El desayuno muy bueno, sus mermeladas que ellos mismos hacían , soberbias!.
Tras despedirnos amablemente diciendo lo afortunados que éramos con el tiempo, solazo, nos pusimos rumbo al ansiado Eilean Donan Castle, a 46’, atravesando valles y lagos, una gozada de carretera, la verdad
A las 10:15 estábamos delante del castillo, que decir de él, es una postal! Y con ese cielo azul más aún; encima había una boda escocesa, ellos súper elegantes con sus mejores Kilts, gaiteros…menudo sitio idílico para casarse, a pesar del fresquete.
No se las fotos que pudimos hacer por aquellos lares, pero tras una hora y mirando el castillo para retenerlo para siempre en nuestras retinas, nos fuimos con rumbo a St Andrews y los restos de su catedral, a 4 horas de distancia , parando eso si a hacer fotos de postal a estos bellos parajes.
Es lo que tiene venir pocos días y encima perder dos (el de ida y el de vuelta) por la basura de horarios de Ryanair desde Santander pero bueno por 72€ ambos id/vta y ya de venir 3 días completos, aprovecharlos; Mencionar que los días de coche comimos wraps y bocatas que llevábamos comprados, así como embutido que trajimos de España, ensaladas hechas y Humus para untar .
Lo cierto es que estábamos un poco hartos de bocatas etc, así que decidimos parar de camino en el pueblo de Pitlochry (2h 40’), que había leído que era muy chulo, y la verdad es que con sus casas terminadas en pico, sus aun nevadas/heladas calles y su ambientazo aun navideño, nos encantó a ambos.
A pesar de algún que otro cuervo que daban mal rollo
Aquí compramos unos fish & chips que, con el bote de mayonesa que aun teníamos, disfrutamos en unas mesas estupendamente; también fue donde encontramos los mejores precios en cuanto a cajas de galletas, bombones, detalles de gaiteros como jarra del café o para guardar el azúcar y la sal etc.. No nos pudimos resistir.
Un puzle no podía faltar
Una hora y media después llegábamos a St Andrews, a eso de las 16:40. Los restos de la que fue en su día la mayor catedral de escocia son magníficos; el frío que hacía junto al mar, también era espectacular, la sensación térmica debía ser de -4 o -5 grados mínimo debido al aire.
Fuimos caminando viendo el castillo, y varias universidades asi como la sede principal; una ciudad llena de ambiente y bares para comer etc, con sus augustos edificios de piedra limpia, al contrario que la “Auld Reekie”, la vieja apestosa/humeante de Edimburgo. En resumen nos gustó (además fue donde el príncipe Guillermo y Kate fueron a la universidad y se conocieron, cómo me comentó mi mujer).
Teníamos reservado para esa última noche el Ibis Budget al lado del aeropuerto, ya que saliendo el vuelo a las 8:20am no queríamos estar muy lejos, teniendo que devolver el coche antes. De camino paramos en un Lidl a comprar cosas para la cena. Cómo no nos quedaba muy lejos del hotel nos fuimos a la Rosslyn Chapel, donde llegamos ya totalmente de noche, a ver si se podía ver algo o la tenían iluminada…error, la tienen tras un muro, totalmente apagada y solo se puede acceder previo pago por un centro desde el que un vigilante nos observaba con cara de: Where are you going dickheads? Así que tras casi resbalar varias veces en la nieve pusimos rumbo al hotel, parando en una gasolinera ya que debíamos entregar el coche con el depósito lleno.
Hotel muy correcto, económico, 45 libras, con microondas frente a la recepción en donde calentamos unas mini pizzas que habíamos cogido en el Lidl, cenando viendo Cuentamé en la Tablet gracias a la Wifi .
Una ducha y a dormir que tocaba madrugar para coger el avión :#l(