescindible sí o sí.
Nosotros, como yo sabéis, era la segunda vez que íbamos a Las Vegas, así que la vivimos de otro modo, sin tantas prisas por ver todos los hoteles como hicimos en nuestro primer viaje y disfrutando más de momentos de relajación. En mi opinión, una mezcla de ambas cosas –visitas y relax- es lo mejor que ofrece Las Vegas.
- DEATH VALLEY y YOSEMITE: Death Valley, imprescindible para ver durante la ruta que se pueda hacer desde Las Vegas. Es algo que hay que ver porque no te imaginas cómo puede ser hasta que estás allí. Eso sí: agua, agua y agua. Llevad muchísima. En nuestro caso igual es porque somos del norte y no estamos acostumbrados a esos calores…
En cuanto a Yosemite, no nos habría importado estar más tiempo allí y quedarnos en alguno de los camp-sites u hoteles que ofrece el parque. Es de película, de verdad. ¡Y eso que estamos acostumbrados a paisajes verdes!
- SAN FRANCISCO: La ciudad nos enamoró y no descartaremos nunca volver a pasar más tiempo allí. Dicen que es la ciudad más europea de USA, pero no se me pareció a ninguna que conozca del viejo continente. Tiene un encanto muy especial y todas los barrios que puedas visitar tienen su encanto.
Os recomiendo dejar el coche allí (a no se que queráis hacer excursiones fuera de la ciudad) y disfrutar del transporte público con el MUNI PASS. También, por qué no, algún paseíto, aunque “las cuestas cuesten”; no vienen mal para hacer algo de ejercicio y endurecer piernas y glúteos… jiji…
En definitiva, vuelvo a insistir que es un viaje para hacer, para vivirlo desde el momento en que comienzas a organizarlo, para saborear cada momento que puede resultar completamente distinto al anterior,… Por eso lo he bautizado como:
EL VIAJE