Que día tan intenso, que torrente de emociones…mi relación con el Machu Picchu ha pasado por todas las fases posibles, de la desesperación porque al levantarnos llovía, a la frustración cuando al entrar al complejo comprobamos que no se veía un palmo, a la esperanza cuando el cielo comenzó a abrir, a la resignación cuando alcanzamos la puerta del sol (Intipunku) y poco antes de llegar el cielo se cerró del todo de nuevo no permitiéndonos disfrutar de esas vistas, al éxtasis más absoluto cuando de repente el cielo se abrió permitiéndonos al fin tras 5 horas en el recinto en mi caso con lágrimas en los ojos de la emoción ver la Magia del Machu Picchu.
Pero empecemos por el principio...
Cuando llegamos la noche anterior las casetas de venta de entrada del bus estaban ya cerradas, así que cenamos y nos fuimos a dormir.
Yo quería levantarme a ver el amanecer en el Machu Picchu pero mi marido se negó en redondo. Él decía que si íbamos a quedarnos hasta el cierre no era necesario, yo alegaba que si tienes la oportunidad de estar un día entero en una maravilla del mundo teníamos que aprovecharlo… Al final alguien tiene que ceder y fui yo... Podría haberme ido sola pero quería disfrutarlo con él. Así que en vez de a las 4.30 nos levantamos a las 7.30 desayunamos tranquilos, dejamos la mochilas en recepción y fuimos de nuevo a comprar los billetes del bus.
Estuvimos casi media hora haciendo cola, un problema eléctrico no les dejaba imprimir las entradas, la ansiedad salía por mis poros, quería subir ya..
Mientras hacíamos cola una guía nos ofreció sus servicios por 15 soles, teníamos claro que el lugar requería de un guía así que accedimos. Cuando por fin conseguimos los tickets de bus 24 dolares i/v ( no os olvidéis el pasaporte, os lo pedirán) la guía aún estaba formando grupo.
Yo no quería esperar así que nos ofreció a posibilidad de pagar 20 soles a los 5 que estábamos e irnos ya a lo que accedimos.
El Machu Picchu nos esperaba…
La sinuosa carretera tapada por una densa niebla no nos deja ver nada. Tenemos la esperanza de que la niebla desaparezca al menos en parte pero cuando al fin accedemos l al Machu Picchu vemos con desesperanza que todo sigue igual, anhelaba de entrar al Machu Picchu y ver esa imagen que siempre tienes en tu mente, pero la niebla no lo permitió. Las montañas estaban tapadas.
toda la vida esperando este momento y esta fue mi primera visión...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Vista la situación fue un acierto pasar 2 horas ente los muros de la ciudadela escuchando con atención la historia que rodea al Machu Picchu. Fascinante ver cómo estuvo olvidada siglos hasta la llegada de Hiran Bingham que hizo poner en el mapa la ciudadela Inca. Que sentiría ese señor al descubrir semejante maravilla?
Pese a la explicación al igual que me pasó en las pirámides de Egipto mi mente no paraba de hacerse preguntas.
Como fue posible construir el Machu Picchu a casi 3000 metros de altitud?
Como movieron esas piedras?
Por qué se olvidó tras siglos construyéndolo?...
Tras terminar la visita guiada dado que la situación no había mejorado demasiado decidimos salir del recinto un rato. Teníamos que ir al baño y aprovecharíamos para comer algo en uno de los 2 restaurantes que hay fuera antes de volver a descubrir por nosotros mismos las maravillas del lugar.
Aquí hago un inciso para contaros que si como a mi os encanta tener sellos en el pasaporte que sepáis que el Machu Picchu tiene sello propio, fuera del recinto hay un tejadillo donde podréis estampar en el vuestro su sello.
Mientras comíamos comenzó a llover.. esto no mejoraba,


Si como yo decidís comprar la entrada básica al Machu Picchu descartando subir al Huanapichu o la montaña podéis subir a la puerta del Sol; Y que es la puerta del sol? el punto de acceso de las personas que accedían al Machu Picchu tras recorrer el camino del Inca, igual que sucede en la actualidad.
las personas que ingresaban a Machu Picchu tras recorrer el Camino Inca, tenían su primera visión de este lugar aquí.
Si sois de los afortunados que realizáis el camino del Inca entraréis por este lugar..
Tardamos casi una hora en subir a la puerta del sol. El camino aunque cuesta arriba bastante accesible, acompañados de una llovizna molesta que de vez en cuando nos permitía entrever las montañas.
Subiendo a la puerta del Sol
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Las nubes jugando con mis ilusiones
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Las nubes jugando con mis ilusiones
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Llegamos al Intipunku y nos sentamos, estuvimos más de media hora viendo las nubes moverse esperando que en algún momento el cielo se abriera algo pero no sucedió, apenas intuimos las montañas unos momentos..
Resignados comenzamos la bajada. Cuando estábamos llegando al final casi 5 horas después de nuestra entrada al recinto el cielo comenzó a abrirse,

mi primera visión del Machu Picchu...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Al fin se abre el cielo...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Al fin se abre el cielo...
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Un poco más de zoom
Definitivamente este viaje me ha regalado momentos irrepetibles que se van a quedar en mi retina y alma para siempre.
No sé cuanto tiempo estaríamos allí pero cuando miramos el reloj eran las 3 de la tarde. Bajamos para disfrutar de nuevo la ciudadela esta vez iluminada por el reflejo del sol y flanqueada por el verde de las montañas no sin antes pasar por la caseta del guardián que es donde se obtiene la mejor foto del Machu Picchu y que desafortunadamente parecía la cola del metro.. todos intentando hacerse la foto allí.
Imagen más emblemática del Machu Picchu
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Empezamos el descenso por las terrazas, increíblemente en la ciudadela apenas había gente, se nota que se aproxima la hora del cierre,.. recorremos de nuevo todo el lugar pero esta vez deleitánndonos con las vistas de las montañas que protegen el Machu Picchu hasta el momento desconocidas para nosotros.
La embellecen sobremanera, el entorno es simplemente espectacular,...
Como una imagen vale más que mil palabras el Machu Picchu en todo su esplendor..
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Con pena poco antes de las 5 salimos del recinto volvemos a tomar un autobús camino a Aguas Calientes, el día ha sido tremendamente intenso pero maravilloso. Definitivamente hay lugares que por mas fotos que hayas visto te sobrecogen el alma.
El Machu Pichu es uno de ellos al menos en mi caso.
Volvimos al hotel en un estado de felicidad absoluta, recogimos nuestra mochila y nos dirigimos a la estación de tren haciendo tiempo en el mercado que hay al lado hasta la hora de salida.Nos pasamos todo el camino viendo las fotos aún no nos creíamos que acabáramos de estar ahí, era como un sueño.
Llegamos ya de noche cerrada a Ollantaytambo paramos en un restaurante a cenar y aún con la sonrisa en la boca nos fuimos al hotel a descansar, si es que podíamos.
Este recuerdo nos acompañará toda la vida..
*** Imagen borrada de Tinypic ***