Empezaba nuestro segundo día en Praga. El primero había sido perfecto! Praga nos estaba encantando, pero hoy aparte de descubrir un pueblecito cercano a Praga, íbamos a saborear la ciudad a nuestro aire, cogidos de la mano y sin planos, nos íbamos a dejar llevar por esas callejuelas checas.
Pero eso iba a ser más tarde, ahora tocaba levantarse, abrir las cortinas, ver que hacía muy buen día, aunque el frío seguía allí, y a turistear!
Íbamos a ir a desayunar, pero pensamos que como era temprano, y la excursión no salía hasta las 11h, íbamos aprovechar que habría poca gente en el Reloj para subir y ver las vistas de Praga desde allí. Seguro que el atardecer es más bonito, en cuánto a color, pero también hay mucha más gente, y arriba no hay mucho espacio. Así que cómo eran las 9h y vimos que no había cola subimos, y muy bien que hicimos! Porque cuando subimos no había mucha gente, pero cuando bajamos ya se estaba empezando a formar cola.
Pagamos la entrada, 120 coronas por persona (unos 4,50€), y subimos. Puedes subir de dos maneras, con ascensor o por escaleras. Yo aconsejo subir en ascensor y bajar por las escaleras.
Subimos en el ascensor y llegamos arriba, no es muy grande la zona donde puedes estar para hacer fotos, y si hay gente tienes que ir detrás de ella esperando. A esa hora no había mucha gente y estuvimos bien.
Os dejo algunas fotos desde la Torre del Reloj. Praga es preciosa, pero es que cuando la ves desde arriba es aún más bonita.







Salimos a desayunar a nuestra cafetería, Coffee Lovers, y hoy nos pedimos dos capucciones y dos focaccia de jamón y queso calentitas! Rico rico!
Todo por 268 coronas – 10€.

Y volvemos a la Plaza Vieja a dar una pequeña vuelta hasta que llega la hora del tour.

Llegamos al punto de encuentro, de nuevo frente a la tienda Cartier y Oficina de Turismo (el mismo que para el Free Tour), y Jorge, nuestro guía del día anterior, nos fue recogiendo los tickets de reserva del Tour para Kutna Hora.
Nos explicó un poco de que trataba el tour y cómo se iba a desarrollar el día y nos pusimos en marcha caminando hacia la Estación Central de Praga, desde dónde salía el tren.
Os dejo el link de la excursión de Sandemans, dónde os pone precio (26€ por persona) y os explica de que trata la excursión.
www.newpraguetours.com/ ...uesos.html
En los 26€ está incluido todo (guía, transporte, etc.) menos la comida. Os llevan a comer a un restaurante en Kutna Hora y tenéis que pagar la comida. Cada uno pide lo que quiere. El restaurante, luego os cuento que tal, pero ya os digo que nos encantó!
Llegamos a la Estación Central y Jorge fue a comprar los billetes para todos los que éramos. Fuimos al andén, y nos subimos al tren. Todo muy puntual.
Cuando pasa el revisor, si no estás sentado cerca del guía, le dices que vas en un tour y ya está. Jorge ya avisó al revisor de que llevaba todos los tickets.
Llegamos a Kutna Hora 55 minutos después de salir. Y tuvimos que coger un trenecito en la misma estación (incluido en el precio también), que nos llevaba al centro del pueblo.
Kutna Hora fue durante años uno de los centros económicos del Reino de Bohemia por la plata que se encontró en sus tierras.
Hoy día se ha convertido en un pueblo muy turístico por su patrimonio de edificios históricos, y sobretodo porque fue lugar de residencia de varios reyes de Bohemia.
Además, la atracción más turística, el Osario de Sedlec, es la Capilla de huesos de Kutna Hora, llena de huesos y calaveras humanas, en total se estima que puede haber los huesos de 40.000 personas. Muy impresionante de ver.
Llegamos con el trenecito al centro de Kutna Hora, y junto con las explicaciones de Jorge íbamos descubriendo varios edificios históricos y callejeando por las tranquilas calles del pueblo. Era muy bonito, y además no había nada de gente, todo muy tranquilo.






Era la hora de comer, y nos fuimos al restaurante. Os dejo la foto de la fachada, dónde sale el nombre, por si hacéis esta excursión por libre, si queréis podéis ir a comer. A nosotros nos encantó, está muy bien decorado, los precios eran buenos, y la calidad muy buena!
Pedimos de primero sopa de verduras y sopa de ajo, y de segundo ciervo y costillas. El ciervo estaba delicioso! Además unas cervecitas!!! Precio? 900 coronas (propina incluida), unos 33€ los dos.





Después de comer, era hora de seguir la ruta. Jorge seguía dándonos sus explicaciones, muy completas y buenas, de cada lugar que visitábamos. Entre ellas, nos explicó y enseñó cómo era el proceso de producción de las monedas de plata y como se repartía. Os dejo fotos.






Después de visitar la Iglesia de San Jaime, cogimos unos “taxis” que ya tenían reservados para todos, y nos llevaron a la Iglesia de los Huesos, el Osario de Sedlec.
El Osario de Sedlec es una capilla situada bajo la Iglesia del cementerio de Kutna Hora. Contiene en su interior 40.000 esqueletos humanos creando una decoración muy particular. Realmente impresionante!
La historia dice que Enrique (el abad del monasterio de la Orden del Císter de Sedlec) fue enviado a Tierra Santa, y trajo consigo tierra que esparció en el cementerio. Esto hizo que el cementerio fuera lugar dónde todo el mundo quería enterrarse, ya que se entendía que al contener tierra santa, era lugar santo.
Por eso, el cementerio se tuvo que ampliar, años más tarde se construyó la Iglesia en el centro del cementerio, y una familia que compró las tierras, mandó a un tallista a “decorar” la capilla con todos los huesos que allí se encontraban desde hacía siglos.
Total, que el resultado lo podéis ver a día de hoy en forma de pequeño museo. Toda la capillas está decorada con huesos, incluso las lámparas son huesos…








En este punto terminaba el tour, volvimos a la estación y una hora más tarde estábamos ya en Praga de vuelta. Jorge nos acompañó hasta el centro a todos los que quisimos ir, y allí ya se despidió de todos. Un muy buen guía, muy recomendable, y la excursión de Kutna Hora muy recomendable también.
Se puede hacer por libre, pero es verdad que las anécdotas y la manera que ha tenido Jorge de llevar la excursión nos gustó mucho.
Antes de despedirnos de Jorge, tuvimos un momento de “shock” total! Íbamos de camino hacia la Plaza Vieja cuando nos encontramos esto….


Imaginaros nuestras caras de… O_O En plan, nos han invadido???
Total, que Jorge enseguida nos quitó el susto!! Nos dijo que era el decorado de una película que estaban grabando!!! Menos mal!!!
Efectivamente estaba todo lleno de camiones y gente quitando la decoración.
Eran las 18.15h de la tarde cuando cruzamos la Plaza Vieja, con un color ya de atardecer…



Fuimos al apartamento a dejar las mochilas, a descansar unos minutos, y enseguida nos pusimos de nuevo en marcha. No queríamos perdernos el atardecer en el Puente de Carlos.
Fuimos andando hasta el puente de Carlos, y se notaba ya muchísima menos gente que el día anterior, a esas horas ya el puente es “paseable” con tranquilidad. Todo el castillo se fue iluminando y el sol fue bajando poco a poco. Unas vistas de postal.






Cruzamos el puente y nos fuimos a conocer la calle más estrecha del mundo! Os pongo el plano de dónde está para que nos os perdáis, porque es tan pequeña que casi no se ve!
Esta es la indicación exacta: Está entre la calle U Luzickeho Seminare y Chihelna, al otro lado del Puente de Carlos. En la entrada del restaurante Certovka, situada en el nº24 de la calle U Luzického Seminare, antes de llegar al Museo Kafka.

Nos hicimos las fotos de rigor en la calle estrecha, incluso tiene un semáforo para poder pasar.


Y volvimos hacia el puente, lo cruzamos, y nos fuimos hacia la Plaza Vieja. La idea era ver Praga de noche iluminada, pasear por sus calles, cenar unos frankfurts en los puestecitos de la calle…






Todo era precioso, Praga de noche tiene mucho ambiente y además es preciosa, además en la Plaza Vieja había un músico tocando en directo y fue un momento muy bonito. Callejeamos por toda la zona antigua, hasta Wenceslao y luego volvimos para tomar el Frankfurt, que reconozco que me decepcionó bastante jeje En Berlín probamos unos buenísimos, y en Nueva York también, pero estos de Praga no estuvieron a la altura, el precio fueron 160 coronas (2 frankfurts + bebida), unos 6€ los dos.
De postre decidimos probar el típico dulce que vimos en varios puestecitos y que me llamó la atención! Lo pedimos con nutella, y estaba delicioso!!! Salía por 70 coronas cada uno, 2,50€.


Entró muy bien, calentito y con el frío que teníamos nos dejó muy buen cuerpo.
Paseando volvimos al apartamento y a descansar, había sido otro día perfecto en Praga. Sólo nos quedaba un día…